Guía de Práctica Clínica (GPC) (1) para el tratamiento de la fibromialgia (FMG) indica entre los tratamientos recomendados para esta enfermedad, la educación del paciente y la familia: Los pacientes necesitan entender su enfermedad antes de que le sea prescrita cualquier medicación. Deben ser tranquilizados explicándoles que la FMG es una "verdadera" enfermedad (Nivel de evidencia III, Recomendación C). Se les debe educar sobre pronóstico, fisiopatología, y principios del tratamiento. Las conferencias, discusiones de grupo y el material escrito mejoran los resultados (dolor, sueño, fatiga, eficacia del automanejo de los síntomas de la enfermedad y la calidad de vida) (Nivel de evidencia I, Recomendación A). La GPC utiliza el cuestionario Fibromyalgia Impact Questionnaire (FIQ) para supervisar el efecto de las intervenciones y para evaluar estado funcional paciente.
La GPC (2) para el tratamiento del dolor del síndrome de la FMG en adultos y niños indica entre los tratamientos no farmacológicos: proveer a los pacientes de información básica en cuanto a opciones de tratamiento de la FMS; psicoeducación en los programas para el automanejo del dolor como parte inicial del tratamiento (Grado de recomendación A); incorporar terapia cognoscitivo-conductual (TCC) para reducir dolor (realza la autosuficiencia y mejora la funcionalidad) (Grado de recomendación A). Recomienda utilizar tratamientos multidisciplinarios que incorporan dos o más estrategias para disminuir dolor y para mejorar la función, especialmente en pacientes que no han respondido a tratamientos simples (Grado de recomendación A). En niños y adolescentes con FMG recomienda el uso de TCC para reducir dolor y discapacidad psicológica, realzando la autosuficiencia, automanejo de la enfermedad y habilidades para hacer frente al dolor. (Grado de recomendación: panel de consenso). Igualmente otra GPC (3) para el manejo de la FMG indica que entre las mejores recomendaciones para el manejo de la enfermedad está la TCC, junto con el uso de los tricíclicos a bajas dosis, el ejercicio cardiovascular, la educación del paciente, o una combinación de éstos tratamientos.
Una GPC (4) para la evaluación y tratamiento del dolor crónico incluye entre las enfermedades que sufren este síntoma crónico la FMG. Entre los puntos dominantes de tratamiento del dolor crónico indica que el TCC con la restauración funcional puede reducir el dolor y mejorar la función. La rehabilitación biosicosocial reduce dolor y mejora la función. El automanejo del síntoma asegura la participación activa del paciente e instauración de metas razonables. El TCC para la rehabilitación de pacientes con dolor crónico persistente y continuo se considera el mas provechoso. Indica que los pacientes pueden ser referidos a un terapeuta, consejero, trabajador social o psicólogo para el tratamiento. Sin embargo, hay muchos pasos del TCC que pueden ser dados por los médicos de atención primaria. Las metas del TCC en el manejo del dolor crónico son: mejorar el funcionamiento físico, reincorporación al trabajo, reducir la discapacidad, reducir la evitación relacionada con el miedo al dolor y reducir el estrés y la depresión. La GPC marcas las estrategias principales del TCC en atención primaria.
Un sumario de evidencia (5) revisado en enero de 2009 indica que hay fuerte evidencia acerca del papel de la TCC en el tratamiento de la fibromialgia. El programa basado en la meditación y relajación y la terapia cognoscitiva conductual más tradicional han sido efectivos en estudios de pacientes con el fibromialgia. Señala que la depresión ha respondido bien ante estas terapias. Por otra parte también señala la educación, centrándose en el automanejo, que combinado con un programa de ejercicios, el efecto de estos últimos es realzado.