Tras la búsqueda se han encontrado un Best Practice (BP) y dos Ensayos Clínicos Aleatorizados (ECA) que determinan los resultados de pinzar o no pinzar los catéteres urinarios (de larga y corta duración) antes de su retirada y concluyen que la retirada se debe realizar tras un período de drenaje libre y no con pinzamiento previo. Sin embargo, un tercer ECA, con pacientes neuroquirúrgicos, concluye que el pinzamiento del catéter urinario es eficaz para facilitar la función de la vejiga.
Un Best Practice(1), basado en los resultados de tres Revisiones Sistemáticas, sobre las estrategias de la retirada de la sonda vesical permanente de corta duración, recomienda con respecto al pinzamiento previo a la retirada, que: la retirada de estas sondas se debe realizar después de un periodo de drenaje libre de 24 horas (Grado de Recomendación D)(*)
La recomendación concreta se basa en tres ensayos (234 pacientes), en su mayoría con mujeres, que compararon el pinzado del sondaje vesical permanente, antes de su retirada, con el drenaje libre. Los tres ensayos utilizaron diferentes regímenes de pinzado, por lo que los resultados no pudieron combinarse en un metaanálisis. Esto sugiere que la evidencia para evaluar el pinzado de los sondajes vesicales permanentes antes de su retirada es limitada. Hasta que esté disponible una evidencia más robusta, las prácticas relativas al pinzado de los catéteres continuarán siendo determinadas por las preferencias y los factores económicos locales.
Los tres ECAs son posteriores y en pacientes en situaciones clínicas concretas:
Uno de los ECA(2), comprueba el efecto de pinzar el catéter uretral permanente (CUP) antes de su retirada en pacientes con fractura de cadera. Se incluyeron pacientes con ≥ 50 años, sin CUP previo, ni deterioro cognitivo o problemas físicos graves adicionales en el momento de ingreso (n = 113). Fueron asignados al azar en dos grupos: un grupo, con CUP pinzados antes de la retirada; el otro con CUP retirados con drenaje libre. El cegamiento no fue posible debido a la naturaleza del estudio. El resultado primario fue: tiempo de vuelta a la función normal de la vejiga. Los secundarios: necesidad o no de re-cateterización y duración de la estancia hospitalaria. La media del tiempo necesario para volver a la función normal de la vejiga fue de 6 horas (Q(1)4-Q(3)8) en el grupo del CUP pinzado y de 4 horas (Q(1)3-Q(3)7,25) en el grupo de drenaje libre. No hubo diferencias significativas entre grupos en relación al tiempo necesario para recuperar la función normal de la vejiga (p = 0,156), el número de pacientes que requirieron re-cateterización (p=0,904) y el tiempo medio de estancia en el hospital (p = 0,777). Este ECA no mostró ninguna ventaja o desventaja con el pinzamiento del CUP antes de su retirada. El pinzamiento del CUP es una tarea adicional para el personal de enfermería en la retirada del catéter urinario permanente, por lo tanto, al considerar los resultados actuales, parece que dicho pinzamiento de los CUP en los pacientes con fractura de cadera no está indicado.
Otro ECA (3) determina los efectos de reacondicionamiento de la vejiga por medio del pinzamiento del CUP antes de su retirada frente a la retirada sin pinzamiento previo en 60 pacientes con accidente cerebrovascular que fueron aleatorizados en tres grupos (0, 1 y 3 días). Los CUP se retiraron sin sujeción en el grupo de 0 días. En los otros dos grupos, los CUP se pinzaron durante 4 horas, seguidos de 5 minutos de drenaje urinario, en un ciclo repetido de 24 horas en los de 1 día, y más de 72 horas en los grupos de 3 días. Se midió: tiempo de la primera micción (PM), volumen de la PM (vol-PM), volumen de orina residual después de la PM, media del volumen de micción y volumen de orina residual en el tercer día después de la retirada del CUP. También se registró: método de evacuación (auto-vaciamiento o cateterización intermitente), incidencia de infección del tracto urinario, quejas subjetivas y otras complicaciones.
El tiempo de la PM, el vol-PM, el volumen de orina residual después de la PM, el método de la micción, volumen evacuado, y el volumen de orina residual en el tercer día después de la retirada del CUP no tuvo diferencias significativas entre los tres grupos, ni entre el de 0 día y los otros dos grupos de pinzamiento. Se ha observado una fuerte correlación negativa entre la edad y vol-PM. Entre los pacientes en los que se les hizo pinzamiento, 3 (7,5 %) presentaron infección urinaria sintomática y 9 (22,5 %) se quejaron de pérdidas de orina durante el programa de pinzamiento.
Se concluye que el reacondicionamiento de la vejiga a través del pinzamiento del CUP no tiene beneficios notables en pacientes con accidente cerebrovascular y puede inducir a problemas adicionales. Estos hallazgos sugieren que la eliminación del CUP sin pinzamiento es superior a la eliminación con pinzamiento para el reacondicionamiento de la vejiga en pacientes con accidente cerebrovascular.
El tercer ECA(4) explora los efectos de un protocolo de pinzamiento del catéter urinario a corto plazo (CUCP) en la función de la vejiga en pacientes neuroquirúrgicos. Los pacientes elegidos fueron divididos en grupos de observación y control. A los del grupo observación se les pinzó el CUCP al llegar a la unidad tras regresar del quirófano, despinzando en intervalos específicos. El grupo control recibió la atención estándar (el CUCP estuvo en drenaje libre durante todo el tiempo hasta que se retiró). El tiempo medio de presencia del CUCP fue de 2,6 días. En comparación con el grupo control, el de observación experimentó un tiempo más corto para la PM postoperatoria, menor volumen de orina residual y mejor percepción subjetiva durante su PM postoperatoria. Para los pacientes sometidos a neurocirugía a los que se les ha puesto un CUCP, un protocolo de pinzamiento del CUCP es eficaz para facilitar la función de la vejiga, lo que reduce la tasa de disuria y hace que los pacientes se sientan más cómodos tras la retirada del CUCP.
(*) Mirar la clasificación de los Niveles de Evidencias y Grados de Recomendación en el Best Practice.