Se han seleccionado tras la búsqueda 1 revisión narrativa, 1 estudio, 1 protocolo de enfermería y un sumario de evidencias (SE) de Uptodate. En general, recomiendan que el volumen máximo no debe exceder al establecido por el fabricante del nebulizador, que la mayoría fija en 5 ml, aunque algunos nebulizadores permiten hasta 10 ml.
Señalan además que la cantidad de mililitros en la preparación de una nebulización en gran medida depende del tipo y volumen del fármaco a diluir para nebulizar (¿broncodilatadores, antibióticos, corticoides, antihistamínicos, etc.?). Además, deben seguirse las recomendaciones del fabricante según tipo de nebulizador utilizado (¿nebulizadores de malla, ultrasónicos, de chorro?).
Una revisión narrativa sobre los conceptos básicos de la terapia nebulizada(1), con respecto a los aspectos técnicos de la nebulización indica que habitualmente, la solución se prepara con un volumen de llenado inicial (“volumen nominal”) de 2 a 4 ml de suero fisiológico/solución salina isotónica (0,9% NaCl) (para conseguir soluciones lo más isotónicas posibles y evitar en lo posible el broncospasmo). En ocasiones, si el paciente no tolera la solución preparada sólo con suero salino, puede emplearse agua destilada o una combinación de ambas, a fin de conseguir la solución que tolere mejor el paciente. Para los nebulizadores con un “volumen residual” (porción de la solución o suspensión que permanece en la cámara cuando termina la nebulización) menor de 1 ml se recomienda un volumen nominal de 4 ml. Volúmenes menores pueden hacer que aumente la viscosidad de la solución y dificultar su nebulización. Debe evitarse la mezcla de fármacos en el mismo nebulizador, excepto si hay estudios que aseguren su compatibilidad y estabilidad.
Un estudio sobre la capacitación de las enfermeras para mejorar el uso de broncodilatadores en pacientes mecánicamente ventilados(2) entre las recomendaciones durante las etapas de la nebulización señala que el fármaco se debe diluir en 4 a 10 ml de solución fisiológica al 0,9%.
Un protocolo de enfermería para la administración de medicación inhalatoria y nebulizaciones(3), entre sus recomendaciones señala que se debe verificar que el volumen de la nebulización es adecuado para nebulizar la mayor cantidad de fármaco posible, en torno a 3-6 ml. La importancia del volumen radica en que no se debe nebulizar por completo todo el líquido, quedando en torno a 0,5-3 ml, estos autores lo denominan “volumen muerto”. Al incrementar el volumen de la nebulización se reduce el volumen de fármaco sin nebulizar. No se debe exceder el volumen máximo establecido por el fabricante del nebulizador, que la mayoría fija en 5 ml, aunque algunos nebulizadores permiten hasta 10 ml. (Nivel de evidencia 3.e.; grado de recomendación A)(*)
Puede añadir suero fisiológico 0,9% a la cazoleta para alcanzar el volumen recomendado. El uso de suero fisiológico 0,9% permite obtener una solución isotónica, que reduce el riesgo de broncoespasmo, que puede producirse al usar agua destilada. Algunos fármacos, como la amfotericina B, deben diluirse con agua destilada en lugar de suero fisiológico al 0,9%.
El SE de Uptodate sobre el uso de medicación con nebulizador en niños(4) indica que el volumen muerto es la solución de medicamento residual que queda en el depósito del nebulizador después de la terapia. La cantidad puede variar considerablemente entre los diferentes modelos de nebulizador. La concentración de fármaco dentro de este volumen muerto se incrementa por la evaporación del soluto, como la solución salina normal, durante la nebulización. Esto puede conducir a un desperdicio considerable del fármaco. La cantidad de fármaco desperdiciado se puede reducir ajustando el volumen de partida de la solución de nebulizador por lo menos a 4 ml, una cantidad que generalmente se puede administrar en 10 minutos usando caudales de 8 L/min. Golpear ligeramente la cámara del nebulizador durante la nebulización puede reducir aún más el volumen muerto.
En el Banco de Preguntas de este Servicio hay una pregunta realizada con anterioridad, cuya respuesta está relacionada con su consulta: “¿Según la evidencia disponible, con qué es más correcto diluir las nebulizaciones, con agua estéril para inyección o con suero fisiológico?”. Puede acceder a ella al final de la página.
(*) Mirar clasificación de los Niveles de evidencia en el protocolo.