Hay una pregunta previa formulada al servicio Preevid (ver más abajo) sobre la conveniencia de vacunación del VPH en pacientes diagnosticadas de carcinoma in situ de cuello uterino. La búsqueda se ha actualizado y adaptado para una paciente diagnosticada de displasia cervical compatible con infección previa de VPH. La vacunación podría estar indicada, aunque haya lesiones cervicales previas provocadas por una infección del VPH, dentro de los rangos de edad recomendados, dado que puede proteger de la infección por otros serotipos; pero es muy importante informar que no modifica la historia natural de la lesión, ni contribuye a eliminar la infección ya existente.
Las recomendaciones del ACIP en 2007(1), basadas en ensayos controlados, concluían que:
- Aunque haya una infección documentada previa por el VPH y/o lesiones cervicales, la administración de la vacuna en mujeres de entre 9 a 26 años, protege de la infección de los otros serotipos incluidos en la vacuna. En consecuencia, dentro del rango de edad recomendada, la existencia de una lesión cervical previa provocada por el VPH, no supone una contraindicación para la vacuna; aunque la eficacia de la vacuna pueda ser menor .
- Conforme son mayores los grados de severidad de la lesión de la citología vaginal,eso indica que la penetración por los serotipos 16 o 18 es más elevada y la eficacia de la vacuna puede ser menor.
- La vacunación del VPH no modifica la evolución de las lesiones cervicales ya detectadas, ni modifica la historia natural de la infección provocada por ese serotipo. Es muy importante informar adecuadamente a la mujer de esta circunstancia.
En el 2010, el ACIP se ha ratificado en esta recomendación(2) confirmando el límite superior de edad para recomendar la vacunación en los 26 años.
En el sumario de evidencia de Dynamed, recientemente actualizado, se puede encontrar similar recomendación(3): en mujeres con lesiones cervicales no hay evidencia de que la vacuna del VPH tenga ningún efecto beneficioso en las lesiones preexistententes en la citología vaginal, o en la infección preexistente de VPH, o en verrugas genitales (incluyendo aquellas causadas por virus representados en la vacuna). Sin embargo la vacunación proporciona protección contra la infección con otros serotipos vacunales no adquiridos todavía.