Existe en el Banco de preguntas de Preevid una duda publicada en 2010 en la cual se cuestionaba la indicación y la efectividad del uso de finasterida en mujeres posmenopáusicas con alopecia androgenética (AAG) (ver abajo).
Los resultados de la nueva búsqueda realizada continúan sin apoyar la utilización de finasterida en mujeres posmenopáusicas con AAG al no haber datos concluyentes respecto a su efectividad. Se resalta en los documentos seleccionados la necesidad de estudios de calidad que permitan establecer conclusiones firmes al respecto.
En una guía de práctica clínica (GPC) publicada en 2011(1) se establece, respecto al papel de finasterida en el tratamiento farmacológico de la AAG en mujeres que los resultados de los estudios disponibles son contradictorios, y que es limitada la evidencia objetiva de su eficacia. No obstante, añade que los expertos recomiendan que la finasterida (2,5 mg - 5 mg/día) se puede utilizar en pacientes que no responden al tratamiento con minoxidil y que son escasas las reacciones adversas notificadas por mujeres que recibieron finasterida. (Recomendación grado I; evidencia de pobre calidad)*
Se recuerda además que finasterida tiene una categoría X durante el embarazo y no debe utilizarse, o incluso manejarse, por mujeres que están embarazadas o pueden quedar embarazadas.
En otra GPC de 2011(2) que revisa el tratamiento de la AAG en hombres y mujer, se señala respecto a finasterida que en mujeres postmenopáusicas la dosis de 1 mg no mostró eficacia (nivel de evidencia 2)*. Se considera necesaria investigación adicional con dosis más altas y en diferentes subgrupos de pacientes de sexo femenino con AAG. Como recomendación terapéutica se indica en la guía que no se sugiere en el tratamiento de mujeres posmenopáusicas con pérdida de cabello de patrón femenino el uso de finasterida oral (1 mg diario); añadiendo que son precisos ensayos clínicos controlados de alta calidad que evalúen la utilización de finasterida a diferentes dosis en pacientes de sexo femenino.
En el sumario de evidencia de Uptodate sobre el tratamiento y pronóstico de la AAG(3) se comenta que aunque algunos estudios e informes de casos indican que ciertos agentes sistémicos, entre ellos la finasterida, pueden mejorar la AAG, los datos sobre la eficacia de estas terapias son limitados. Se sugiere que antes de establecer una recomendación sobre el uso rutinario de la finasterida para la AAG, son necesarios estudios que aclaren la población de mujeres con AAG que pueden beneficiarse del tratamiento e identifiquen el régimen de tratamiento más adecuado.
Una revisión sistemática de la Cochrane(4) sobre las intervenciones para el manejo de la AAG en mujeres incluyó 4 ensayos clínicos aleatorios en los que se evaluó el papel de finasterida (frente a placebo en dos estudios, o frente a otros agentes en otros dos estudios), en dosis que oscilaron entre 1 mg y 5 mg al día. Ninguno de los estudios mostró que finasteride fuese efectivo y los autores plantean la necesidad urgente de estudios de alta calidad y bien diseñados, sobre tratamientos ampliamente utilizados, como la finasterida, entre otros.
La búsqueda ha identificado además otras dos revisiones sistemáticas(5,6) en las que se concluye que finasteride en mujeres posmenopaúsicas con AAG finasteride no muestra ser más efectivo que placebo.
No obstante, finasteride muestra mejorar el grosor y la densidad capilar en un estudio comparativo(7) en el cual se contrastan los resultados obtenidos tras tratamiento continuado durante tres años con finasterida, 1,25 mg (60 mujeres), o dutasterida, 0,15 mg (60 mujeres). Se midió el grosor del pelo a partir de imágenes microscópicas estandarizadas en tres sitios del cuero cabelludo al inicio del tratamiento y después de 3 años de la ingesta continua de medicación. Las imágenes macroscópicas se evaluaron de forma independiente por tres dermatólogos o expertos.Se analizaron los datos teniendo en cuenta dos categorías de edad, mayor o menor de 50 años, y los resultados mostraron en ambas categorías de edad un aumento estadísticamente significativo en el grosor del cabello desde la línea de base durante el período de 3 años para finasterida y dutasterida (prueba de los rangos con signo de Wilcoxon; p = 0,02). Un aumento de espesor del cabello se observó en 49 (81,7%) mujeres en el grupo de finasterida y en 50 (83,3%) mujeres en el grupo de dutasterida. En promedio, el número de imágenes post-tratamiento en las que se identificó una mayor densidad capilar fue de 124 (68,9%) en el grupo de finasterida, y d 118 (65,6%) en el grupo de dutasterida. La efectividad fue mayor en el grupo de edad mayor de 50 años para finasterida, mientras que la dutasterida alcanzó su máxima efectividad en la categoría de edad inferior a 50 años.
No se han localizado ensayos clínicos aleatorios de publicación posterior a las revisiones sistemáticas referenciadas.
*Ver en texto completo del documento.