Tras la revisión realizada, no pueden extrapolarse conclusiones firmes respecto a la efectividad terapéutica del heliox (una mezcla de helio al 70-80% y oxígeno al 20-30%) en la bronquiolitis aguda (BA) y en la exacerbación del asma, fundamentalmente debido a la carencia de estudios con adecuada metodología y a que los estudios disponibles no muestran efectos beneficiosos clínicamente significativos. Sin embargo, en el caso de la BA, en base a la seguridad mostrada por el heliox se considera su utilización en niños hospitalizados (casos graves).
Respecto al papel del compuesto heliox como agente terapéutico en la BA (no como fuente de nebulización de un fármaco), encontramos una revisión sistemática (RS)(1) de la Cochrane actualizada en 2010 en la que se concluye que la inhalación de heliox produce una reducción del 11,5% en la puntuación respiratoria clínica en lactantes hospitalizados en una unidad pediátrica de cuidados intensivos (UPCI) por bronquiolitis aguda y no intubados, pero que sin embargo, este tratamiento no reduce la necesidad de ventilación mecánica o de intubación o la duración de la estancia en la UCIP:
En la RS se incluyeron cuatro ensayos clínicos aleatorios con 84 lactantes menores de dos años de edad con dificultad respiratoria secundaria a bronquiolitis causada por el virus sincitial respiratorio y que requirieron hospitalización en la UPCI. En todos los casos se comparó la efectividad de la inhalación de heliox frente a la de aire u oxígeno. Entre los resultados a destacar, se encontró que los lactantes tratados con inhalación de heliox tuvieron una puntuación respiratoria clínica media significativamente inferior en la primera hora después de comenzar el tratamiento en comparación con los lactantes tratados con inhalación de aire u oxígeno (diferencia de medias [DM] -1,15; intervalo de confianza [IC] del 95%: -1,98 a -0,33; p = 0,006; n = 69). No obstante, no hubo una reducción clínicamente significativa en la tasa de intubación (cociente de riesgos [CR] 1,38; IC del 95%: 0,41 a 4,56; p = 0,60; n = 58), en la necesidad de ventilación mecánica (CR 1,11; IC del 95%: 0,36 a 3,38; p = 0,86; n = 58) ni en la duración de la estancia en la UPCI (DM -0,15 días; IC del 95%: -0,92 a 0,61; p = 0,69; n = 58). No se informaron eventos adversos relacionados con la inhalación de heliox.
En base a los resultados obtenidos y dado el buen perfil de seguridad, como implicación para la práctica se establece en la RS que el tratamiento con heliox podría ser utilizado, además de la atención médica estándar, para tratar a los bebés que están hospitalizados en la UCIP por bronquiolitis aguda y no están intubados. Matizan, no obstante que todavía son necesarios nuevos estudios (ensayos controlados aleatorios de amplio tamaño muestral, preferentemente multicéntricos), para evaluar la eficacia de la inhalación de heliox en lactantes con BA.
En una guía de práctica clínica (GPC) publicada en Guiasalud sobre el manejo de la BA(2) se indica que “El uso del heliox podría ser de utilidad en pacientes con bronquiolitis moderada-grave, pero se requieren más estudios que refuercen esta afirmación (grado de recomendación D)*”.
En un documento de consenso(3) que publica igualmente Guiasalud encontramos que “Se debe considerar el uso selectivo del heliox en BA moderada-grave utilizado con mascarilla con reservorio y de forma continua con un concentración 70/30; en los casos de BA grave y/o refractarios al tratamiento con heliox a través de mascarilla con reservorio se recomienda utilizar el heliox combinado con CPAP”(nivel de evidencia II-1 y III; grado de recomendación B)*.
En este documento se destaca también que el balance del heliox entre los riesgos (medicación muy segura) y beneficios (mejoría clínica a corto plazo de dudosa relevancia clínica) es parcialmente favorable y que son necesarios futuros estudios metodológicamente bien diseñados.
