Los datos obtenidos de los estudios encontrados sugieren que el uso de vestimentas de colores diferentes al blanco (sobre todo el azul y el rosa), así como el uso de estampados y motivos infantiles (personajes de dibujos animados), podría disminuir la ansiedad en los niños, especialmente entre los más pequeños.
La mayoría de los estudios que relacionan el color del uniforme de los sanitarios con los sentimientos y emociones, incluida la ansiedad en niños están realizados en consultas de odontología(1-5) y plantas de hospitalización(6).
Un ensayo clínico aleatorizado (ECA)(1) evalúa, por una parte, el efecto de usar diferentes colores en el diseño del ambiente de la consulta y la vestimenta de los dentistas y, por otra, dos técnicas diferentes de distracción (música y material audiovisual), sobre la ansiedad en 132 niños de 6 a 9 años de edad (7,45 ± 1,1 años). Se midió el nivel de ansiedad (con el “Venham Picture Test”), la frecuencia cardíaca (FC) y el nivel de saturación de oxígeno (SpO2) antes y después de la administración de anestesia local. Los niños fueron asignados aleatoriamente a dos grupos (n = 66); en un grupo escucharon música con auriculares y en el otro grupo vieron dibujos animados. Los niños de cada grupo fueron asignados aleatoriamente a seis subgrupos (seis colores) en términos de color del interior de la consulta y vestimenta del dentista:
- La FC en los grupos verde, rosa y azul fueron más bajas en ambas técnicas de distracción en comparación con los otros colores.
- Los niveles de SpO2 fueron más altos en los grupos amarillo, rosa y azul en ambas técnicas de distracción, en comparación con otros colores, y los colores negro y rojo exhibieron los niveles más bajos de SpO2.
- Los niveles de ansiedad fueron más bajos en los ambientes azul y rosa (p<0,001 y los más altos en el negro y rojo.
El efecto acumulativo de la técnica de distracción y el color del ambiente no fue significativo. Los autores concluyen que el uso del color azul, rosa, verde y amarillo en la vestimenta de los dentistas y en el diseño interior de la consulta dental disminuyeron la ansiedad de los pacientes infantiles.
Un estudio transversal(2), que fue diseñado para conocer las preferencias de los niños por la vestimenta del dentista y su relación con la ansiedad, incluyó a 80 niños de entre 5 y 12 años que fueron seleccionados mediante muestreo aleatorio para participar en el estudio. Se mostraron cinco fotografías de dentistas con batas de diferentes colores: bata blanca, rosa, azul, con personajes de dibujos animados o un estampado floral (siempre en el mismo orden) a cada niño y se les pidió que decidiera qué dentista preferiría para que lo atendiera. Se utilizó una escala de imagen facial para evaluar el nivel de ansiedad. El 42,7% de los niños y el 38,5% de las niñas eligieron bata con personajes de dibujos animados. El color menos preferido por los niños fue el rosa (7,5%) en comparación con las niñas (28,1%). Mientras que el azul fue el menos preferido por las niñas (5,1%) en comparación con los niños (20%). Se realizó una prueba de Chi-cuadrado para establecer la asociación entre la ansiedad y la vestimenta que eligieron los niños, donde se encontraron resultados estadísticamente significativos (0,030), a favor de que los niños ansiosos preferían la vestimenta de bata con personajes de dibujos animados.
Un estudio de validación en el que se desarrolla, valida y aplica un instrumento para evaluar la percepción de los niños sobre la apariencia del odontopediatra(3), incluyó a 120 niños de entre 7 y 12 años que analizaron imágenes de dentistas pediátricos con vestimentas de diferentes colores: toda la vestimenta de color blanco (A); bata y gorro estampadas, mascarilla de colores (B); gorro y mascarilla estampados (C); bata y gorro blancas, mascarilla estampada (D). Considerando sólo la vestimenta, las percepciones de los niños fueron más positivas con el uso de la vestimenta C y D (p<0,05). En el análisis intragrupo, en comparación con la vestimenta A: los niños más pequeños tuvieron puntuaciones de percepción más altas respecto a la vestimenta D; los niños con experiencia previa y sin ansiedad prefirieron la vestimenta C y D; y los niños sin experiencia previa no mostraron diferencias respecto a A pero sí entre B y C (p<0,05).
