En una guía del Royal College of Nursing (1) sobre normas para la realización de terapias mediante infusión, cuando se refieren a la infusiones (e inyecciones) subcutáneas se apoya en un documento de 1998 del Grupo de Trabajo de Hipodermoclisis (2). Hacen las siguientes recomendaciones para la práctica con respecto a la preparación de infusores de medicación subcutánea:
- Deberían ser elaborados por la política de la organización los criterios específicos y los procedimientos para el acceso a la inserción y disponibilidad de esta, prescripción y ritmo de administración de la medicación, requerimiento de la terapia y mantenimiento de la integridad del tejido subcutáneo.
- Enfermería debería tener formación y competencia en el uso de medicaciones y soluciones subcutáneas y evaluar al paciente para hacer lo más apropiado durante la prescripción de la terapia.
- Deberían considerar el uso de dispositivos electrónicos, por ejemplo el "syringe driver" (Guía electromecánica o mecánica de la jeringa, de 10 ó de 20 cc. Pueden estar provistos de un pulsante para autoadministración) cuando se va a administrar medicación vía infusión subcutánea.
- Se debe utilizar un sistema estándar de administración (20 gotas por ml) para líquidos y soluciones, que deberían ser administradas por medio de la gravedad, no bombeadas.
- Los sitios de inserción deben ser en piel intacta y estar ubicados lejos de zonas óseas prominentes, áreas de infección, cintura del paciente, piel previamente irradiada, lugares cerca de articulaciones y miembros edematosos.
- El acceso debe ser preparado usando técnicas universales de asepsia y observación.
- Se debe usar un apósito estéril oclusivo y transparente para cubrir la zona de acceso y a la vez poder observarlo.
- Para reducir el riesgo de complicaciones, se debe observar con regularidad el sitio de acceso subcutáneo, rotando un mínimo de cada tres días o si el paciente se queja de dolor en esa zona, si la piel esta pálida y/o caliente, o aparece sangre en el set de administración.
- El dispositivo seleccionado para el acceso subcutáneo debe ser del menor calibre y longitud mas corta.
- Se debe considerar el uso de aditivos que aumente la absorción y difusión de la medicación o solución.
- La medicación o solución debe ser lo mas próximo a lo isotónico como sea posible.
- La documentación en el historial médico del paciente y anotaciones de enfermería debe incluir la evaluación de las necesidades para la infusión subcutánea, respuesta del paciente a la terapia e intervalos establecidos de monitorización del sitio de infusión.
En una Guía Prodigy (3) sobre cuidados paliativos en cáncer y manejo de las secreciones respiratorias al final de la vida, ante la pregunta ¿Qué dosis de antimuscarínico se debe utilizar? Se responde que inicialmente con la inyección de un bolo y si hay respuesta positiva, se continúa administrando la medicación por infusión subcutánea usando un "Syringe Driver". En cuanto a como hay que administrar la medicación vía “Syringe Driver”, anota que el uso de esta vía es una opción si el paciente no puede tomar medicinas por vía oral. Solamente deben ser utilizadas las drogas que se saben seguras y eficaces cuando son administradas subcutáneamente. Recomienda utilizar agua como diluyente al mezclar los medicamentos en el "Syringe Driver" (a excepción de ketamine o de octreotide). Antes de mezclarlos, se debe comprobar su compatibilidad. No se deben utilizar las soluciones decoloradas o que han precipitado. Recomienda seguir las pautas paliativas locales acerca del cuidado o buscar consejo de servicios paliativos o de los servicios de información de la farmacia del hospital antes de mezclar los medicamentos en un "Syringe Driver". a información es mas frecuente que este disponible en combinaciones de dos drogas en un "Syringe Driver", aunque algunas combinaciones de tres o cuatro drogas también son compatibles. Señala una Web donde se puede tener información adicional sobre las compatibilidades de estos medicamentos: www.palliativedrugs.com. Además, inserta una tabla que proporciona una breve guía para combinaciones de medicamentos. Hay un cuadro con compatibilidades y diferentes rutas alternativas de los medicamentos administrados comúnmente a través de “Syringe Driver”.
En una Guía de Práctica Clínica (GPC) (4) para la administración subcutánea de líquidos en pacientes adultos en la comunidad (hipodermoclisis), recomienda que, si el paciente también está recibiendo medicación subcutánea vía "Syringe driver", es recomendable marcar un orden para distinguir entre la hipodermoclisis y la infusión del medicamento.
En cuanto a la comparación entre dispositivo de inserción, si agujas de mariposa de metal frente a las cánulas de Teflon estando unidas a los "Syringe Driver" durante la administración de medicación subcutánea, un estudio revisado por el Centre for Reviews and Dissemination (CRD) (5) y una revisión DARE (Database of Abstracts of Reviews of Effects) (6) comparan el uso de ambos en pacientes terminales llegando a la misma conclusión: las cánulas aumentan la duración en el sitio de inserción en comparación con las agujas de mariposa, por lo que estimaron que se ahorraría tiempo utilizado por enfermería como resultado de re-colocar con menos frecuencia las cánulas.
Una guía de tratamiento para enfermería en cuidados paliativos (7) también habla de la vía subcutánea como alternativa a la oral para la administración de medicación e hidratación. En cuanto a la inyección subcutánea intermitente de drogas recomienda utilizar una aguja de mariposa #23 o 25, de uso intermitente (con tapón de goma), realizando cada inyección con técnica estéril, pinchando el tapón de goma con aguja de #25. Si se realiza una infusión continua de medicación vía subcutánea (VSC) recomienda la máxima concentración posible para facilitar su absorción. Algunas de las recomendaciones que hace a enfermería son: Informar al paciente los motivos y ventajas de la VSC; colocar la aguja mariposa siguiendo la línea natural del pliegue (para que el enfermo, cuando se mueva, no sienta que se pincha); regular el goteo según la absorción y tolerancia de cada paciente; si hay dolor al infundir disminuir el goteo o rotar el sitio de infusión; no hay norma para el cambio del sitio de infusión, si no ocurren complicaciones pueden durar hasta 7 ó 10 días sin cambiar; numerosas combinaciones de drogas no precipitan, pero no se conoce la estabilidad final de ellas; en los casos de pacientes anticoagulados se deben observar signos de sangrado; etc.