No se han encontrado recomendaciones en guías de práctica clínica (GPC) de cuanto tiempo hay que esperar para el uso del catéter Hickman tras su implantación. Ni se ha encontrado evaluación de esta intervención en ensayos clínicos, ni en series de casos. Solo una revisión narrativa indica la conveniencia de esperar 48 horas.
Dos GPC(1,2) (una para niños/jóvenes y la segunda para adultos) para la inserción y mantenimiento de los dispositivos de acceso venoso central, entre los que incluye el Hickman, No señalan el tiempo exacto que hay que esperar para comenzar a usar dicho catéter.
Aunque indican que, una vez insertado el catéter y antes de inyección de cualquier fluido, se debe aspirar para comprobar que sale sangre lo que asegura que el catéter está en un espacio vascular. También hay que comprobar la posición del catéter por rayos (para las líneas femorales deben considerarse otros métodos), después limpiar y secar el sitio de inserción, asegurar el catéter con puntos de sutura o grapas y aplicar un apósito estéril transparente y semipermeable; etiquetar el sitio con la fecha de inserción, y entonces conectar el sistema de administración IV. Recomiendan cumplimentar una lista de verificación de la inserción del catéter.
Otra GPC(3) para la inserción y cuidados posteriores de los dispositivos de acceso venosos central tampoco hace recomendación alguna sobre el tiempo que hay que esperar para comenzar a usar dicho catéter, aunque también recomienda comprobar y confirmar la posición del catéter antes de su uso realizando una radiografía de tórax para asegurar que la punta esta en la posición correcta (excluyendo las líneas de fémur en adultos). También se debe comprobar que no se ha producido un hemotórax o ensanchamiento mediastínico (disección aórtica). Se debe observar a estos pacientes cada hora durante al menos cuatro horas después del procedimiento y si se sospecha que se han producido alguna de estas complicaciones se debe consultar de forma inmediata al especialista vascular.
La descripción de un caso(4) de una niña de 11 años a la que se le inserta un catéter Hickman por padecer un síndrome de intestino corto y necesitar nutrición parenteral, refiere que tras el procedimiento de inserción del catéter, se confirmó la ubicación adecuada de este con radiografía, y como no surgieron complicaciones durante la evolución clínica postoperatoria, al día siguiente de la operación se comenzó la nutrición parenteral.
Una revisión narrativa(5) de las distintas vías venosas para la administración de quimioterapia antitumoral, y de los diferentes aspectos en relación con las técnicas de perfusión, señala que, entre los posibles accesos venosos centrales de larga duración se encuentran los catéteres tipo Hickman. E indica que, aunque el reservorio puede utilizarse desde el mismo momento de su implantación, la inflamación inmediata y la hipersensibilidad de la zona pueden aconsejar esperar 48 horas antes de hacerlo.