La búsqueda en las bases de datos habituales sobre la indicación de repetir las pruebas de cribado de infección tuberculosa (prueba cutánea de la tuberculina o las pruebas de liberación de interferón gamma [IGRA]) en un paciente con enfermedad inflamatoria intestinal, con antecedentes de infección tuberculosa latente (ITBL) y que precisa un nuevo ciclo de tratamiento con un inhibidor del factor de necrosis tumoral (anti-TNF) no reporta resultados concretos. Tras la revisión de dos sumarios de evidencia(1,2) y de guías de práctica clínica (GPC) que abordan el manejo del paciente con artritis reumatoide(3-5) o el diagnóstico de la ITBL(6,7) extrapolamos que los pacientes con antecedentes de una prueba de detección de ITBL con resultado positivo pretratamiento a menudo siguen presentando resultados positivos en estas pruebas incluso después de un tratamiento exitoso de la infección tuberculosa y que estos pacientes necesitarán una monitorización de los signos y síntomas clínicos de recurrencia de la enfermedad tuberculosa, ya que repetir las pruebas no se considera de ayuda en el diagnóstico de TB recurrente.
Respecto a la indicación de repetir periódicamente el cribado de ITBL en pacientes en tratamiento continuado con anti-TNF y con pruebas de detección de ITBL inicialmente negativas, los documentos sugieren repetir dichas pruebas sólo en caso de que concurran factores de riesgo de exposición a la TB.
En el sumario de evidencia de Uptodate sobre los anti-TNF y las infecciones por micobacterias(1) se establece que la necesidad de volver a realizar un cribado de TB latente a los pacientes durante el uso continuo o posterior de anti-TNF es controvertido: claramente, los pacientes con riesgo de exposición continua a la TB deberían ser reevaluados; sin embargo, en los pacientes que se han sometido a un cribado con resultado negativo o aquellos que han completado con éxito un ciclo de tratamiento para TBC latente y que no tienen la posibilidad de una exposición posterior a la TB, es probable que no sea necesario repetir la prueba de detección.
En dos GPC del “American College of Rheumatology”(3,4) y en una GPC canadiense(5) centradas en el manejo de pacientes con artritis reumatoide, se sugiere repetir las pruebas de cribado de ITBL solo en el caso de que el paciente presente factores de riesgo de TB. Los factores de riesgo de exposición a la TB se definen (según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. [CDC](6)) como: contactos cercanos de personas conocidas o sospechosas de tener TB activa; personas nacidas en el extranjero en áreas que tienen una alta incidencia de TB activa (por ejemplo, África, Asia, Europa del Este, América Latina y Rusia); personas que visitan áreas con una alta prevalencia de TB activa, especialmente si las visitas son frecuentes o prolongadas; residentes y empleados de entornos de congregación cuyos usuarios tienen un mayor riesgo de TB activa (por ejemplo, instalaciones correccionales, centros de cuidado a largo plazo, y refugios para personas sin hogar); trabajadores de la salud que atienden a clientes que están en mayor riesgo de TB activa; poblaciones definidas localmente como que tienen una mayor incidencia de infección latente por Mycobacterium tuberculosis o de TB activa, posiblemente incluyendo poblaciones con bajos ingresos médicamente desatendidas, o personas que abusan de drogas o alcohol; y bebés, niños y adolescentes expuestos a adultos que están en mayor riesgo de infección latente por M. tuberculosis o de TB activa.
No obstante, en las dos guías americanas(3,4) se señala que los pacientes que tienen un test de cribado positivo basal a menudo siguen siendo positivos para estas pruebas incluso después de un tratamiento exitoso de TB; en estos pacientes sería necesaria la monitorización de signos clínicos y síntomas de la enfermedad recurrente de TB, puesto que repetir las pruebas no ayudará en el diagnóstico de TB recurrente.
En una revisión bibliográfica(8) de las recomendaciones internacionales respecto al diagnóstico de la ITBL y la prevención de la reactivación de la TB en pacientes reumáticos que reciben terapia biológica describe que las directrices estadounidenses(2), italianas(9), suizas(10) y canadienses(5) recomiendan realizar pruebas de detección periódica en pacientes con alto riesgo de infección de TB, si no han tenido una ITBL antes de tratamiento. En aquellos pacientes con pruebas de detección de ITBL positivas antes del tratamiento, debido a que los resultados de dichas pruebas no son modificados por el tratamiento de la ITBL, la reevaluación se basaría solo en los signos y síntomas clínicos de TB recurrente.