En 2012 se publicó en el Banco de preguntas de Preevid una cuestión que planteaba si se debería antiagregar a un paciente ante el hallazgo casual de lesiones isquémicas puntiformes en pruebas de imagen. Tras la revisión realizada en ese momento se concluía que, aunque había estudios que mostraban una asociación entre el hallazgo casual de lesiones, interpretadas como isquémicas, en TAC o RMN cerebral, en pacientes que debutan con un ictus isquémico y una mayor incidencia posterior de ictus, no se disponía de estudios prospectivos de la suficiente calidad para poder establecer el valor predictivo de estas lesiones como factor de riesgo independiente.
En ese momento no se encontraron ensayos clínicos aleatorios realizados para medir la efectividad del tratamiento con antiagregantes en pacientes con lesiones isquémicas cerebrales silentes y tampoco se identificó una recomendación de antiagregar, ante este hallazgo aislado, en guías de práctica clínica o sumarios de evidencia.
Se hacía referencia en esta pregunta a un ensayo clínico(1) de 2004 en el que se observó que el tratamiento con aspirina (dosis diaria de 330 mg) durante un año en pacientes con fibrilación auricular no valvular, sin una historia previa de ictus, redujo la incidencia de nuevas lesiones silentes pero el número de infartos cerebrales sintomáticos no experimentó cambios estadísticamente significativos.
La nueva búsqueda de información realizada tampoco ha identificado ensayos clínicos aleatorios realizados con el objetivo de evaluar la efectividad del tratamiento con antiagregantes en la prevención del ictus en pacientes con lesiones isquémicas cerebrales silentes. De igual forma, la revisión de la versión actualizada de las guías de práctica clínica y sumarios de evidencia que abordan la prevención primaria del ictus no incluyen la recomendación de tratar con aspirina a los pacientes en los que se detectan este tipo de lesiones silentes.
Destacar tan sólo que se ha localizado un ensayo clínico de 2012(2) en el cual se muestra que en una muestra de pacientes con ictus isquémico no cardioembólico reciente e infartos cerebrales silentes detectados por RMN la incidencia de recurrencia del ictus no fue significativamente diferente a la de los pacientes con similares características clínicas pero sin lesiones encubiertas cerebrales: se detectó una lesión isquémica silente en 207 (20,4%) de los 1014 pacientes evaluados con RMN; de ellos 27 (13,0%) pacientes con lesiones silentes y 19 (9,2%) sin este tipo de lesiones tuvieron un accidente cerebrovascular recurrente (odds ratio [OR]: 1,42; intervalo de confianza del 95%: 0,79-2,56; p = 0,24) durante un seguimiento medio de 2,5 años.
Se concluía en el estudio que, en base a los datos obtenidos, no se puede demostrar que la presencia de lesiones isquémicas cerebrales silentes en pacientes con reciente accidente cerebrovascular isquémico no cardioembólico sea un factor de riesgo independiente de ictus recurrente (tampoco de otros eventos cardiovasculares o de mayor mortalidad).