Un ensayo clínico controlado, aleatorio y multicéntrico (1) compara el valor predictivo de las escalas de evaluación de riesgos de úlcera por presión Norton y Braden, para evaluar el impacto como medida eficaz preventiva y su validez predictiva. De los 1772 pacientes ancianos que participaban en el ensayo, 314 fueron seleccionados y asignados aleatoriamente a un grupo de cambios posturales y 1458 pacientes al grupo No-cambios posturales. Usando las escalas Braden y Norton, se fue anotado dos veces por semana durante un período de cuatro semanas el riesgo de úlcera de presión. La evaluación fue supervisada diariamente. Los pacientes en riesgo del grupo con cambios posturales (resultado de Braden < 17 o resultado de Norton < 12) fueron asignados aleatoriamente a un programa de cambios cada dos o cada 4 horas con un colchón de reducción de presión. El grupo No-cambios posturales recibió el cuidado preventivo basado en el juicio clínico de las enfermeras. Concluyeron los autores: la exactitud de diagnóstico era similar para ambas escalas. Si las enfermeras actúan según las escalas de predicción de riesgo, el 80% de los pacientes recibirán innecesariamente medidas preventivas. El uso de medidas preventivas eficaces disminuyó el valor profético de las escalas de evaluación de riesgo. Las enfermeras predijeron el desarrollo de la úlcera de la presión de forma menos adecuada que las escalas Braden y Norton. Solamente la actividad, la percepción sensorial, la condición de la piel y la existencia de viejas úlceras de presión eran predictores significativos de úlcera de presión. Aunque el valor predictivo de las escalas es pobre parece ser una alternativa mejor que confiar solo en el juicio de las enfermeras.
Un ensayo controlado (2) realizado en Japón evaluó la efectividad de la escala Norton, comparada con la escala Waterlow, para predecir la frecuencia de los dolores en las úlceras por presión. Se escogieron para la muestra dos salas de cuidados de ancianos (una de mujeres y otra de hombres), el tamaño de muestra fue de 185 y la edad media de 80.4. Se determinó la admisión de cada nuevo paciente usando la escala Norton y la Waterlow. Al final de la investigación, hubo ocho pacientes que tenían úlceras dolorosas. Los resultados indicaron que la escala Norton identificó seis de los ocho pacientes mientras que el Waterlow identificó a siete de ellos. La escala de Waterlow, sin embargo, parece haber identificado mal a 72 pacientes del grupo de riesgo. Los autores encontraron la escala de Norton como la mas adecuada para usar en las unidades de cuidados de mayores. Recomiendan que debe seguir utilizándose mientras se encuentra un sistema mejor.
Una Guía de Práctica Clínica (3) del Servicio Andaluz de Salud sobre prevención y tratamiento de las úlceras por presión recomienda que cuando la valoración del riesgo recaiga fundamentalmente en cuidadoras informales o en residencias de ancianos, se indicará la utilización de la escala de Norton, por su mayor simplicidad. Y que en el ámbito domiciliario una valoración superficial de la piel debe practicarse en cada visita y debe instruirse al cuidador en la valoración de la piel aplicándose la escala de Norton.