Tras la búsqueda se han encontrado: 2 Revisiones Sistemáticas (RS), 1 Best Practice (BP), 1 Guías de Práctica Clínica (GPC), 1 Guías Clínica y un protocolo. En general, recomiendan las sondas vesicales de silicona (o de látex recubiertas de silicona) por ser las que provocan estenosis uretral con menor frecuencia y ser muy resistentes a la incrustación. Las RS recomiendan realizar ensayos de mejor calidad para abordar la falta de pruebas en esta área.
Una RS(1), cuya búsqueda es hasta febrero de 2005, determina los tipos de sondas urinarias permanentes para el drenaje vesical a largo plazo en adultos. Incluye tres ensayos con 102 adultos, en diversos ámbitos. En dos de los ensayos que compararon diferentes tipos de sondas estándar, las estimaciones de las diferencias fueron imprecisas debido a que los ensayos tuvieron tamaños de la muestra pequeños, los intervalos de confianza fueron demasiado amplios para descartar diferencias clínicamente importantes. Sin embargo, un ensayo indicó que el uso de una sonda de látex recubierta con hidrogel puede ser mejor tolerada que una sonda de silicona (RR para la necesidad de extracción temprana 0,41; IC del 95%: 0,22 a 0,77).Los autores de la RS concluyen que muy pocos ensayos han comparado los tipos de sonda para el drenaje vesical a largo plazo. Todos fueron pequeños y mostraron debilidades metodológicas. Por lo tanto, las pruebas no fueron suficientes y no sirvieron como base para establecer conclusiones prácticas. Los autores recomendaron realizar ensayos de mejor calidad para abordar la falta de pruebas en esta área clínicamente importante. La actualización de la RS(2), cuya búsqueda fue hasta marzo de 2011, no reveló ningún estudio adicional, por lo que no cambian las conclusiones.
El BP(3), para el manejo de las sondas vesicales permanentes de corta duración (de 1 a 14 días) para la prevención de las infecciones del tracto urinario, está basado en los resultados de una RS(4). Seis de los estudios incluidos se centran en la composición de la sonda, no encontrando diferencias significativas en las tasas de infección relacionadas con las sondas de látex o de silicona. No obstante, se encontró una diferencia estadísticamente significativa en el día 6 a favor de las sondas recubiertas de plata respecto a las sondas de Foley de látex recubiertas con teflón. El BP recomienda la retirada temprana para prevenir las infecciones y facilitar el alta temprana (Grado B) (*).
Una GPC(5) para la prevención de las infecciones del tracto urinario relacionadas con los catéteres, con respecto al material de elección de los catéteres recomienda, para prevenir la obstrucción los de silicona frente a otros materiales, pues reducen el riesgo de incrustaciones en pacientes cateterizados a largo plazo y con obstrucción frecuente. (Categoría II)(*). Para los pacientes quirúrgicos que tienen una indicación de un catéter permanente, recomienda retirar el catéter tan pronto como sea posible tras la operación, preferiblemente dentro de las 24 horas, a menos que haya indicaciones apropiadas para su uso continuado (Categoría IB)(*). También recomienda que se deben poner en marcha protocolos para la monitorización (con alertas) de los catéteres para, entre otros objetivos, retirarlos cuando sea necesario y que el tiempo de duración de la cateterización no se exceda (Categoría IB)(*).
La Guía de Fisterra(6) para el cateterismo o sondaje vesical (realizada por consenso de profesionales), indica que el material con el que ha sido elaborado el catéter va a determinar sus características (elasticidad, coeficiente de fricción (preferiblemente bajo), biodurabilidad (tiempo máximo de permanencia sin deteriorarse), biocompatibilidad (capacidad de inducir reacciones o toxicidad), tendencia a la incrustación (precipitación de mucoides y cristaloides) y tendencia a la adherencia bacteriana). Con respecto al látex y a la silicona señala:- El látex ha sido el material de uso estándar, ya que es blando y maleable. Sin embargo, puede presentar incrustación rápida y toxicidad local con inducción de estenosis uretral. Su duración es de hasta 45 días.
- La silicona es más adecuada para el sondaje permanente, al ser más biocompatible (provoca estenosis uretral con menor frecuencia) y muy resistente a la incrustación. Sin embargo, su excesiva flexibilidad obliga a fabricar catéteres de paredes gruesas y con orificios de drenaje pequeños, mientras que su permeabilidad permite el desinflado progresivo del balón de retención (lo que conduce a la pérdida de la sonda o al recambio precoz). Como los catéteres de silicona pura son más caros, la mayoría están fabricados con látex que se recubre con silicona o teflón para mejorar su tolerancia y facilitar su inserción. Pueden durar hasta 90 días.
Con respecto al “tiempo de duración de las sondas” puede completar la respuesta consultando otra pregunta ya incluida el 08/03/2011 en el Banco de Preguntas del Servicio Preevid “¿Cada cuánto tiempo debo cambiar la sonda vesical en un paciente con sondaje vesical permanente?” (mirar abajo, en Preguntas Relacionadas).
(*) Ver Niveles de Evidencias y Grados de Recomendación en la GPC.