Al tratarse de una gestante atendida en el ámbito de atención primaria, asumimos, para dar respuesta a esta pregunta, que la paciente padece una beta-talasemia minor. Además, este tipo de hemoglobinopatía es la más prevalente en el área mediterránea.
En general, los pacientes con beta-talasemia minor pueden tener, junto a otras características, niveles de hemoglobina por debajo del rango considerado normal e independiente de los niveles de hierro y ferritina sérica que en muchas ocasiones están elevados.
En base a los documentos seleccionados, ante una gestante con anemia, es decir, hemoglobina inferior a la considerada normal para la edad gestacional, se habría de estudiar si existe asociada una deficiencia de hierro y, en el caso de que se confirme tal déficit, estaría indicado iniciar tratamiento con suplementos de hierro:
En la guía de práctica clínica de NICE de cuidados prenatales(1) se establece que el rango normal de hemoglobina en mujeres embarazadas de hasta 12 semanas de gestación debe ser ≥ 11 g/100 ml y ≥ 10,5 g/100 ml a las 28 semanas de gestación. Sin embargo, añade que, debido a diversa patogénesis de la anemia (por ejemplo, anemia por deficiencia de hierro, talasemia, anemia de células falciformes), la utilización del valor de la hemoglobina como el único medio de diagnóstico de la anemia no es una prueba sensible y que, cuando existe la sospecha de deficiencia de hierro, deben ser consideradas pruebas más sensibles y específicas. En relación a este punto se considera la determinación de la ferritina sérica la prueba de detección más sensible para detectar depósitos de hierro adecuados (en un estudio de validación de pruebas diagnósticas(2) realizado en mujeres embarazadas, una concentración de ferritina sérica < 30 microg/l fue el mejor indicador de almacenamiento de hierro reducido. Cuando se utiliza como prueba de detección para la deficiencia de hierro, la determinación de ferritina sérica muestra una sensibilidad del 90% y una especificidad del 85%).
Como recomendaciones prácticas relacionadas encontramos en la guía:
- Los suplementos de hierro no deben ser ofrecidos de forma rutinaria a todas las mujeres embarazadas. No se encuentra beneficio en la madre o en la salud del feto y pueden tener desagradables efectos secundarios maternos (Grado de recomendación A). [Ver grados de recomendación en texto completo de la guía]
- El hallazgo en una gestante de niveles de hemoglobina fuera del rango normal debe ser estudiado y, en el caso de que se encuentre deficiencia de hierro, considerar tratamiento con suplementos férricos (Grado de recomendación A).
Un sumario de evidencia de Uptodate(3) sobre el manejo de la beta-talasemia indica, respecto a la necesidad de tratamiento en una mujer gestante afecta de esta hemoglobinopatia, que pueden ser necesarias las transfusiones sanguíneas en casos especiales de mujeres embarazadas que desarrollen una severa anemia "fisiológica" secundaria al embarazo (debido al aumento del volumen plasmático). En cuanto a la utilización de suplementos de hierro, menciona que los pacientes con talasemia minor tienen un riesgo general similar al de los individuos normales de desarrollar anemia secundaria a deficiencia de hierro por otras causas y que, en caso de coexistencia de beta-talasemia y deficiencia de hierro real, estaría indicado el tratamiento con hierro.
En otro sumario de evidencia de Dynamed(4) sobre la beta-talasemia minor, utilizando como referencia una revisión narrativa de la “American Academy of Family Physicians“(5), comenta también que, en general, los pacientes con esta patología no tienen deficiencia de hierro, por lo que los suplementos no van a mejorar su anemia. En consecuencia, el tratamiento con hierro sólo debería ser administrado si coexiste una deficiencia de hierro.
Se ha localizado además un estudio de cohortes(6), que evaluó los resultados gestacionales en 261 mujeres con beta-talasemia minor, que encontró en estas gestantes mayores tasas de anemia (definida como hemoglobina < 10 g/dL) durante el embarazo y mayor necesidad de transfusiones sanguíneas que en mujeres sin el rasgo talasémico.