Un ensayo clínico randomizado muestra que la administración de probióticos reduce más el dolor y evita un número mayor de recidivas que los antibióticos, pero el estudio fue abierto (sin cegamiento) y el tratamiento empleado en el grupo de antibióticos fue a criterio de los profesionales de atención primaria de referencia. Las guías de práctica clínica revisadas no incluyen la indicación de probióticos entre sus recomendaciones para el tratamiento de las pacientes diagnosticadas de mastitis puerperal.
Un ensayo clínico randomizado, publicado en el 2010(1) incluyó a 352 mujeres diagnosticadas de una mastitis infecciosa, que fueron asignados de forma aleatoria a tres grupos de tratamiento: en uno se administró de forma diaria durante tres semanas Lactobacillus fermentum CECT5716 (n=124), en otro se administró L.salivarius CECT5713 durante las tres semanas (n=127) y el tercer grupo (n=101) fue tratado con el antibiótico indicado en su respectivo centro de atención primaria. Los antibióticos administrados fueron ácido clavulánico (38,6%), amoxicillina (22,8%), cotrimoxazol (18,8%), cloxacillina (17,8%) y eritromicina (2%). Entre los resultados de este ensayo destaca que:
- A las tres semanas el recuento de bacterias en la leche materna en los dos grupos de probióticos fueron más bajos que en el grupo de antibióticos.
- Igualmente a las tres semanas, en las mujeres asignadas a los grupo de probióticos disminuyó más el dolor. Con una escala que iba de 0-4 para dolor intenso, de 5-7 para molestias durante la lactancia y de 8-10 de recuperación completa; la puntuación media obtenida fue de 5,81 en el grupo de antibióticos, de 8,68 en el de L. fermentum (p<0,05 vs. antibióticos) y de 8,61 para el grupo de L.salivarius (p<0,05 vs. antibióticos).
- El número de recurrencias durante los tres meses siguientes fue menor en los grupos de probióticos; siendo del 30,7% en el grupo de antibióticos, del 10,5% en el de L. fermentum CECT5716 (p < 0.05 vs. antibióticos, con NNT de 5 ) y del 7,1% en el de L salivarius (p < 0,05 vs. antibióticos con NNT de 5).
La recomendación de dar probióticos no se ha encontrado en las guías de práctica clínica más recientemente actualizadas(3,4). Las dos guías revisadas recomiendan dar tratamiento con antibióticos y en una de ellas(4) si los síntomas son leves y han comenzado en un plazo menor de 24 horas, aconsejan de entrada tratamiento conservador (extracción de la leche y tratamiento de los síntomas con analgésicos).Si en 12-24 horas no mejoran los síntomas se deberá comenzar con antibióticos.
Una revisión sistemática de la Biblioteca Cochrane, con búsqueda realizada en diciembre del 2007(5), fue realizada con el objetivo de examinar la efectividad de la antibioticoterapia para aliviar los síntomas en las mujeres que amamantan con mastitis. Tan solo dos ensayos cumplieron los criterios de inclusión:
- Un ensayo pequeño (n = 25) comparó amoxicilina con cefradina y no encontró diferencias significativas entre los dos antibióticos en cuanto al alivio de los síntomas y la formación de abscesos.
- Otro estudio más antiguo comparó el vaciamiento mamario solo como "tratamiento de apoyo" versus la antibioticoterapia más tratamiento de apoyo, y ningún tratamiento. Los resultados de este último estudio indicaron una desaparición más rápida de los síntomas para las mujeres que utilizaron antibióticos, aunque hubo problemas en el diseño del estudio.
- Las conclusiones de los autores son que "no existen pruebas suficientes para confirmar o refutar la efectividad del tratamiento antibiótico para la mastitis de la lactancia". Añaden que hay una necesidad urgente de realizar ensayos clínicos aleatorios doble ciego de alta calidad para determinar si se deben utilizar los antibióticos en esta afección posparto tan frecuente.
Posterior a la fecha de actualización de la revisión sistemática, no se han encontrado nuevos ensayos clínicos randomizados a excepción del previamente citado(1).