El fármaco teriflunomida está autorizado con indicación en pacientes diagnosticados de esclerosis múltiple recurrente recidivante(1).
No hemos encontrado documentos en los que se describan casos de tuberculosis tras iniciar tratamiento con teriflunomida, ni en los que se evalúe la efectividad de diferentes estrategias (de cribado con diferentes técnicas, o no cribado para tuberculosis) de manera previa a la indicación del fármaco.
Sí que hay descritos casos de inicio de infección tuberculosa en pacientes en tratamiento con leflunomida(2,3), medicamento empleado en pacientes diagnosticados de artritis reumatoide y del que teriflunomida es su metabolito activo. En base al riesgo potencial y a la alteración de la inmunidad celular que produce, se recomienda, en revisiones narrativas y/o en documentos de consenso, extremar las precauciones, descartando la presencia de una infección, o vacunando de tuberculosis antes de comenzar tratamiento con teriflunomida.
En un informe de posicionamiento terapéutico de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) sobre la teriflunomida (1), se indica que: "durante los estudios clínicos, no se ha detectado un aumento en la aparición de infecciones graves, en comparación con placebo. Sin embargo, debido al efecto inmunomodulador de teriflunomida, en caso de producirse una infección grave durante el tratamiento, éste deberá suspenderse el tratamiento y considerar la realización de un procedimiento de eliminación acelerada. No se recomienda que pacientes con infecciones activas, crónicas o agudas, incluyendo tuberculosis latente, inicien tratamiento con teriflunomida hasta la resolución de las mismas".
La ficha técnica de teriflunomida de la Agencia Europea del Medicamento (4) señala que "se desconoce su seguridad en pacientes con tuberculosis latente, ya que no se realizó de forma sistemática un cribado de tuberculosis en los estudios clínicos. En pacientes positivos en las pruebas de diagnóstico de cribado de la tuberculosis, se debe realizar un tratamiento médico estándar antes de empezar el tratamiento".
En los estudios clínicos realizados, recopilados en una revisión sistemática de la Biblioteca Cochrane(5), no se informan de infecciones graves comparado con placebo, ni de casos de tuberculosis tras iniciar terapia con teriflunomida. Tampoco la búsqueda realizada por el servicio Preevid ha encontrado casos descritos de tuberculosis asociados a terapia con teriflunomida. Sin embargo en las evaluaciones del fármaco(6,7) se señala la posibilidad de favorecer infecciones graves, estando descritas casos de sepsis mortales por otras infecciones. Por lo tanto teriflunomida no estaría indicado en pacientes con inmunodeficiencia severa o con infecciones no controladas y no debería iniciarse en presencia de infecciones agudas o crónicas no resueltas(6,7). Si se produce una infección debe valorarse la suspensión del tratamiento, reevaluando la iniciación una vez curada(6).
Una revisión narrativa(8), en base al riesgo potencial y al efecto en la inmunidad celular, recomienda que los pacientes sometidos a tratamiento con teriflunomida sean vacunados contra la tuberculosis.
Un documento de consenso reciente(9) recomienda realizar cribado de tuberculosis latente, mediante prueba cutánea de tuberculina, antes de iniciar el tratamiento con teriflunomida.