Se han evaluado dos sumarios de evidencia que revisan la técnica de la punción lumbar, sus contraindicaciones y las potenciales complicaciones asociadas a su realización(1,2). En ninguno de los documentos, se hace mención a que el antecedente de haber sido sometido a un procedimiento de refuerzo vertebral percutáneo tras fractura (vertebroplastia o cifoplastia*) suponga una contraindicación para la realización de una punción lumbar (independientemente del nivel de la lesión).
Se han revisado además guías de práctica clínica(3,4) y sumarios de evidencia(5-7) que abordan el manejo del paciente con una fractura vertebral sin encontrar información relevante en relación a la duda planteada. Tampoco la búsqueda en las bases de datos Medline y Embase reporta resultados de interés.
Comentar que en los sumarios de evidencia(1,2) sobre la punción lumbar se señala que aunque no hay contraindicaciones absolutas para realizar el procedimiento, se debería tener precaución en pacientes con:
- Posible aumento de la presión intracraneal con riesgo de herniación cerebral.
- Trombocitopenia u otra diátesis hemorrágica (incluyendo el tratamiento anticoagulante).
- Sospecha de absceso epidural espinal
*La vertebroplastia percutánea y la cifoplastia son técnicas mínimamente invasivas de fusión percutánea o de refuerzo vertebral que consisten básicamente en la introducción de un cemento óseo en un cuerpo vertebral fracturado para estabilizar la fractura vertebral(8). En el caso de la cifoplastia, la inyección del material no se hace directamente en el hueso esponjoso vertebral, sino que previamente se crea una cavidad en la zona central del cuerpo vertebral (habitualmente mediante el inflado de un balón ortopédico); dicha cavidad es rellenada posteriormente con el cemento.