Hemos encontrado una Guía de Práctica Clínica (GPC) (1) del año 1996, revisada el 2002 y realizada entre otras sociedades científicas por la Oncology Nursing Society (ONS). El ámbito de actuación es, entre otras, la oncología. La GPC proporciona recomendaciones para prevenir infecciones relacionadas con los catéteres, en pacientes adultos y pediátricos, no especificando patologías. Las recomendaciones generales son: 1) Proporcionar educación y entrenamiento de cuidados de salud a las personas que insertan y mantienen los catéteres; 2) usar precauciones estériles máximas de barrera durante la inserción venosa central del catéter; 3) usar una preparación de clorhexidina al 2% para la antisepsia de la piel; 4) evitar el reemplazo rutinario de catéteres venosos centrales como estrategia para prevenir la infección; y 5) usar una impregnación con antisepticos/antibioticos de los catéteres venosos centrales a corto plazo si el índice de la infección es alto a pesar de adherencia a otras estrategias (es decir, educación y entrenamiento, las precauciones estériles máximas de la barrera, y clorhexidina del 2% para el antisepsia de la piel). En cuanto a las recomendaciones específicas sobre los apósitos en la inserción del catéter, aconsejan: 1) Utilizar una gasa estéril o una preparación estéril, transparente, semipermeable para cubrir la inserción del catéter. 2) Si el paciente suda, o si el sitio tiene sangre o exudación, es preferible una preparación de gasa a una preparación transparente, semipermeable. 3) Cambiar el apósito si está húmedo, flojo o visiblemente manchado o cuando es necesaria la inspección del sitio. 4) Cuando el catéter es a corto plazo, sustituir los apósitos cada dos días si es de gasa y cada siete días si es transparente, excepto en los pacientes pediátricos en que el riesgo para desalojar el catéter compense la ventaja de cambiar el apósito. 5) Substituya los apósitos usados en las inserciones de los catéteres centrales túnelados o implantados no más de una vez por semana, hasta que el sitio de la inserción se haya curado. 6) No se puede hacer ninguna recomendación con respecto a la necesidad de apósito en anillo o túnel para una cura de la inserción bien hecha en los catéteres centrales a largo plazo. 7) No utilizar las preparaciones con esponja de clorhexidina en los recién nacidos de < 7 días o en edad del gestacional de < 26 semanas. No se puede hacer ninguna otra recomendación con respecto al uso de apósito con esponja de clorhexidina para reducir la incidencia de infección. 8) Hay que asegurarse que el material del catéter es compatible con los productos usados en la cura de la inserción. 9) No utilizar de forma rutinaria las soluciones antibióticas para prevenir infecciones relacionadas con los catéteres por su potencial de promover infecciones fungicidas y resistencia antimicrobiana. Esta solución profiláctica solamente debe utilizarse en circunstancias especiales (por ejemplo, para tratar a un paciente con un catéter a largo plazo con anillo, túnel o puerto que tienen una historia de infecciones múltiple a pesar de adherencia máxima óptima a la técnica aséptica).
Un metaanálisis (2) de ensayos clínicos randomizados controlados, incluyendo ocho estudios que implicaban un total de 4143 catéteres, evalúa la eficacia de la desinfección de la piel de la inserción de los catéteres vasculares centrales con clorhexidina comparada con la solución de povidona yodada. Los resultados sugieren que la incidencia de las infecciones está perceptiblemente reducida en pacientes que reciben para la desinfección de la piel de la inserción el gluconato de clorhexidina contra la solución de povidona yodada. Por lo que el uso del gluconato del clorhexidina es un medio simple y eficaz de reducir infecciones relacionadas con catéteres vasculares.