En cambio, la recientemente publicada GPC sobre la BA de la “American Academy of Pediatrics”(4) no menciona el heliox entre las medidas terapéuticas a adoptar en este grupo de pacientes.
Por su parte, el sumario de evidencia de Uptodate sobre la BA(5) sugiere no utilizar heliox de forma rutinaria en el tratamiento de la bronquiolitis en los bebés y niños (Grado de recomendación 2B)*. Considera que la administración de heliox es incómoda y da lugar a beneficios relativamente pequeños y en un grupo limitado de niños. Entre las referencias mencionadas en el sumario se encuentra la RS de la Cochrane(1) comentada arriba y dos ensayos clínicos aleatorios (ECA) publicados posteriormente a esta(6,7) y en los cuales la administración de heliox frente a la utilización de oxígeno y nitrógeno (en una muestra de 319 niños hospitalizados con bronquiolitis)no redujo la mediana de duración de tratamiento para aliviar la hipoxia y de dificultad respiratoria (aproximadamente 1,9 días en ambos grupos)(6) ni muestra una mejoría que se considere clínicamente significativa cuando se compara con oxígeno (en este caso en 69 niños)(7).
El sumario de evidencia de Dynamed sobre la BA considera, de forma similar, que la evidencia es insuficiente para evaluar el beneficio clínico del heliox en esta patología(8).
En cuanto a la efectividad en exacerbaciones de niños con asma, otra RS publicada en 2006 por la Cochrane sobre el heliox para pacientes con asma agudo no intubados(9), concluía como implicaciones para la práctica que:
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Las pruebas existentes no demuestran un beneficio claro con la administración de mezclas de helio y oxígeno a todos los pacientes en las salas de urgencias con asma aguda.
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El tratamiento con heliox puede mejorar la función pulmonar en los pacientes con asma aguda más severa; sin embargo, los médicos deben asegurar que se utilicen otros tratamientos basados en la evidencia.
En esta revisión se incluyeron 10 ensayos aleatorios controlados con placebo con 544 pacientes con asma aguda. De los estudios, 3 ensayos incluían niños y 1 ensayo adultos y niños (edad media 12,3 años). El agrupamiento de los datos de ocho ensayos sobre las pruebas de función pulmonar durante la administración de heliox (15 a 60 min) no demostró diferencias significativas en los grupos (diferencias de medias estandarizadas -0,28; intervalo de confianza (IC) del 95%: -0,56 a 0,01). El uso de heliox mejoró la función pulmonar sólo en el subgrupo de pacientes con disfunción pulmonar inicial más severa; sin embargo, esta conclusión se basa en un número reducido de estudios. No hubo diferencias significativas entre los grupos cuando se compararon estudios de adultos versus niños, y de dosis de heliox alta versus baja. Finalmente, los participantes tratados con heliox no mostraron ningún riesgo diferente significativo de ingreso al hospital al concluir el tratamiento (RR 0,83; IC del 95%: 0,66 a 1,08; P = 0,17; I2 = 0%).
El sumario de evidencia de Uptodate(10) sobre el manejo de las exacerbaciones del asma en niños, así como la GPC española sobre el asma(11) consideran que no existen datos que respalden su uso en el tratamiento de las exacerbaciones del asma.
En otra GPC más reciente(12) se indica que el heliox no está recomendado para su uso en pacientes con asma aguda fuera de un ensayo clínico.
Sin embargo, la GPC del “Institute for Clinical Systems Improvement”(13) sugiere que aunque no hay suficiente evidencia para recomendar heliox como tratamiento de primera línea en pacientes con exacerbaciones de asma, este compuesto puede ser considerado como terapia de segunda línea en pacientes con una exacerbación grave de asma que no responden a las primeras opciones terapéuticas.
No se han localizado RS o ECA posteriores a los comentados que valoren la efectividad clínica del uso terapéutico del heliox en niños con asma exacerbada.