Según una pregunta publicada en 2014 en Preevid (ver abajo), en esos momentos se recomendaba la profilaxis antibiótica en pacientes sometidos a hernioplastia inguinal con la finalidad de reducir la tasa de infección del área quirúrgica.
Se ha actualizado la búsqueda de información tanto para hernioplastia como para herniorrafia inguinal y se observa falta de unanimidad en cuanto a las recomendaciones elaboradas por las diferentes entidades y autores, variando en función del tipo de intervención, las características del paciente y el riesgo de infección del entorno sanitario.
[A menos que expresamente la información que aportamos de algún documento diferencie entre hernia inguinal y hernia femoral, en la presente revisión, el término hernia inguinal (groin hernia) incluye la hernia femoral].
El sumario de evidencia (SE) de BMJ Best Practice sobre la hernia inguinal del adulto(1) comenta que el uso de la profilaxis antibiótica en la reparación de la hernia no complicada es un tema controvertido, fundamentalmente por la baja tasa de infección de localización quirúrgica (ILQ). Su indicación sería:
- En entornos con baja incidencia de infección (≤5%):
- se sugiere su uso en pacientes de alto riesgo en los que se realiza reparación abierta con malla;
- no es necesaria en la reparación abierta con malla del paciente de riesgo medio.
- En entornos con incidencia de infección >5% está recomendada en todas las reparaciones con malla.
- No se recomienda en la reparación laparoscópica.
- Debería administrarse a los adultos con hernia incarcerada o estrangulada.
Según el SE de UpToDate sobre la profilaxis antibiótica en la cirugía gastrointestinal(2) estaría justificado el uso de la profilaxis tanto en las hernioplastias como en las herniorrafias.
Sin embargo, según los autores del SE sobre el manejo de la hernia inguinal y femoral(3), también de UpToDate, en el manejo de una hernia inguinal o femoral no complicada en la que no se utiliza una malla el uso de la profilaxis podría omitirse en función de las preferencias del paciente; sí que sugieren usarlos en el caso de que se utilice malla. Este sumario coincide con el de BMJ Best Practice en que se trata de un tema controvertido. Aclara que, aunque la reparación de una hernia no complicada se considera una cirugía limpia y, por tanto el uso de la profilaxis antibiótica no estaría indicada, algunos cirujanos (incluidos los autores de este sumario) prefieren utilizarla en todas las hernioplastias para prevenir la posible infección de la malla. En las reparaciones urgentes sí que debería administrarse.
El sumario menciona una revisión sistemática (RS) Cochrane de 2020(4) según la cual el uso de antibióticos tuvo poco o ningún efecto en la prevención de las infecciones quirúrgicas en las reparaciones electivas de hernias mediante cirugía abierta en entornos de bajo riesgo de infección, pero podrían resultar beneficiosos para prevenir las infecciones superficiales de las heridas en entornos de alto riesgo de infección.
En cuanto a las guías de práctica clínica (GPC), se han revisado aquellas publicadas en los últimos 5 años:
Las recomendaciones* al respecto de la GPC de 2023 sobre hernia inguinal del grupo HerniaSurge(5) (última búsqueda bibliográfica para su elaboración realizada en abril de 2022) son:
- En entornos con bajo riesgo de infección no se recomienda la profilaxis antibiótica en cirugía programada abierta de hernia inguinal (evidencia xxxx, recomendación fuerte).
- En entornos con bajo riesgo de infección se sugiere el uso de la profilaxis antibiótica en la reparación programada con malla de pacientes de alto riesgo (evidencia xx, recomendación débil).
- En entornos con alto riesgo de infección se recomienda la profilaxis antibiótica en la reparación programada con malla de cualquier paciente (evidencia xxxx, recomendación fuerte).
- No se sugiere el uso de la profilaxis en la reparación laparoscópica programada de ningún paciente, independientemente del riesgo de infección del entorno (evidencia xxx, recomendación débil).
Otra GPC de la colaboración HerniaSurge sobre hernia inguino-escrotal(6) realizó la revisión bibliográfica hasta el 31 de marzo de 2021. Según este documento, debido a su mayor riesgo de complicación y una duración más prolongada de la cirugía, se recomienda el uso de la profilaxis en todos los pacientes con hernia inguino-escrotal, independientemente del entorno en que se realice (evidencia baja, recomendación fuerte*).
En nuestro contexto sanitario, la GPC de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica y la Asociación Española de Cirujanos(7) (búsqueda hasta octubre de 2018) sobre profilaxis antibiótica en cirugía recomienda* la profilaxis en la herniorrafia y hernioplastia inguinal abierta (B-II), pero no en la hernioplastia inguinal laparoscópica (D-I). No obstante, algunos autores han cuestionado estas recomendaciones(8,9).
