No hemos identificado ensayos clínicos controlados en los que se evalúe el empleo de plasma rico en plaquetas (PRP) (también llamado gel de plaquetas) en reconstrucción mamaria a pacientes tras cirugía conservadora por cáncer de mama, ni recomendaciones sobre su uso en este escenario clínico ni en sumarios, ni en guías de práctica clínica. Aunque varias series de casos informan de buenos resultados con la utilización de PRP y no refieren efectos adversos importantes, una revisión narrativa con búsqueda actualizada en junio de 2017, en base a los riesgos potenciales, no recomienda su empleo hasta que no se hayan realizado más estudios y con un seguimiento más prolongado.
Una revisión sistemática del empleo del PRP en cirugía estética, con búsqueda actualizada en julio de 2011(1) no informó de efectos adversos importantes y solo advertía de varias contraindicaciones relativas descritas, como la infección activa, pacientes con disfunción plaquetaria o trastornos sanguíneos, pacientes inestables hemodinámicamente, o con presencia de untumor en el lecho de la herida o con metástasis.
Varias series de casos de pacientes intervenidas por cáncer de mama y en los que se utilizó PRP en la reconstrucción mamaria (2-5) informan de buenos resultados, sin mencionar efectos adversos importantes. Las series referidas son todas menores a 50 casos (de 17 a 23 pacientes ) y con un tiempo se seguimiento de un año(salvo un estudio que se prolongó 17 meses).
Una revisión narrativa sobre el empleo de PRP en reconstrucción mamaria después de una cirugía conservadora por cáncer de mama, incluyó una búsqueda de la literatura amplia y bien estructurada, realizada a final de junio de 2017(6). Aunque los estudios revisados no informaban de efectos adversos importantes, ni de recidivas de cáncer de mama, al abordar la seguridad del PRP en este contexto clínico, describe dos peligros potenciales, que no han sido suficientemente despejados por las series publicadas:
- Uno es el riesgo de infección. Aunque parece un procedimiento seguro, siempre que la paciente no tenga enfermedades transmisibles como el VIH o hepatitis, no se puede descartar la posibilidad de contaminación durante el procesamiento o en la aplicación del PRP.
- El debate principal sobre el uso de PRP en la cirugía del cáncer se refiere a si es oncológicamente seguro aplicar PRP en lugares donde el cáncer se ha desarrollado y extirpado previamente. Hasta la fecha, los datos sobre el uso de PRP como complemento de la reconstrucción mamaria después del tratamiento del cáncer siguen siendo limitados. Dado que el PRP puede favorecer el crecimiento y proliferación celular sería necesario contar con más garantías para asegurar que no va a facilitar las recidivas del cáncer de mama.
Los autores de la revisión concluyen que, aunque la hipótesis de malformación relacionada con PRP no ha sido demostrada, es de gran importancia contar con más estudios in vitro, en experimentación animal y clínicos para eliminar cualquier posibilidad de recurrencia en pacientes a las que se les extirpó un cáncer y se aplica sobre esa zona PRP. Dado que actualmente no hay una recomendación establecida del empleo del PRP en la reconstrucción mamaria, consideran que el uso del PRP aún no está indicado en pacientes sometidos a resección por cáncer.