En 4 Guías de Práctica Clínica (GPC) para la lactancia materna con respecto a la utilización/conservación de la leche materna (LM) extraída, indican en general que no se debe volver a utilizar o congelar (sobre todo si ha sido previamente descongelada) las porciones de LM calentadas al baño de maría y de conservarse debe hacerse un tiempo máximo de 1-2 horas. Por lo que recomiendan guardar en contenedores de entre 60 ml a 120 ml que son las cantidades que habitualmente consumen los bebés en cada toma, y por lo tanto calentar esas cantidades, lo que evitará tener que desechar los residuos no ingeridos.
Sin embargo, el documento de información a las madres que incluye un SE de Uptodate, indica que la LM descongela se puede volver a congelar.
Una GPC(1) con recomendaciones sobre el almacenamiento de la LM extraída señala que:
- Hay poca información sobre volver a congelar LM descongelada, por lo que no se pueden hacer recomendaciones. El crecimiento bacteriano y la pérdida de actividad antibacteriana en la leche descongelada variarán dependiendo de la técnica y la duración de la descongelación, y de la cantidad de bacterias en la leche en el momento de la extracción.
- La LM que ha sido descongelada durante 24 horas no se debe dejar a temperatura ambiente más de unas pocas horas.
- Una vez que un bebé comienza a beber LM extraída, se produce cierta contaminación bacteriana a través de su propia boca. El tiempo que se puede mantener a temperatura ambiente, una vez que el bebé se ha alimentado parcialmente del biberón, teóricamente dependerá de la carga bacteriana inicial en la LM extraída, cuánto tiempo ha estado descongelada, y la temperatura ambiente. No se han realizado estudios para hacer recomendaciones al respecto. Basándose en la evidencia relacionada, parece razonable desechar el resto de la leche dentro de 1 a 2 horas después de que el bebé haya terminado de comer.
Señala la GPC que la ingesta de leche en cada toma es habitualmente de 60 a 120 ml de LM extraída. Por lo tanto, el almacenamiento de LM en envases de 60 a 120 ml es una forma de evitar el desperdicio de LM descongelada. Por otra parte, se debe evitar añadir leche caliente a leche refrigerada o congelada, a fin de evitar el recalentamiento de la leche ya almacenada. Se debe enfriar la LM de nueva extracción antes de añadirla a la leche más antigua almacenada.
Tres GPC posteriores señalan:
Una de las GPC(2), con respecto al almacenamiento de la LM extraída, indica que los requisitos para los bebés enfermos o prematuros en el hospital son mas estrictos que para los bebés saludables en el hogar.
Indica que cuando se trasporta la LM debe hacerse en una nevera portátil (con ladrillo congelador) y si una parte de la LM se ha descongelado debe ser utilizada dentro de las 4 horas siguientes y no volverla a congelar.
La segunda GPC(3), para la lactancia saludable en recién nacidos a término, con respecto a la alimentación con LM extraída recomienda:
- La leche descongelada en un refrigerador (que ha sido previamente congelada), debe usarse dentro de 24 horas y no se debe volver a congelar.
- La leche previamente congelada y posteriormente llevada a temperatura ambiente es segura, pero se debe desechar lo que sobre después de la alimentación.
La tercera GPC(4) sobre nutrición en los bebés prematuros, entre las pautas de almacenamiento de la LM extraída recomienda:
- Almacenarla en porciones separadas de unos 60 a 120 ml, cantidad que se supone se va a consumir en cada toma, puede reducir los residuos desechados.
- Usar la LM descongelada en las siguientes 24 horas. Nunca volver a congelar.
- No se sabe si la LM que queda en el biberón después de alimentar al bebé se puede mantener de forma segura hasta la siguiente toma o si debe ser desechada. En general se recomienda descartar una a dos horas después de la alimentación. No volver a refrigerar la leche sobrante para más adelante.
Sin embargo, el documento de información a las madres que incluye el SE (5) de Uptodate sobre la extracción de LM para el recién nacido prematuro señala que:
- La LM que se congela y descongela se puede volver a congelar.
