La rotura en asa de cubo
es una rotura vertical u oblicua del menisco en la que una parte del mismo se separa en forma de ojal, o de asa de cubo, con desplazamiento del fragmento medial a la fosa intercondílea. Es una lesión poco habitual y supone el 10% de las roturas traumáticas agudas de menisco(1, 2).
No se han encontrado ensayos clínicos controlados, ni series de casos en las que se evalúen las opciones de tratamiento conservador comparado con el quirúrgico en pacientes diagnosticados de rotura de menisco en "asa de cubo". Varias series publicadas de pacientes con este tipo de lesión(3,4,5) describen una evolución, en general, favorable tras ser intervenidos. Aunque está descrita la recuperación espontánea(6); normalmente este tipo de rotura, por los síntomas o repercusiones que presenta, suele ser intervenida, siendo valorada por los traumatólogos como un procedimiento difícil y complejo(2).
Los sumarios de evidencia sobre rotura de menisco revisados(7,8) no incluyen entre las indicaciones específicas para cirugía la rotura en "asa de cubo" y la indicación del tratamiento conservador, por laparoscopia o cirugía abierta, habrá que establecerla en base a otros criterios. De la lectura de los sumarios destacamos que:
- El tratamiento de las roturas de meniscos dependerá del tipo de desgarro (p. Ej. interno, horizontal o vertical) y de la zona en concreto que se haya realizado, de la presencia de síntomas mecánicos significativos y de si hay derrames persistentes en la rodilla.
- Las roturas pequeñas verticales no suelen causar síntomas y, si no interfieren con la función general de la rodilla, pueden manejarse médicamente con descanso, restricción de actividad y fisioterapia.
- Muchos médicos tratan de agotar las opciones de manejo conservador antes de referir a dichos pacientes a cirugía. En la decisión de tratamiento conservador o quirúrgico Influyen la edad del paciente, la comorbilidad, el período transcurrido desde la rotura, y la existencia de un trastorno degenerativo de la rodilla.
- Los siguientes factores sugieren que la terapia conservadora podría ser exitosa:
- Los síntomas se desarrollan entre 24 y 48 horas después de la lesión aguda (en lugar de inmediatamente después).
- La inflamación es mínima.
- La rodilla tiene un rango completo de movimiento, con dolor solo o cerca de la flexión completa.
- El dolor con la prueba de McMurray ocurre solo con flexión profunda de la rodilla.
- Los siguientes factores sugieren que se precisará cirugía, si:
- La lesión se produjo tras una torsión grave y no se pudo reanudar posteriormente la actividad.
- Se bloqueó la rodilla o el movimiento se restringió severamente (Esto suele ocurrir con una rotura en
asa de cubo
). - La prueba de McMurray provocó dolor con flexión mínima de la rodilla.
- Existe una rotura del ligamento cruzado anterior asociada.
- Hay poca mejoría en los síntomas después de tres a seis semanas a pesar del tratamiento conservador adecuado.
- La reparación quirúrgica del menisco tiene menos éxito en pacientes mayores con osteoartritis severa de la rodilla y desgarro meniscal degenerativo. Algunos médicos esperan hasta que el bloqueo sea recurrente y debilitante en dichos pacientes antes de derivarlos a cirugía.
Dos revisiones narrativas (9,10) tampoco citan la rotura en asa de cubo
como una indicación clara de cirugía; aunque suele ser el tratamiento más habitual, por el bloqueo e inestabilidad de la rodilla que frecuentemente se asocia.
Las series de casos de rotura en asa de cubo de menisco que hemos identificado(3-5), parten de pacientes en los que se interviene por artroscopia o extirpación del menisco; sin que ofrezcan información de la evolución en los pacientes con tratamiento conservador. Las series describen buenos resultados con la reparación del menisco con sutura(1,4), realizada por artroscopia(3) y con unos criterios concretos en cuanto edad, alcance y tiempo de evolución de las lesiones. En una serie(5) la resonancia magnética fue un buen predictor, comparado con la artroscopia, de los criterios de reparación del menisco.
Está descrito un caso de recuperación espontánea en un niño de 11 años con rotura traumática de menisco en "asa de cubo" al que se indicó la realización de una artroscopia, pero que fue dado de alta y que 6 semanas despúes fue atendido en consulta sin ninguna queja de dolor y habiendo recuperado el rango completo de movimiento(6). La imagen de resonancia magnética mostró la reducción del fragmento de menisco desgarrado sin ningún cambio de señal que hiciera pensar en una rotura de menisco.
semi-rotura de menisco en asa de cuboen la que la superficie del menisco suele estar intacta y hay un colgajo de menisco que se desplaza hacia la línea intercondílea(11). En 15 pacientes con este tipo de lesión, no fue posible o no funcionó bien la reparación quirúrgica, y los autores concluyeron que el tratamiento sería de entrada conservador, si no hubiera otras lesiones asociadas(11).