Tras la búsqueda realizada podemos concluir que, actualmente no hay evidencia en relación a los beneficios o perjuicios de incorporar la ducha como primer paso en el proceso de higiene y cura de la herida quirúrgica. A pesar de la ausencia de evidencia, de la información contenida en los documentos consultados se puede concluir que, dado que los pacientes pueden ducharse de manera segura 48 horas después de la cirugía (o incluso antes según algunos documentos), parece adecuada la recomendación de ducharse como paso previo a la cura de la herida, si el paciente así lo prefiere, tal y como se sugiere hacer en nuestro contexto sanitario.
En el Sumario de Evidencia (SE) de UpToDate(1) sobre heridas suturadas, para los cuidados de las laceraciones cerradas mediante sutura no reabsorbible (p. ej., nylon, polipropileno), se recomienda una limpieza con agua y jabón suave o peróxido al 50%, 24 horas después del cierre de la herida, para evitar la formación de costras sobre los nudos de la sutura. Además, se indica que a estas personas se les puede recomendar ducharse o lavar la herida con agua y jabón sin correr el riesgo de aumentar la tasa de infección. Esta afirmación está basada en una Revisión Sistemática (RS)(2) que compara los beneficios (como posibles mejoras en la calidad de vida) y los daños (potencialmente mayor morbilidad relacionada con las heridas) del baño o ducha postoperatorio temprano (es decir, dentro de las 48 horas posteriores a la cirugía, el período durante el cual se produce la epitelización de la herida) en comparación con el baño o la ducha postoperatorios retrasados (es decir, no bañarse ni ducharse durante más de 48 horas después de la cirugía) en pacientes con heridas quirúrgicas cerradas. Sólo se identificó un ensayo clínico aleatorio (ECA)(3) con alto riesgo de sesgo, y que incluyó a 857 personas con heridas suturadas y que fueron asignados al azar a un baño postoperatorio temprano (retirar el vendaje después de 12 horas y reanudar el baño normal, n = 415) o un baño postoperatorio tardío (conservar el vendaje durante al menos 48 horas antes de retirarlo y reanudar el baño normal, n = 442). El único resultado de interés informado en este ensayo fue la infección del sitio quirúrgico (ISQ). No hubo diferencias estadísticamente significativas en la proporción de pacientes que desarrollaron ISQ entre los dos grupos [riesgo relativo (RR) 0,96; intervalo de confianza (IC) del 95%: 0,62 a 1,48)]. Las proporciones de pacientes que desarrollaron ISQ fueron del 8,5% en el grupo de baño temprano y del 8,8% en el grupo de baño tardío. Los autores concluyeron que no había pruebas concluyentes disponibles de ECA sobre los beneficios o daños de la ducha o el baño postoperatorio temprano versus el tardío en la prevención de las complicaciones de las heridas.
El SE de Dynamed(4) sobre prevención de la ISQ, con respecto al papel de la ducha en el manejo postoperatorio de las heridas suturadas expone que:
- Dejar que las suturas se mojen durante el baño puede no aumentar el riesgo de ISQ(5). Los autores de la RS(5) en la que se basa esta afirmación concluyeron que no había fundamento para recomendar, a una persona con una herida quirúrgica, que evite ducharse o bañarse como parte de su higiene normal durante el proceso de curación. [Nivel 2 de DynaMed (La evidencia de nivel 2 (nivel medio) representa resultados de investigación que abordan resultados clínicos y demuestran algún método de investigación científica pero que no cumplen con los criterios de calidad para alcanzar el Nivel 1]
- Permitir que las suturas se mojen durante el baño normal dentro de las 12 a 48 horas posteriores a la cirugía no parece aumentar el riesgo de ISQ en comparación con mantener la herida cubierta y seca durante al menos 48 horas(3). [Nivel 2 de DynaMed]
- Ducharse a partir de 48 horas después de la cirugía puede no aumentar el riesgo de ISQ en comparación con mantener la herida seca en pacientes con heridas quirúrgicas limpias o contaminadas(6).[Nivel 2 de DynaMed]
Con respecto a la limpieza postoperatoria de las heridas, la Guía de Práctica Clínica (GPC)(7) del National Institute for Health and Clinical Excellence (NICE) hace referencia a su vez a otras dos RS(8,9). La primera de ellas(8) examinó la evidencia para la limpieza postoperatoria de heridas y las soluciones y técnicas utilizadas para prevenir infecciones y promover la cicatrización de heridas. Esta RS incluyó catorce estudios, entre ellos dos cuasiexperimentales (n = 203 participantes) que comparaban los efectos sobre la herida de ducharse con no ducharse:
- El primero de ellos (n = 121), incluyó a pacientes sometidos a cirugía abdominal y fueron asignados a ducharse el primer día postoperatorio o a mantener la herida seca durante 14 días. No hubo ISQ en ninguno de los grupos en una evaluación 2 semanas después de la operación.
- En el otro estudio (n = 82 ), los pacientes se habían sometido a una "cirugía con o sin drenajes", fueron asignados a un grupo con ducha (el segundo día postoperatorio) o sin ducha. Hubo dos ISQ en el grupo que se duchó (n = 39 pacientes) y cuatro en el grupo que no se duchó (n = 43 pacientes), siendo la diferencia no fue estadísticamente significativa (Odds Ratio=0,53, IC 95% 0 ,09 a 3,05)
La segunda RS (9), actualizada por última vez en 2022, evalúa los efectos del agua para la limpieza de heridas. Se incluyeron 13 ensayos en esta actualización con un total de 2.504 participantes. Tres ensayos, con 148 participantes compararon la limpieza con agua del grifo con ninguna limpieza de heridas demostraron que puede haber poca o ninguna diferencia en el número de heridas que no cicatrizaron entre los grupos (RR 1,04; IC del 95%: 0,95 a 1,14; evidencia de baja certeza).
Los autores de esta GPC NICE(7) recomiendan a los pacientes que pueden ducharse de manera segura 48 horas después de la cirugía.
Otras GPC consultadas(10,11), no realizan recomendaciones sobre ducharse o no en el postoperatorio en personas con una herida quirúrgica.
Por último, resumimos a continuación la información contenida en varios protocolos y recomendaciones al paciente(12) realizados en nuestro entorno sanitario, en los que se recomienda la ducha como primer paso de higiene de la herida quirúrgica, ya que además de no aumentar la tasa de ISQ, mejora la sensación de bienestar y salud del paciente(14) . En general, para realizar el autocuidado de la herida quirúrgica se recomienda al paciente seguir los siguientes pasos:
- Lávese bien las manos con agua y jabón.
- Retire el apósito que cubre la herida, puede ser más fácil si están mojados durante la ducha
- Examine cómo se encuentra la herida (color, olor, temperatura, inflamación de la zona, drenado o sangrado).
- Limpie la herida con agua y jabón líquido con pH neutro en la ducha, con movimientos suaves y sin frotar.
- Seque la herida suavemente con gasas o una toalla limpia. Aplique un antiséptico si así se le ha prescrito. Cubra la herida con un apósito o déjela al aire, según las indicaciones de su médico o enfermera.