Aunque indica que debe ser almacenada en pequeñas cantidades. Y aunque se puede combinar la leche de distintas extracciones, debe ser enfriada en la nevera antes de combinarla; y la LM que se ha calentado y refrigerado no debe mezclarse con LM congelada. La LM más antigua debe utilizarse primero.
Por otra parte, dos de las GPC(1,4) señalan que, en raras ocasiones, la LM almacenada puede tener un olor y sabor alterado debido a que la leche de algunas mujeres tienen un alto contenido en lipasa, enzima que descompone las grasas en ácidos grasos. Esta descomposición de la grasa ayuda a digerir al bebé la LM, en particular a los recién nacidos prematuros, y no es perjudicial, aunque algunos bebés pueden rechazarla. Para evitar este rechazo, una de las GPC(1)recomienda no calentarla por encima de 40 ° C porque producirá la pérdida de la actividad enzimática. Sin embargo, la otra GPC(4) recomienda escaldar los lotes de LM (sumergiendo en agua hirviendo durante 10 y 20 segundos aproximadamente) después de la extracción, tras esto enfriar y finalmente congelar rápidamente, lo que desactivará la lipasa.
Con respecto a la temperatura y a la forma de congelar, descongelar y calentar la LM extraída, una de las GPC (3) recomienda:
- Nunca calentarla en el microondas.
- Introducir el envase en agua tibia unos minutos o mantenerlo bajo agua caliente del grifo, evitando que entre agua.
- A los bebés se les puede dar leche fría (temperatura ambiente)
- La LM recién extraída es segura a temperatura ambiente durante 4 - 6 horas.
- Puede refrigerarse (≤4 ° C) durante un máximo de 8 días.
- La LM recién extraída que se ha refrigerado previamente se puede añadir a la ya congelada; si el bebé está enfermo u hospitalizado, usar un contenedor diferente cada vez que es extraída.
- Puede congelarse durante un máximo de 12 meses para los recién nacidos a término (a -20 ° ± 2 ° C). Tras asegúrese de que está completamente descongelada, agitar antes de administrarla, pues la materia grasa de la LM suele separarse de los demás componentes al congelarse.
El SE de Uptodate(5), con respecto a la temperatura señala que:
- La temperatura a la que se almacena la leche depende de la duración prevista de almacenamiento antes de la alimentación. Muchas de las propiedades antimicrobianas de protección de la LM son sensibles a la temperatura.
- Calentar, congelar, descongelar y almacenar de forma prolongada provoca cierta pérdida de su bioactividad. Aunque las propiedades de protección antimicrobiana y nutricional de la LM congelada y almacenada permanezcan, la que se administra inmediatamente después de la extracción ofrece más alto grado de bioactividad natural. Por lo que, siempre que sea posible, se recomienda que al menos una toma al día sea de leche fresca/recién extraída (nunca extraída y congelada dentro de las 96 horas).
- La leche se puede calentar gradualmente a aproximadamente 37ºC en un baño de agua tibia (no más de 20 a 30 minutos). El calentamiento rápido o en microondas es desfavorable en cuanto a las propiedades inmunológicas y nutricionales. Si el bebé está en incubadora, la jeringa de alimentación se puede colocar un rato antes dentro de la incubadora para el calentamiento gradual. Se debe etiquetar la botella con fecha y hora en que se descongela la leche.
- Según la Asociación de Bancos de Leche Humana de América del Norte y la Asociación Dietética Americana se hacen las siguientes recomendaciones de temperatura para el almacenamiento de la LM extraída para lactantes hospitalizados. La temperatura depende del tiempo de la extracción y cuando se utilizará:
- A temperatura ambiente (25 a 27º C): utilizar en las siguientes 4 horas tras la extracción.
- Refrigerada (1 a 4º C): utilizar en las siguientes 4 y 48 horas tras la extracción.
- Congelada (-18 a -20 ° C), utilizar entre las 48 horas y 3 meses tras la extracción.
El almacenamiento prolongado en el hogar o fuera de la supervisión del personal hospitalario debe desaconsejarse para reducir la posibilidad de congelación/descongelación o contaminación inadvertida.