De la respuesta ofrecida en dos preguntas previas formuladas al servicio Preevid en 2006 y 2007 (Ver enlaces más abajo), se deduce que la aplicación de la sonda nasogástrica (SNG) en pacientes que consultan por sangrado digestivo podría tener, con una evidencia débil, un papel diagnóstico y pronóstico en algunos pacientes, y no mejora los resultados en términos de salud. Tras la actualización de la búsqueda, los nuevos documentos localizados, presentan conclusiones similares.
De la búsqueda actualizada para esta pregunta, destacamos los siguientes documentos:
- Una revisión sistemática actualizada en 2012(1), realizada en 8 estudios con mas de 1.700 pacientes que consultaron por sangrado digestivo. La presencia de sangre , o de" posos de café", en la SNG mostró una sensibilidad del 44%, una especificidad del 95% y un cociente de probabilidad para un resultado positivo de 9,6 (con un intervalo de confianza al 95% de 4 a 23) para el diagnóstico de sangrado digestivo alto. La ausencia de sangrado, en la SNG, no permitió descartar la existencia de una hemorragia digestiva alta. En cuanto al valor pronóstico, el hallazgo de sangre (o "posos de café) en la SNG tuvo un discreto valor predictivo de tener una lesión severa que precisara intervención quirúrgica urgente, con un cociente de probabilidad conjunto para un resultado positivo de 3,1 (IC al 95% de 1,2 a 23). La revisión sistemática ofrece otras escalas clínicas, que sin contar con la información ofrecida por la SNG, mostraron buenos resultados, sin el retraso diagnóstico que la colocación de la SNG puede suponer.
- Un ensayo clínico randomizado multicéntrico incluyó a 253 pacientes que consultaron en urgencias por una hemorragia digestiva alta(2). De forma aleatoria fueron distribuidos a tres grupos: en uno se administró eritromicina intravenosa sin colocación de SNG, en otro se aplicó SNG sin eritromicina y en el tercero se aplicaron de forma combinada ambas medidas. Los grupos no presentaron diferencias entre la visualización endoscópica, la necesidad de una segunda endoscopia, el número de unidades transfundidas, ni en la mortalidad. El ensayo concluyó que, en pacientes con hemorragia digestiva alta, la administración de eritromicina intravenosa permite realizar una endoscopia de forma satisfactoria, sin la necesidad de SNG y realización de un lavado previo a la endoscopia.
- El sumario de evidencia de Uptodate(3) sitúa la SNG como un procedimiento en la valoración inicial de sangrado digestivo a realizar en algunos pacientes. Concluye que la colocación de SNG en todos los pacientes con hemorragia digestiva es un tema controvertido y aunque contribuye al diagnóstico y pronóstico, no modifica los resultados. La indicaciónde la SNG podría estar en caso de duda, tras la anamnesis y semiología, que el paciente haya tenido un sangrado. Otra indicación podría estar cuando interesa eliminar partículas, sangre roja o coágulos, antes de realizar la endoscopia.
- El sumario de Dynamed(4), igualmente concluye que aunque la SNG podría contribuir al diagnóstico y al pronóstico de la hemorragia, su colocación no modifica los resultados en términos de salud.
- De las tres guías de práctica clínica revisadas (5,6,7):
- La de SIGN(5) afirma que la evidencia es conflictiva sobre la utilidad de la SNG: si bien la presencia de sangre en la aspiración de la SNG aumenta la probabilidad de que haya una lesión severa, su empleo no altera los resultados. La de NICE(6) no menciona entre las recomendaciones la utilización de la SNG ; y la del "American College of Gastroenterology"(7) afirma que el lavado mediante SNG no es necesario en los pacientes con un sangrado digestivo alto ni para el diagnóstico, ni para el pronóstico, ni por su efecto terapéutico (evidencia de baja calidad).