En base a la información que aportan guías de práctica clínica, la anticoncepción hormonal oral se encontraría entre los métodos a recomendar incluso en mujeres con edad cercana a la menopausia considerándose la formulación más adecuada aquella con la dosis más baja de etinilestradiol que proporcione un adecuado control del ciclo. Esta forma de anticoncepción se aconseja mantener hasta los 50 años (si no hay factores clínicos que desaconsejen su cese previamente).
Una guía de práctica clínica (GPC), publicada en 2010 por la Faculty of Sexual and Reproductive Healthcare(1), establece las recomendaciones a tener en cuenta a la hora de decidir el método anticonceptivo en mujeres de más de 40 años y respecto a la anticoncepción hormonal combinada (que englobaría a los anticonceptivos orales combinados, el anillo vaginal y el parche anticonceptivo), establece que:
- El uso de anticoncepción hormonal combinada (AHC) en la perimenopausia pueden ayudar a mantener la densidad mineral ósea (Grado de recomendación -GR- B)*.
- La utilización de AHC puede ayudar a reducir el dolor menstrual y el sangrado (GR C)*.
- En la práctica clínica la AHC puede reducir los síntomas asociados a la menopausia (GR C)*. En el caso de que las mujeres experimenten síntomas de la menopausia durante el uso de AHC se puede intentar un régimen extendido (tomar tres paquetes de píldoras de forma continua, aunque tal uso está fuera de la licencia del producto) (recomendación basada en la experiencia clínica del grupo multidisciplinario).
- El uso de ACH proporciona un efecto protector contra el cáncer de ovario y de endometrio que continúa durante 15 años o más después de dejar la AHC (GR B)*.
- Puede haber una reducción en la incidencia de patología benigna de la mama con el uso de AHC (GR B)*.
- Puede haber una reducción en el riesgo de cáncer colorrectal con la utilización de AHC (GR B)*.
- Puede existir un pequeño riesgo adicional de cáncer de mama con el uso de AHC, el cual se reduce a ningún riesgo a los 10 años después de dejar de usar la AHC (GR B)*.
- Se debe advertir a las mujeres mayores de 35 años y fumadoras de que los riesgos del uso de AHC por lo general son mayores que los beneficios (GR B)*.
- Puede haber un pequeño aumento del riesgo de ictus isquémico con el uso de AHC (GR B)*.
- A las mujeres con enfermedad cardiovascular, accidente cerebrovascular o migraña con aura se debe aconsejar no utilizar AHC (GR C)*.
- La hipertensión puede aumentar el riesgo de accidente cerebrovascular e infarto de miocardio (IM) en las mujeres que utilizan AHC (GR B)*.
- La presión arterial debe ser comprobada antes y al menos 6 meses después de iniciar la AHC en una mujer de más de 40 años en el CHC, y ser controlada por lo menos una vez al año a partir de entonces (GR C)*.
Respecto a cuál anticonceptivo oral utilizar la guía indica que al prescribir métodos de AHC en mujeres mayores de 40 años, la primera opción debería ser la que contiene la dosis más baja de etinilestradiol que proporcione un adecuado control del ciclo. Como recomendación se establece que, en este grupo poblacional, se considere como primera opción adecuada una formulación con < 30 microgramos de etinilestradiol (recomendación basada en la experiencia clínica del grupo multidisciplinario).
Y en cuanto a cuándo detener la AHC, la guía señala que no se recomienda el uso de estos métodos de AHC más allá de la edad de 50 años, considerando que lo ideal sería que a las mujeres mayores de 50 años se aconseje cambiar a un método alternativo (como la píldora sólo de progestágenos, el implante, el DIU de levonorgestrel o los métodos de barrera) hasta la edad de 55 años o hasta que se confirme la menopausia.
En este punto, además, recomienda (siempre en base a la experiencia del grupo elaborador) que:
- Las mujeres que usan hormonas exógenas deben ser advertidas de que la amenorrea no es un indicador fiable de insuficiencia ovárica.
- En las mujeres que usan anticonceptivos hormonales, los niveles de hormona folículo-estimulante (FSH) pueden usarse para ayudar a diagnosticar la menopausia, pero su utilización debe limitarse a mujeres de más edad de 50 años y para las que utilizan métodos compuestos sólo por progestágeno. En las mujeres mayores de 50 años que están en amenorreicas y desean dejar de utilizar un método de anticoncepción sólo progestágenos, si el valor de FSH es ≥ 30 UI/L debe repetirse la medición después de 6 semanas; si el segundo valor de FSH es ≥ 30 UI/L anticoncepción puede detenerse después de 1 año.
- La determinación de FSH no es un indicador fiable de insuficiencia ovárica en mujeres que usan hormonas combinadas, incluso si se mide durante el intervalo libre de hormonas.
Otra GPC más reciente(2), también publicada por la Faculty of Sexual and Reproductive Healthcare, menciona similares ventajas e inconvenientes sobre la utilización de AHC en mujeres perimenopáusicas, que se indica puede ser utilizado hasta la edad de 50 años, siempre que no existan factores de riesgo que limiten su uso. Después de los 50 años, también se recomienda que las mujeres consideren un método alternativo.
La GPC de la OMS, sobre la elección del método anticonceptivos(3), en cuanto a la utilización de AHC (que incluye, además de las preparaciones mencionadas, las formas inyectables) en mujeres con edad ≥ 40 años, otorga para este tipo de contracepción la categoría de grado 2: las ventajas del método superan a las teóricas desventajas y se puede recomendar de forma cuidadosa, con monitorización posterior. Se añade como clarificación que la AHC parece preservar la masa ósea en la perimenopausia y, como comentario adicional, que el riesgo de enfermedades cardiovasculares con la edad aumenta y también puede aumentar con el uso de ACH pero que, en ausencia de condiciones clínicas adversas, los anticonceptivos hormonales combinados pueden utilizarse hasta la menopausia.
* Ver grados de recomendación en el texto completo de la guía.