No se han encontrado descritas interacciones específicas en la utilización conjunta de metilfenidato y aripiprazol; pero sí se ha señalado una interacción de severidad moderada de metilfenidato con los antipsicóticos, pudiendo incrementarse los efectos tanto de metilfenidato y/o de los antipsicóticos cuando se asocian.
Ni en las fichas técnicas de los dos principios activos(1,2), ni en los programas de interacciones medicamentosas(3,4), ni en la búsqueda en bases de datos de estudios, se han identificado interacciones concretas en el empleo asociado de metilfenidato y aripiprazol.
El programa de Lexicom(3) considera la interacción de metilfenidato y antipsicóticos, de severidad moderada y la clasifica de tipo C (precisa monitorización):
- Existen datos muy limitados de esta interacción y variará en función del grado del efecto individual de cada antipsicótico en la neurotransmisión de dopamina.
- Los antipsicóticos podrían incrementar el efecto adverso/tóxico de metifenidato, siendo preciso vigilar y monitorizar los signos de respuesta clinica alterada del metilfenidato y/o los de un antipsicótico cuando se empleen los dos fármacos en combinación.
- Se debe llevar precaución también cuando se comience tratamiento con metilfenidato de forma inmediata después de suspender el tratamiento con un antipsicótico.
- Parece obligado tener precaución al emplearlos de forma conjunta.
La ficha técnica de metilfenidato(1) menciona la interacción con el uso de fármacos dopaminérgicos: "se recomienda precaución al administrar metilfenidato con fármacos dopaminérgicos, incluyendo antipsicóticos. Dado que una de las principales acciones de metilfenidato es aumentar los niveles extracelulares de dopamina, metilfenidato se puede asociar con interacciones farmacodinámicas cuando se administra concomitantemente con agonistas dopaminérgicos directos o indirectos (incluyendo DOPA y antidepresivos tricíclicos) o con antagonistas dopaminérgicos incluyendo antipsicóticos".
Hay publicado un ensayo clínico en el que se administran los dos fármacos asociados. Se trata de un ensayo clínico cruzado realizado en 16 jóvenes (de 8 a 17 años de edad) diagnosticados de trastorno bipolar y también de trastorno de hiperactividad con déficit de atención (THDA). Los pacientes incluidos presentaban buena respuesta en los síntomas maníacos con aripiprazol, pero todavía presentaban síntomas de THDA. Se ofreció metilfenidato ó placebo, durante dos semanas, asociado a aripiprazol. No hubo diferencias estadísticamente significativas entre el efecto del placebo y del metilfenidato en los síntomas de THDA, o en los síntomas maníacos; aunque sí que mejoraron ligeramente los síntomas depresivos. Un paciente mientras tomaba ambos fármacos (aripiprazol y metilfendiato) precisó ingreso hospitalario por un cuadro mixto (maníaco depresivo) severo; sin que se observaran otros efectos secundarios. Aunque este paciente presentaba otras circunstancias que podrían explicar su empeoramiento, los autores concluyen que la gravedad del cuadro implica que los clínicos deben ser muy cuidadosos cuando ambos fármacos se administran de forma conjunta.