Una pregunta similar Preevid en el Banco de Preevid en 2019(1), resumía que ”La mayoría de los documentos indican que la toma de la dosis de tratamiento antihipertensivo a la hora de acostarse mejora el control de las cifras de presión arterial, aunque no existe unanimidad de resultados entre todos los tipos de pacientes y todos los tipos de fármacos”.
Se ha realizado una nueva búsqueda para actualizar la evidencia y, aunque sigue habiendo controversia entre los ensayos clínicos aleatorios (ECA) más importantes, la recomendación actual es que, la medicación se tome en el momento del día que mejore la adherencia del paciente. En todo caso, se debe alentar a las personas a tomar los medicamentos a la misma hora todos los días, para ayudar a garantizar la adherencia.
De todas las Guías de Práctica Clínica (GPC) revisadas (hemos seleccionado las más actuales)(2-6), solamente la GPC de The European Society of Cardiology (ESC, por sus siglas en inglés) acerca del manejo de la presión arterial elevada y la hipertensión(6), menciona el horario de la administración de los fármacos para finalmente indicar que, no hay evidencia confiable de que la medicación para reducir la presión arterial deba administrarse de manera rutinaria antes de acostarse, y que el horario de dosificación diurna de medicamentos no muestra beneficios para reducir la presión arterial en los principales resultados de enfermedad cardiovascular. Esta GPC recomienda que la medicación se tome en el momento más conveniente del día para mejorar la adherencia.
Los Sumarios de Evidencian (SE) de Uptodate y de Dynamed(7,8) describen dos grandes ECA que han publicado resultados contradictorios sobre la eficacia de la dosificación vespertina de medicamentos antihipertensivos frente a la dosificación matutina para prevenir eventos cardiovasculares adversos. El ECA Hygia Chronotherapy(9) demostró un beneficio para la dosificación vespertina (este ECA concluye que la dosis diaria completa de medicación antihipertensiva antes de acostarse puede reducir el riesgo de eventos cardiovasculares y muerte, en adultos con hipertensión), mientras que el ECA TIME(10) no encontró diferencias entre la dosificación vespertina y la matutina (refiere que la dosificación vespertina de medicamentos antihipertensivos puede no reducir el riesgo de muerte vascular y hospitalización por infarto de miocardio o accidente cerebrovascular en comparación con la administración matinal en adultos con hipertensión) aunque explica que la dosificación vespertina puede ser beneficiosa en pacientes que probablemente se adhieran a un régimen de “antes de acostarse".
En cambio, el SE de BMJ Best Practice sobre hipertensión esencial(11), no aborda el tema de la cronoterapia.
Por último, una Revisión Sistemática (RS) publicada en febrero de 2024 por la Cochrane Library, sobre el régimen de administración matutino vs. vespertino del tratamiento farmacológico para la hipertensión(12), incluyó 25 ECA, con 3.016 participantes con hipertensión primaria. Los ECA utilizaron inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (seis ensayos), bloqueadores de los canales de calcio (nueve ensayos), bloqueadores del receptor de angiotensina II (siete ensayos), diuréticos (dos ensayos), alfabloqueantes (un ensayo) y betabloqueantes (un ensayo). La mayoría de los participantes eran blancos; sólo dos ECA se realizaron en Asia (China) y uno en África (Sudáfrica). Todos los ensayos excluyeron a personas con factores de riesgo de infarto de miocardio y accidentes cerebrovasculares. Los autores concluyeron que, debido a que los datos son muy limitados y a los defectos en los diseños de los ensayos, esta RS no encontró evidencia adecuada para determinar qué régimen de dosificación horaria de los medicamentos puede tener los efectos más beneficiosos sobre los resultados cardiovasculares o los eventos adversos. Añaden que, aunque los resultados del metanálisis actual basados en datos de seis clases de fármacos antihipertensivos mostraron que la administración vespertina redujo la presión arterial sistólica media de 24 horas en 1,34 mmHg y la presión arterial diastólica media de 24 horas en 1,01 mmHg, tienen muy poca confianza en creer que la dosificación vespertina de fármacos antihipertensivos sea más o menos efectiva que la administración matutina para reducir la presión arterial de 24 horas. Además, se desconoce la relevancia clínica de esta disminución, ya que se informaron datos muy limitados sobre la evaluación multidimensional del impacto en la presión arterial y poca información sobre los resultados de supervivencia.
Por último indican que la revisión solo se centró en la monoterapia antihipertensiva y que no se debería asumir que sus conclusiones son aplicables a las personas que reciben tratamiento con múltiples fármacos antihipertensivos.