No se han identificado estudios que comparen, de forma directa, el efecto de la psicoeducación grupal comparada con psicoeducación individual en pacientes diagnosticados de un un trastorno bipolar.
Una revisión sistemática de la Librería Cochrane cuyo objetivo era evaluar las intervenciones para ayudar a las personas en el reconocimiento de signos iniciales de recurrencia del trastorno bipolar(1) fue publicada en el 2006. La revisión incluyó un total de 11 ensayos clínicos, en los que la intervención (psicoeducación) se comparaba con el tratamiento habitual. Como medida de resultado primario se valoraba el tiempo hasta la primera recurrencia y éste solo estuvo analizado en seis de los ensayos. La revisión concluye que el tiempo hasta la recurrencia, el porcentaje de personas hospitalizadas y la funcionalidad en las personas con trastorno bipolar son mejoradas mediante la psicoeducación. Al analizar la aplicación de la psicoeducación en grupos versus individualmente, expone que "tres ensayos administraron la intervención en grupos y otros tres la administraron individualmente. El análisis de metarregresión no demostró diferencias significativas en los resultados de este factor (administración individual o en grupo). Se observaron datos insuficientes para comparar el tiempo hasta los episodios maníacos/hipomaníacos y depresivos."
Una guía de práctica clínica publicada también en el 2006(2), tras revisar la evidencia recomienda la psicoeducación dentro de las medidas terapéuticas en el tratamiento de un episodio agudo y tras la recuperación del mismo; pero no hay ninguna indicación sobre cuando, o en que pacientes, convendría hacerla de forma grupal o individual.
Se han localizado seis ensayos clinicos randomizados, en los que la intervención a evaluar es la psicoeducación en grupo; y que presentan un número de pacientes incluidos que oscila entre 37 y 441. La comparación(grupo control) se realiza con con la terapia habitual (3,4,7,8) o con la participación en un grupo no estructurado (5,6) , pero en nigún caso con una psicoeducación estructurada proporcionada de forma individual. Un ensayo está realizado en grupos de familiares de niños diagnosticados de un trastorno bipolar(7).
El unico ensayo randomizado controlado en que uno de los resultados a medir es la calidad de vida está realizado en 301 pacientes, en los que la intervención incluía grupos inciales de psiocoeducación comparado con la terapia habitual(8). A partir de los seis meses de seguimiento hay una mejoría en la calidad de vida relacionada con la salud mental; pero no así en la calidad de vida relacionada con la salud física, en la que no se muestran diferencias entre los grupos de intervención y de control.
En una serie de 57 pacientes, comparando con la situación previa a la psicoeducación en grupo, mostraron uan mejoría en la calidad de vida (9).