Otro estudio transversal(4) evaluó la preferencia en la vestimenta del dentista entre 750 niños, subdivididos en cinco grupos de edad: 4 a 5 años, 6 a 7 años, 8 a 9 años, 10 a 11 años y 12 a 14 años. Se les mostró un conjunto de seis fotografías que incluían dentistas con bata de color blanco, color rosa, color verde, color azul y bata con personaje de dibujos animados y por último dentistas sin bata (atuendo formal). El nivel de ansiedad se evaluó utilizando dos escalas, la versión de caras de la Escala de Ansiedad Dental Infantil Modificada (MCDASf, por sus siglas en Inglés) y la Escala de Imagen Facial. Los resultados sobre la preferencia variaron según el grupo de edad:
- grupo de 4 a 5 años: bata con personajes de dibujos animados (35,5%), bata rosa (23,3%), bata blanca (21,3%), verde (12%), azul (4%) y sin bata (1,3%)
- de 6 a 7 años: bata con personajes de dibujos animados (34,6%), bata blanca (24,6%), rosa (16%), verde (10,6%), azul (4,6%) y sin bata (9,3%)
- de 8 a 9 años: bata blanca (42,6%), bata con dibujos animados (23,3%), bata rosa (19,3%), bata verde (2,6%) azul (2,6%) y sin bata (9,3%)
- de 10 a 11 años: bata blanca (61,3%), bata azul (18,6%), bata rosa (8%), bata verde (6%), bata con dibujos animados (1,3%) y sin bata (4,4%)
- de 12-14 años: bata blanca (65,3%), bata con dibujos animados (8%), bata rosa (5,3%), bata verde(1,6%), bata azul (1,3%) y sin bata (1,3%)
Los autores concluyen que los niños más pequeños tienen mayor preferencia por la vestimenta colorida sobre la convencional, en comparación con los niños mayores.
En otro estudio descriptivo se evaluaron las preferencias de los padres y los niños sobre la vestimenta de los dentistas(5). Se inscribieron 250 niños de entre 6 y 12 años y sus padres. Se mostraron a los niños y a sus padres por separado imágenes estandarizadas con personas de ambos sexos, vestimentas, protectores para los ojos, protectores para el cabello, máscaras y guantes, y se les pidió que eligieran sus preferencias. La ansiedad de los niños y sus padres se determinó mediante el MCDASf y el "Modified Dental Anxiety Scale" (MDAS, por sus siglas en inglés), respectivamente. Para los niños, además, se empleó el índice de dientes cariados, perdidos y obturados (CPOD, por sus siglas en inglés) para indicar experiencia previas al dentista. Tanto los niños como los padres prefirieron un dentista del mismo sexo que ellos (p < 0,05). Los niños ansiosos prefirieron vestimenta con estampados de dibujos animados, y los niños con baja ansiedad prefirieron vestimenta con batas blancas (p = 0,001). Los niños que preferían batas de colores tuvieron mayor CPOD (p < 0,001). Se encontraron diferencias estadísticamente significativas en las preferencias de vestimenta entre niños y padres (p < 0,001): los padres eligieron preferiblemente batas blancas (72,8% frente al 50% de los niños); las batas con estampado de dibujos animados (14,8%) y las batas desechables (6,8%) fueron preferidas significativamente más por los niños. Además, los guantes blancos fueron los preferidos mayoritariamente por los padres (73,6%); los niños eligieron guantes de colores (48,0% frenta al 26,4% de los padres).
Otro ECA tuvo como objetivo investigar el nivel de ansiedad en dos grupos de niños expuestos a la vestimenta de las enfermeras, blanca o de color, en una planta de hospitalización(6). Se asignaron al azar 47 sujetos, de edad comprendida entre 7 y 15 años, en cada uno de los dos grupos. La ansiedad de los niños se evaluó al ingreso y al alta mediante la MCDASf. Los niños expuestos a vestimenta blanca, mostraron mayores niveles de ansiedad en comparación con los niños expuestos a uniformes de colores (p ≤ 0,05). Además del color de la ropa de la enfermera, el sexo femenino, la edad >11 años y vivir en familias con más de cuatro miembros fueron predictores de puntuaciones de ansiedad global más bajas. Los autores concluyen que proporcionar un ambiente amigable para los niños, utilizando una vestimenta colorida puede promover la relación de las enfermeras con los niños hospitalizados, lo que puede ayudar a promover la calidad de la atención enfermera.
En nuestro contexto sanitario, se ha identificado un documento del Plan estratégico de Castilla y León para la Humanización de la Atención Sanitaria(7), en el que se realizan una serie de recomendaciones sobre las instalaciones para el área de pediatría´; entre ellas se incluyen uniformes de los profesionales sanitarios (médicos, enfermeras y celadores) de colores y con estampados divertidos.