Varios de los documentos arriba mencionados han revisado la RS Cochrane nombrada por UpToDate que evaluó la efectividad de la profilaxis con antibióticos en la reducción de infecciones en la reparación abierta programada de la hernia inguinal y la femoral(4). La búsqueda bibliográfica se realizó el 12 de noviembre de 2019 y se incluyeron 27 ensayos clínicos aleatorizados (ECA) con un total de 8.308 pacientes. Entre sus resultados encontramos que la profilaxis con antibióticos en comparación con placebo:
- Probablemente logra poca o ninguna diferencia en la reducción de la infección profunda, tanto en un entorno de bajo riesgo de infección (riesgo relativo [RR] 0,67; intervalo de confianza [IC] del 95%: 0,11-4,13; evidencia de calidad moderada) como en un entorno de alto riesgo de infección (RR 0,64; IC del 95%: 0,22-1,89; evidencia de calidad baja).
- Probablemente logra poca o ninguna diferencia en la prevención de la herida superficial en entornos de bajo riesgo de infección (RR 0,71; IC del 95%: 0,44 a 1,17; evidencia de calidad moderada).
- Se desconoce si reduce la infección superficial en entornos con alto riesgo de infección: (RR 0,56; IC del 95%: 0,41 a 0,77; evidencia de calidad muy baja).
- Además, según el tipo de intervención:
- Infección total en herniorrafia en entornos de bajo riesgo de infección: RR 0,63, IC 95% 0,28-1,41, 4 estudios (639 vs 663 pacientes).
- Infección total en herniorrafia en entornos de alto riesgo de infección: RR 0,99, IC 95% 0,58-1,68, 1 estudio (283 vs 280 pacientes).
- Infección superficial en hernioplastia en entornos de bajo riesgo de infección: RR 0,71, IC 95% 0,44-1,17, 9 estudios (1.526 vs 1.574 pacientes).
- Infección superficial en hernioplastia en entornos de alto riesgo de infección: RR 0,56, IC 95% 0,41-0,77, 12 estudios (1.779 vs 1.384 pacientes).
- Infección profunda en hernioplastia en entornos de bajo riesgo de infección: RR 0,67, IC 95% 0,11-4,13, 3 estudios (743 vs 745 pacientes).
- Infección profunda en hernioplastia en entornos de alto riesgo de infección: RR 0,64, IC 95% 0,22-1,89, 9 estudios (1.546 vs 1.151 pacientes).
De publicación posterior se han identificado otras 2 RS de interés.
La primera(10) realizó la última búsqueda bibliográfica en agosto de 2020 y evaluó el uso de la profilaxis antibiótica (urgente o electiva) en la reparación abierta de la hernia inguinal. Se seleccionaron 29 ECA con 8.616 pacientes (4.718 recibieron profilaxis y 3.898 no). Sus resultados muestran:
- El uso de antibióticos se asoció con una reducción significativa de infección superficial del sitio quirúrgico (RR 0,56, IC 95% 0,43-0,72, p < 0,0001; 23 ECA; n 6,658; evidencia de baja calidad).
- No hubo diferencia significativa en cuanto a infección profunda (RR 0,70, IC 95% 0,30-1,62, p = 0,40; 14 ECA; n 4.638; evidencia de baja calidad).
La segunda(11) realizó la búsqueda de estudios indexados hasta el 22 de marzo de 2022 y evaluó la profilaxis antibiótica en la reparación programada con malla de la hernia inguinal (directa o indirecta, no complicada). Se incluyeron 31 ECA con 7.868 pacientes (3.757 con antibiótico y 4.111 sin él). Según sus resultados:
- La incidencia total de ILQ fue menor en el grupo de profilaxis: RR 0,61, IC 95% 0,44-0,84, P 0,003, 17 estudios (1.937 vs 2.308).
- La incidencia de infección profunda fue menor en el grupo de profilaxis, aunque sin diferencia estadísticamente significativa: RR 0,60, IC 95% 0,25-1,45, P 0,26, 11 estudios (1.458 vs 1.448).
- La incidencia de infección superficial fue menor en el grupo de profilaxis: RR 0,59, IC 95% 0,41-0,84, P 0,004, 11 estudios (1.400 vs 1.390).
No se han identificado ECA de publicación posterior a los incluidos en estas RS.
Por último comentar, que la guía de profilaxis antibiótica en cirugía de la Región de Murcia(12), recomienda su uso tanto en herniorrafia como en hernioplastia.
*Consultar niveles de evidencia y grados de recomendación en los documentos referenciados.