Tras la búsqueda se han encontrados tres Sumarios de Evidencias (SE) de Uptodate y una Revisión Sistemática (RS) que indican que los antipsicóticos se asocian a disfunción sexual (DS), tanto en hombres como en mujeres, aunque en ocasiones aparece la DS en personas con esquizofrenia independientemente del tratamiento. Las principales recomendaciones que hacen para solucionar/mejorar la DS son: bajar la dosis, cambiar a otro antipsicótico (mejor un antipsicótico de segunda generación), días de descanso, o medicación adicional. Pero se recomienda realizar mas ensayos clínicos aleatorizados (ECAs).
El SE de Uptodate(1) sobre DS en mujeres indica que los antipsicóticos se asocian con disfunción sexual tanto en hombres como en mujeres. Estos medicamentos inhiben la dopamina, que puede servir como neuromodulación central de la función sexual. También es posible un aumento de la prolactina, causando supresión gonadal que afecta a la función sexual. Los antipsicóticos de segunda generación (ASG) (por ejemplo, el aripiprazol) aumentan los niveles de prolactina en un grado menor que los antipsicóticos de primera generación (APG) (por ejemplo, olanzapina o risperidona), y por lo tanto pueden tener menor impacto en la función sexual.
El SE de Uptodate(2) sobre los antipsicóticos de APG, entre los efectos colaterales señala la DS, indicando que, incluso en ausencia de elevación de la prolactina, los APG se han asociado con una alteración de la función sexual. Indica que una RS(3) llegó a la conclusión de que más del 70 % de los pacientes con haloperidol experimentaron alguna forma de DS. Posteriormente, otra RS con meta-análisis(4) informó de síntomas de DS en el 45% de personas con haloperidol y en el 60% de los pacientes tratados con tioridazina. En este estudio, el riesgo de sufrir cualquier DS con haloperidol solamente fue ligeramente mayor que la reportada para los ASG risperidona y olanzapina, pero el riesgo de problemas relacionados con la excitación o el orgasmo con tioridazina fue dos veces superior.
El SE de Uptodate(5) sobre los ASG, indica que la DS en todas las fases de la actividad (líbido, excitación y orgasmo) es común con el tratamiento antipsicótico. Varios mecanismos farmacológicos pueden contribuir a los problemas sexuales, incluyendo la pérdida del deseo a través de la inhibición de la motivación dopaminérgicos y los circuitos de recompensa, la disfunción eréctil a través del bloqueo alfa adrenérgico y la actividad anticolinérgica y el deterioro en el deseo, la excitación y el orgasmo debido a la elevación de la prolactina.
La RS nombrada en el anterior SE(3) señala que del 40 al 60 % de los pacientes que tomaron clozapina, olanzapina o risperidona informaron de efectos secundarios sexuales, y los que tomaron aripiprazol, quetiapina y ziprasidona experimentaron tasas menores, pero aún significativas, del 16 al 27 %.
La otra RS mas reciente(4) sugirió una mayor estratificación en los efectos secundarios sexuales experimentados:
● Del 60 al 70 % de los que tomaron paliperidona y risperidona
● Del 50 al 60 % de los que tomaron olanzapina, quetiapina y ziprasidona
● Menos del 50 % de los que tomaron clozapina
● Del 16 a 27 % de los que tomaron aripiprazol
El SE indica que las menores tasas de problemas sexuales se encuentran en ensayos clínicos realizados por la Food and Drug Administration (FDA) (del 0 al 4 %), y esto puede ser debido a la renuencia del paciente a informar de forma espontánea sobre los efectos secundarios sexuales y a la aparición de una reducción general de la función sexual entre individuos con esquizofrenia, independientemente del tratamiento.
La RS de 2011(3) encontró que entre los pacientes que experimentaron DS secundaria a un fármaco antipsicótico, el cambio a aripiprazol fue asociada más a menudo a la resolución de la DS en comparación con los pacientes que cambiaron a otro antipsicótico. Otras opciones para abordar estos problemas incluyen la evaluación para la elevación de la prolactina, y los tratamientos estándar para la DS causada por otros medicamentos.
Una RS de 2012 (6) evalúa diferentes estrategias para el tratamiento de la DS debida al tratamiento antipsicótico. Por ejemplo: reducción de la dosis del antipsicótico, días de descanso, medicación adicional, o cambio a otro antipsicótico.
Concluye que el fármaco sildenafilo puede ser una opción útil en el tratamiento de la DS inducida por antipsicóticos en los hombres con esquizofrenia, pero esta conclusión se basa solamente en un pequeño ensayo corto. El cambio a la olanzapina puede mejorar la función sexual en hombres y mujeres, pero el ensayo que evaluó este cambio también fue un ensayo abierto y pequeño. Se necesitan ECAs bien diseñados que están cegados y bien realizados e informados, que investiguen los efectos de la reducción de la dosis, el descanso de los medicamentos, el tratamiento sintomático y la conmutación de antipsicótico en la función sexual en personas con DS inducida por antipsicóticos.
En una pregunta realizada a este Servicio Preevid incluida en el Banco de Preguntas (mirar mas abajo) se nombra una revisión de la DS generada por medicamentos, y sobre el tratamiento de la disfunción asociada a fármacos antipsicóticos concluye que ésta es habitualmente benigna y reversible. Aunque al disminuir la dosis se suele producir mejoría en los trastornos de erección y de eyaculación, pero con frecuencia requiere un cambio por otro antipsicótico.