Se han localizado cinco Guías de Práctica Clínica (GPC) (1-5). Todas coinciden, para la prevención de infecciones del tracto urinario, en recomendar el uso de una técnica aséptica durante la inserción de los catéteres urinarios, y equipos estériles: guantes, paños y esponjas estériles, una solución antiséptica o estéril apropiada para la limpieza periuretral, y un paquete de un solo uso de lubricante para la inserción. Aunque no es necesario el uso rutinario de lubricantes antisépticos.
Una de las GPC(4) define la técnica aséptica como aquella que asegura que sólo equipos y fluidos no contaminados entren en contacto con sitios del cuerpo susceptibles. Señala que se debe utilizar durante cualquier procedimiento clínico que evite las defensas naturales del cuerpo. El uso de los principios de asepsia minimiza la propagación de organismos de una persona a otra.