Aunque las hojas de col, en diversos entornos, son un remedio tradicional utilizado desde hace muchos años para reducir la ingurgitación y la mastalgia asociada al inicio de la lactancia, no ha demostrado su superioridad al placebo en ensayos clínicos controlados. Pequeños ensayos clínicos con limitaciones metodológicas importantes, presentan resultados prometedores; pero es necesaria una investigación de calidad para poder conocer la eficacia de las hojas de col, comparado con placebo o con otras intervenciones, en mujeres que presentan congestión mamaria en el período postparto. No hemos encontrado recomendaciones favorables a su empleo, ni en sumarios de evidencia, ni en guías de práctica clínica.
Una revisión sistemática, realizada con el objetivo de evaluar la eficacia del tratamiento con hoja de col sobre el dolor y la dureza de la ingurgitación mamaria en las mujeres en el posparto, y su influencia en la duración de la lactancia materna, fue publicada en 2012(1).
- La revisión incluyó cuatro estudios: un ensayo clínico aleatorizado (ECA), dos estudios cuasi-aleatorios y un estudio cuasi-experimental.
- No se realizó un metaanálisis dada la heterogeneidad de las intervenciones; y los resultados de los diferentes estudios se exponen de manera narrativa.
- En el ECA, después de la primera aplicación de hoja de col, un menor número de madres informó de ingurgitación mamaria comparada con el grupo control.
- En un estudio, el grupo experimental que recibió tratamiento con hojas de col mejoró de la puntuación en la escala de dolor previa al tratamiento de 5,17 (70%) a 3,02 (20%) (p = <0,001).
- En un estudio, tanto la hoja de col como las intervenciones de compresas frías y calientes disminuyeron las puntuaciones numéricas de la escala de dolor (p≤ 0,001).
- En un estudio, los resultados mostraron una reducción estadísticamente significativa de las puntuaciones de dolor, tanto para las hojas de col a temperatura ambiente, de 2,0 puntos (37%), como para la hoja de col fría, 2,1 puntos (38%) (p = 0,0001). No hubo diferencias estadísticamente significativas entre la aplicación de hojas de col a temperatura ambiente o enfriadas.
- En un estudio, las puntuaciones pre y post tratamiento mostraron una reducción estadísticamente significativa en las puntuaciones de dolor, tanto con hojas de col como con gel de extracto de hojas de col (p = 0,0001).
- En un estudio se encontró que un 18% más de madres que recibieron la hoja de col mantenían la lactancia materna exclusiva a las seis semanas (p = 0,09). Menos madres habían dejado de amamantar antes de los ocho días (8,88% vs 24% p = 0,09) y la duración total de la lactancia fue más larga en el grupo de intervención (36 vs 30 días, p = 0,04).
- Los autores concluyeron que la evidencia actual sugiere que el tratamiento de la hoja de col ayuda a reducir el dolor en la congestión mamaria y alarga la duración de la lactancia materna. Aunque algunos estudios informaron también de que el tratamiento de la hoja de col no era eficaz. La hoja de col fría puede utilizarse para la ingurgitación mamaria en mujeres lactantes, pero no hay pruebas suficientes para sugerir el uso generalizado de hojas de col en los protocolos para el tratamiento de la congestión mamaria. Añaden que los investigadores deben tratar de lograr una mayor homogeneidad a través de los estudios mediante el uso de herramientas e Instrumentos similares (preferiblemente validados) para comparar la efectividad del tratamiento con hojas de col.
Una revisión sistemática de la Biblioteca Cochrane, sobre el tratamiento de la ingurgitación mamaria en madres lactantes, actualizada en 2016(2), incluyó tres ECAs , con un total de 101 mujeres, que evaluaban el papel de la hoja de col.
- En un ECA, con 39 participantes, no hubo diferencias en el dolor ni en la congestión mamaria, al comparar los resultados de un gel de extractos de hojas de col y un placebo.
- Los resultados de ensayos individuales, que no pudieron ser incluidos en el análisis conjunto de los datos; sugirieron que no había diferencias entre la aplicación de hojas de col enfriadas o a temperatura ambiente, ni entre hojas de col frías y la aplicación de un gel de extracto de col; y que con todas las intervenciones se producía algún alivio.
- Los autores concluyeron que, si bien algunas intervenciones entre las que incluían las hojas de col pueden ser prometedoras para el tratamiento la ingurgitación mamaria durante la lactancia, no hay pruebas suficientes de los ensayos publicados para justificar una aplicación generalizada y que son necesarias investigaciones más consistentes sobre este tipo de intervenciones .
Posterior a la revisión de la Cochrane, solo hemos encontrado un nuevo ensayo clínico en el que incluyeron a 60 mujeres primíparas tras la cesárea(3). Fueron tratadas durante los cuatro primeros días de la cesárea con tres terapias diferentes: tratamiento precoz de la mama (auto masaje de la mama), tratamiento precoz más compresión con hojas de col y un tercer grupo de cuidados estandarizados de enfermería. El ensayo, más bien una comparación de series de casos, no fue aleatorizado y las diferentes intervenciones fueron realizadas en diferentes períodos de tiempo, es decir sin un grupo control en paralelo. Los dos primeros grupos, tratamiento precoz de la mama sólo, y combinado con compresión de hojas de col, presentaron una mejoría estadísticamente significativa, en la reducción del nivel de dolor al 4º día de la cesárea, comparado con el de tratamiento estandarizado de enfermería. El grupo que empleó hojas de col asociado a tratamiento precoz, presentó un menor grado de dureza de las mamas que los otros dos grupos. El estudio concluyó que las hojas de col, asociada a un protocolo de tratamiento precoz de la ingurgitación mamaria, podría ser de utilidad en la mejoría de los síntomas, pero que son necesarios estudios más rigurosos, con grupo control y aleatorizados, para establecer conclusiones válidas.
Una guía de práctica clínica canadiense, actualizada en 2016(4), señala que las hojas de col frías han mostrado, en algunos estudios, resultados que sugieren que podría aliviar la congestión mamaria en madres lactantes, aunque una revisión sistemática no encontró que este tratamiento fuera más eficaz que el placebo, sin establecer una recomendación para su empleo.
La información para padres de la Academia Americana de Pediatras sobre ingurgitación mamaria(5), en relación al tratamiento con hojas de col indica de manera textual que "por extraño que parezca, un tratamiento contra la congestión de los senos, que muchas mujeres lactantes han comprobado que es efectivo, es el repollo o col. Las hojas limpias y refrigeradas de repollo o col se pueden cortar en pedazos pequeños o aplicar enteras directamente sobre el pecho. Las hojas enteras se ajustan a la forma del pecho si primero retira la parte central del tallo. Sostenidas en su lugar por medio del sostén, puede dejar el repollo sobre su pecho todo lo que desee o hasta que se caliente y marchite. Puede reemplazar las hojas marchitas por hojas frescas. Puede usar col verde o morada, pero es más probable que la morada manche su sostén o ropa. Muchas madres experimentan alivio del dolor y de la inflamación por la congestión de los senos pocas horas después de utilizar el repollo. Hay poca investigación clínica sobre el uso del repollo para aliviar la congestión de los senos y la manera exacta en que el repollo disminuye la inflamación de los pechos se desconoce, pero aparentemente el tratamiento es inocuo. Para la congestión de los senos, puede utilizar el repollo sólo hasta que la inflamación y el dolor comiencen a disminuir. El uso continuo puede disminuir demasiado el suministro de leche. Algunas madres aplican regularmente repollo para acelerar el alivio de la inflamación y las molestias que ocurren con el destete, sobre todo si este ocurre en un período relativamente breve".