Una Revisión Sistemática publicada en 19981, que incluye un metaanálisis con tres ensayos clínicos randomizados, concluye en mostrar "una evidencia modesta para recomendar el uso de la Presión Positiva Continúa en la vía Aérea (CPAP) en pacientes con edema pulmonar cardiogénico, por la asociación con una menor necesidad de intubación y a una disminución (en un ensayo) de la mortalidad. El papel de la Ventilación No Invasiva con Presión Positiva (NPPV) en este escenario requiere de posteriores estudios antes de ser ampliamente recomendada". Informa también de un Ensayo aleatorizado publicado en 1997, con 27 pacientes, que comparaba el CPAP con la NPPV, que fué suspendido antes de su finalización al detectar una tasa de infarto agudo de miocardio más elevada en el grupo de NPPV frente al del CPAP. Sin embargo apunta a las diferencias en la entrada del ensayo de más pacientes con dolor torácico en el grupo de la NPPV, como una causa que pudiera explicar estos resultados.
Un ensayo 2no incluido en
esta revisión, realizado en 1998 en 29 pacientes con edema agudo de pulmón y Infarto Agudo de miocardio, mostró buenos resultados para
la CPAP.
La Guía de Práctica Clínica de la British Thoracic Society(BTS) del 2002,3 sobre Ventilación no
invasiva en insuficiencia respiratoria aguda, recomienda en los casos de edema agudo de pulmón cardiogénico: "La CPAP ha demostrado ser
efectiva en pacientes con edema pulmonar cardiogénico que permanecen con hipoxia a pesar del máximo tratamiento médico. La Ventilación
No Invasiva*(NIV) debe ser reservada para pacientes en los cuales CPAP no ha sido exitosa (recomendación tipo B)".
Entre las contraindicaciones de la NIV, que detalla esta Guía, no se encuentra el Infarto Agudo de Miocardio. Refiere como una
contraindicación la "severa comorbilidad"; aunque especifica que la NIV puede ser utilizada en la presencia de esta contraindicación
"si se ha establecido una decisión de no proceder a una ventilación mecánica (C)".
*Esta Guía considera a la CPAP como un
procedimiento no incluido en la NIV
Posterior a la fecha de búsqueda de la citada guía (año 2000) se han localizado tres
ensayos clínicos randomizados que comparan la administración de CPAP y de la NIV en el edema agudo pulmonar
cardiogénico4,5,6 con un total de 186 casos. Ninguno de los tres ensayos ha confirmado la asociación de una tasa mayor de IAM o
de complicaciones isquémicas cardíacas en las ramas de la NIV. En uno de estos ensayos6 y en otro con 130 pacientes que
comparaba la administración de Oxígeno con la NIV7, entre los criterios de exclusión figuraban los pacientes con un IAM agudo
que precisaran trombolísis , por ser candidatos de ventilación mecánica.