No se ha localizado ningún estudio en el que se comparen los efectos adversos de las distintas formulaciones de anticonceptivos orales combinados (ACOs). En base a la información obtenida de guías de práctica clínica (GPC) se indican los ACOs recomendados como primera elección a la hora de prescribir este método contraceptivo:
Una GPC inglesa actualizada en enero de 2007(1), pretende responder a la pregunta de cuál es el ACO más adecuado como primera opción a ofrecer a una mujer (entendiendo la guía como ACO a las píldoras monofásicas que contiene de 20 a 35 microgramos [µg] de etinilestradiol [EE] en combinación con un progestágeno):
Como recomendación la guía establece que la indicación de un ACO monofásico que contenga 30 µg de EE con noretisterona o levonorgestrel es una primera opción adecuada (Grado de recomendación C: La evidencia disponible es limitada pero el consejo está basado en la opinión de expertos y tiene la aprobación de autoridades respetables).
Además de la respuesta extraemos:
- Hay pocos datos directos comparativos disponibles que permitan identificar el mejor ACO de primera línea.
- No hay evidencia que apoye el uso de ACOs bifásicos o trifásicos.
- Los ACOs que contienen noretisterona o levonorgestrel pueden tener menor riesgo de tromboembolismo venoso (TEV) que aquellos que contienen desogestrel o gestodeno.
- La eficacia de los ACOs de 20 y 30 µg es similar pero la tasa de sangrado imprevisto es más común con los ACOs de 20 µg.
En otras GPC publicadas en 2010 y centradas en elección de contracepción en mujeres jóvenes(2) y en mujeres con edad superior a 40 años(3) encontramos:
- En mujeres jóvenes (con edad hasta los 25 años) la elección de primera línea también serían los ACOS con dosis estándar de EE (30 o 35 µg) combinados con un progestágeno de segunda generación (levonorgestrel o norestisterona).
- En mujeres con edad superior a 40 años en las que se prescribe un ACO se debería considerar como una adecuada primera opción una formulación con < 30 µg de EE (recomendación basada en la experiencia clínica del grupo multidisciplinario que elaboró la guía)
En el caso de que la mujer a la que se prescribe un ACO padezca alguna enfermedad o condición médica, o esté en tratamiento con determinados fármacos, puede ser de utilidad consultar la guía The UK Medical Eligibility Criteria for Contraceptive Use (2009)(4), en la que se describen los criterios a tener en cuenta a la hora de seleccionar el método anticonceptivo más seguro en esta población de mujeres.