Para contestar a esta pregunta,nos hemos basado en la respuesta que se realizó en el año 2015(1) en este Servicio. Se ha actualizado y ampliado la búsqueda de información.
Según 4 Guías de Práctica Clínica (GPC)(2-5) consultadas y un protocolo de The Academy of Breastfeeding Medicine(6) revisado en 2017, indican que la leche materna que ya ha sido descongelada, calentada y no utilizada, se debe despreciar, nunca volver a congelar. El protocolo expresa que hay poca información sobre la recongelación de la leche humana descongelada. El crecimiento bacteriano y la pérdida de actividad antibacteriana en la leche descongelada variarán dependiendo de la técnica de descongelación de la leche, la duración de la descongelación y la cantidad de bacterias en la leche en el momento de la extracción. De momento, manifiestan los autores que no se pueden hacer recomendaciones con respecto a volver a congelar la leche humana descongelada.
Por otra parte existe un sumario de evidencia (SE)(7), que basándose en un estudio realizado en el año 2006(8), concluye que la leche humana no pasteurizada que se ha descongelado en el refrigerador y se mantiene durante 8 horas a temperatura ambiente o 24h conservada en nevera, puede volver a congelarse de manera segura. Refiere este estudio, que la leche humana no pasteurizada es un producto bastante robusto que puede soportar una cierta fluctuación ambiental sin presentar un riesgo para la salud o perder su valor nutricional. Los datos de crecimiento bacteriano no pudieron indicar ninguna correlación directa entre el tiempo y la temperatura en la carga biológica de la leche. El estudio no duró más de 24 horas, y es razonable suponer que un período de observación más largo, habría dado lugar a un crecimiento típico de los organismos que se encuentran en la leche materna, particularmente en aquellas muestras mantenidas a temperatura ambiente.
Este mismo SE expresa que se debe desalentar el almacenamiento prolongado de leche en el hogar o el almacenamiento fuera de control sanitario para reducir la posibilidad de congelación / descongelación sin control o contaminación de la leche materna.