La revisión de la literatura sugiere que envolver a los bebés aumenta la duración del sueño tranquilo. Esta práctica debe realizarse “de forma segura”, envolviendo por encima de las caderas para minimizar el riesgo de displasia, poner a los bebés en posición supina (boca arriba) y suspender esta práctica cuando los bebés muestran signos de darse la vuelta por sí mismos; siguiendo estas recomendaciones, envolver a los niños parece presentar un riesgo mínimo.
Una revisión sistemática (RS)(1) investigó el efecto que tiene envolver a los bebés de hasta 1 año de edad para promover la calma y el sueño, y actualiza otra RS publicada en 2007(2), en la que se concluyó que envolver a los bebés por encima de la cintura aumentaba la duración del sueño, reducía la actividad motora y los sobresaltos, y disminuía la frecuencia cardíaca. Esta nueva RS(1) incluyó seis estudios publicados desde 2007 hasta marzo de 2022. Aunque la intervención (envolver), se definió de diversas maneras en los estudios, lo que podría limitar la interpretación y la transferibilidad de los resultados, estos indican que envolver a los bebés parece aumentar la duración del sueño tranquilo.
En otra RS(3) se sintetiza la evidencia sobre los riesgos y beneficios de envolver a los recién nacidos sanos a término, cerca de término o de mayor edad. Esta RS presenta algunas limitaciones, por ejemplo, el número de estudios fue pequeño, con pocos ensayos controlados aleatorios (ECA), y los investigadores utilizaron diferentes definiciones sobre las telas/muselinas para envolver. Los resultados se expresan de forma narrativa e indican que:
- Envolver a los bebés les calma y promueve el sueño.
- Puede haber un ligero riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) asociado a esta práctica.
- Envolver firmemente alrededor de las caderas está fuertemente asociado con la displasia de cadera.
- Es igual o menos efectivo que otros métodos no farmacológicos para controlar el dolor.
- Envolver al bebé no tiene un impacto negativo en la lactancia materna a largo plazo.
Los autores concluyen que si se toman algunas precauciones, como envolver a los bebés por encima de las caderas “de forma segura” para minimizar el riesgo de displasia, evitar el sobrecalentamiento, colocar a los bebés para que duerman en posición supina y suspender esta práctica cuando los bebés muestran signos de darse la vuelta por sí mismos, la práctica de envolverlos presenta un riesgo mínimo.
Según la American Academy of Pediatrics(4) , envolver al bebé puede asemejarse a la sensación de estar en el seno materno, y, cuando se hace de manera correcta, puede ser una técnica eficaz para ayudar a tranquilizar al bebé y a promover el sueño. Pero advierte que se deben seguir ciertas recomendaciones para hacerlo con seguridad:
- Se debe colocar al bebé exclusivamente boca arriba para dormir y vigilarlo para que no se voltee accidentalmente y reducir el riesgo del SMSL. Dejar de envolver al bebé tan pronto como muestre señales de estar tratando de voltearse por sí solo. No existe evidencia con referencia al riesgo del SMSL si los brazos se dejan o no afuera. [Esta recomendación también está recogida en los sumarios de evidencia SE consultados sobre SMSL.(5,6)]
- Envolver a los bebés puede disminuir su habilidad para despertarse, lo que puede ser una de las razones por las cuales los bebés mueren por el SMSL.
- No usar telas o mantas pesadas, que pueden ejercer demasiada presión sobre el pecho y los pulmones del bebé. Evitar que el bebe se acalore.
- Los bebés que son envueltos de forma muy apretada pueden desarrollar problemas de las caderas. Se debe usar la técnica de “envolver de forma segura” que permite la flexión y abducción de la cadera y la flexión de la rodilla, para reducir el riesgo de displasia. Esta misma recomendación está recogida en los SE(7-9) consultados, basados a su vez en la declaración informativa(10) sobre telas/muselinas para envolver y displasia de cadera que la Sociedad de Ortopedia Pediátrica de América del Norte, el Instituto Internacional de Displasia de Cadera, la Academia Estadounidense de Cirujanos Ortopédicos, la Iniciativa de Huesos y Articulaciones de los Estados Unidos y los Hospitales Shriners para Niños, promueven entre los padres que deciden envolver a sus bebés.
Se ha incluido un ECA(11) realizado para determinar el efecto de enseñar técnicas calmantes 4S (envolver, sujetar a un lado o en posición boca abajo, hacer ruido blanco y balancear) en las conductas de autorregulación de los bebés informadas por los padres con respecto al sueño, el llanto y la alimentación. Se formó un grupo de intervención (GI) y un grupo de control (GC), cada uno formado por 21 díadas madre-hijo. Se aplicó un programa de entrenamiento de 90 minutos a las madres en el GI durante la visita domiciliaria en la cuarta semana después del nacimiento. Para ambos grupos, las variables dependientes del estudio son las conductas de autorregulación de los bebés informadas por los padres en las semanas 3, 7, 11 y 23. Los resultados mostraron que la frecuencia media de alimentación diaria y la duración media del llanto diario de los bebés en el GI fueron significativamente menores en comparación con los bebés del GC y que la duración media del sueño diario de los bebés en el GI era estadísticamente significativamente mayor, en comparación con los bebés en el GC, en las semanas 7 y 11 después de la intervención.
Por último, se han consultado Guías de Práctica Clínica (GPC)(12,13) y recomendaciones para el cuidado de bebés(14-16) , pero en ninguna de ellas se ha encontrado la recomendación de envolver al bebé para propiciar el sueño.