Un estudio(1) de 660 individuos de 50 años o más, que participaron en el Estudio Longitudinal de Ohio del Envejecimiento y Jubilación de Ohio (OLSAR: Ohio Longitudinal Study of Aging and Retirement), encontró que las personas mayores con opinión más positiva de su propio envejecimiento, medida 23 años antes, habían vivido 7,5 años más que los individuos con una opinión menos positiva. Seguía habiendo esta ventaja después de que fueran incluidas co-variates como edad, género, estado socioeconómico, soledad y salud funcional. También se encontró que este efecto es logrado parcialmente por la voluntad de vivir. Combinando los datos obtenidos en el OLSAR con los datos del National Death Index, los autores hicieron un análisis de la supervivencia. Los resultados sugieren que la auto-percepción de grupos estigmatizados puedan influir en la longevidad. Estos mismos autores(2) examinaron en 433 pacientes, incluidos también en el estudio longitudinal OLSAR , aquellos que tenían una opinión sobre su propio envejecimiento más positiva y que a lo largo de un seguimiento de 18 años tuvieron una salud funcional mejor que los que tenían una opinión mas negativa. Controlaron los factores diferenciales de salud auto-percibida, de edad, de género, de raza, y de estado socioeconómico. Con este estudio ampliaron y ratificaron los resultados del estudio de Ohio, por el cual la opinión de los individuos acerca de su propio envejecimiento afecta a su salud funcional.
También con 241 ancianos incluidos en el estudio OLSAR se realizó un estudio(3) sobre si factores específicos como es la edad, acerca de la creencia de los ancianos sobre su propio envejecimiento, predice su probabilidad del acoplamiento a comportamientos preventivos de salud (comer una dieta equilibrada, hacer ejercicio, etc.) en un cierto plazo. El estudio concluye en que los individuos con opiniones más positivas del envejecimiento tendieron a practicar comportamientos más preventivos de la salud durante las dos décadas siguientes al control de la edad, la educación, la salud funcional, el género, la salud percibida y la raza (P = 0.032). Los resultados sugieren que la dirección de las opiniones sobre el envejecimiento podría ayudar para mejorar los esfuerzos de aumentar comportamientos preventivos de la salud en la población más anciana.
En una evaluación(4) de la Escala Interpersonal de Confianza de Rotter (EICR) como predictor del bienestar psicológico, de la salud funcional, y de la longevidad en una muestra de 100 hombres y mujeres de entre 55 y 80 años (edad media 66.8). Los altos niveles de confianza fueron asociados con una mejor opinión de la salud de uno mismo y a más satisfacción de la propia vida. El seguimiento fue aproximadamente de 8 años. En cuanto al seguimiento de la mortalidad después de 14 años, demostró que aquellos con altos niveles de confianza tenían una supervivencia más larga (p = 03), encontrando algo debilitada los grados de salud de base. Estos resultados ilustran los efectos protectores de la salud con altos niveles de confianza y sugieren la utilidad potencial del concepto de confianza para entender un envejecimiento adecuado.
Usando los datos de las encuestas Health and Retirement Survey (HRS) de1992, Asset and Health Dynamics Among the Oldest Old (AHEAD) de 1993 y el archivo Tracker (2.0), se ha realizado un estudio(5) para determinar si la esperanza de vida auto-percibida predice la mortalidad, después de controlar las medidas de salud, de salud auto-percibida, y de características sociodemográficas. La muestra incluyó a 2.102 hombres y a 3.160 mujeres. Durante los 2 años de seguimiento, murieron el 9% (n = 185) de los hombres y el 5% (n = 166) de las mujeres. La muestra de las horas fue abarcada de 4.090 hombres y de 4.885 mujeres. Cuatro por ciento (n = 164) de los hombres murieron y el 2% (n = 99) de las mujeres murieron en los 3 años de seguimiento. Los autores concluyen que los resultados sugieren que, aunque la esperanza de vida y la salud auto-percibidas pueden estar conceptualmente relacionadas, tengan efectos empíricos independientes en la mortalidad.
Un estudio(6) interdisciplinar y longitudinal sobre la vejez, acerca de la personalidad, opiniones sobre la vejez de uno mismo y salud subjetiva, según lo determinado por el modelo de cinco factores de la personalidad, estudia si se puede predecir la salud subjetiva cuando la salud y la depresión clasificadas médicamente son controladas. Se analiza en una cohorte de 362 personas de una comunidad alemana mayores de 60 años. Los resultados indican que el neuroticismo tiende a provocar estereotipos mas negativos del envejecimiento; y que las actitudes negativas sobre su propio envejecimiento se pueden modificar con una intervención adecuada.