Respecto a la necesidad de tratar a portadores asintomáticos del estreptococo beta-hemolitico del grupo A (EBHGA) en una guía de práctica clínica (GPC) de reciente actualización(1) encontramos que los pacientes crónicamente colonizados por el EBHGA (portadores) tienen un riesgo muy bajo de desarrollar complicaciones supurativas (como por ejemplo un absceso periamigdalino) o no supurativas (como la fiebre reumática) y presentan baja infectividad con lo cual es poco probable su diseminación a contactos cercanos. En base a estos criterios, los autores consideran que la mayoría de los portadores no requieren intervención médica.
Las situaciones en las que se consideraría apropiada la identificación y erradicación del estado de portador asintomático incluirían:
- antecedentes familiares de fiebre reumática,
- diseminación en “ping-pong“ dentro de una familia,
- familia con significativa ansiedad acerca del EBHGA,
- brotes de faringitis por EBHGA en comunidades cerradas o semicerradas, y
- cuando la amigdalectomía se está considerando únicamente a causa del estado crónico de portador.
En el caso de que sea preciso tratar a un paciente portador la GPC indica que para la eliminación de dicho estado portador la clindamicina se posiciona como el tratamiento de elección y en el supuesto de que esta no sea una opción terapéutica adecuada, se puede utilizar la combinación penicilina/rifampicina (Grado de evidencia A: basada en ensayos clínicos aleatorizados).
Similar información encontramos en el sumario de evidencia de Uptodate sobre el tratamiento y la prevención de la faringitis estreptocócica(2) aunque en este caso como opciones terapéuticas a la hora de tratar a un portador asintomáticos se plantean la clindamicina o la combinación amoxicilina-clavulánico.
Respecto al papel de los anticuerpos específicos antiestreptolisina O (ASLO) en la decisión clínica de tratar a un paciente, no se menciona en las GPC revisadas(1,3,4) o sumarios de evidencia(2,5,6,7,8) la situación clínica de un paciente con niveles de ASLO elevados de forma mantenida. Encontramos además(5,6) que los títulos de ASLO varían con la edad, la estación y la geografía y podemos encontrar niveles positivos:
- en niños sanos en edad escolar: pueden tener títulos de 200 a 300 unidades Todd/ml.
- en portadores asintomáticos de EBHGA: suelen tener títulos muy bajos, justo por encima de los niveles detectables.
- en situaciones en que el colesterol sérico es alto (por ejemplo ante un síndrome nefrótico), también se pueden obtener niveles falsamente elevados de ASLO(6).
En cuanto a la indicación de su determinación, en los sumarios de evidencia de Uptodate sobre el manejo del dolor de garganta en adultos y niños(7,8) se considera que puede ser necesaria para confirmar una infección previa en pacientes que están siendo evaluados ante sospecha de fiebre reumática o glomerulonefritis post-estreptocócica pero que no es útil ni relevante en el manejo de los pacientes con faringitis por EBHGA.