[Por la abundancia de información localizada, se han seleccionado las 2 Guías de Práctica Clínica más recientemente actualizadas en el ámbito internacional y se mencionan las GPC de nuestro contexto sanitario].
La documentación encontrada informa que, el estado nutricional está claramente relacionado con la posibilidad de aparición de lesiones por presión (LPP) o con la dificultad de cicatrización de las mismas. La adecuada nutrición del paciente va a hacer que el riesgo de desarrollar LPP disminuya y que, en caso de que aparezcan, su curación sea más rápida y con menos complicaciones. Por tanto, la evidencia sugiere que, una persona con alto riesgo de LPP, sí se beneficiaría en primer lugar de enriquecer la dieta con proteínas, si no es suficiente, se utilizarían suplementos dietéticos y si no es posible o suficiente la vía oral se recurriría a la suplementación por otras vías como la enteral o parenteral.
Una GPC australiana acerca de las LPP(1), actualizada en 2023 hace las siguientes recomendaciones* atendiendo al estado nutricional de una persona con riesgo de desarrollar LPP:
- Promover la suplementación nutricional si una persona desnutrida corre el riesgo de desarrollar una LPP. (Nivel III). Ya que los nutrientes son fundamentales para la integridad celular y los datos sugieren que un suplemento nutricional puede tener un efecto moderado en la prevención del desarrollo de LPP, principalmente en las LPP en fase inicial. Se debe controlar la ingesta dietética a través de las comidas y otros suplementos para evaluar su adecuación.
- Garantizar una ingesta alimentaria adecuada para prevenir la desnutrición en la medida en que sea compatible con los deseos de la persona. (Nivel I). Una nutrición adecuada es esencial para la vida y la desnutrición está asociada con el desarrollo de LPP. Proporcionar una adecuada nutrición favorece la curación de las LPP o la mejora del estado de la LPP y está asociada con la prevención de las LPP. No obstante, el plan nutricional debe ser coherente con los objetivos personales y la situación clínica de la persona.
- Si la ingesta alimentaria sigue siendo inadecuada o no es posible, se debe considerar el apoyo nutricional por otras vías con el objetivo de lograr un balance de nitrógeno positivo (30–35 calorías/kg/día y 1,25–1,50 g de proteína/kg/día) de acuerdo con los objetivos de la atención. (Nivel II). El anabolismo se facilita con un balance de nitrógeno positivo y cuando las personas no pueden satisfacer las necesidades nutricionales mediante la ingesta oral, se deben adoptar métodos alternativos para optimizar el estado nutricional.
- Administrar suplementos de vitaminas y minerales si se confirman o sospechan deficiencias. (Nivel I). La contribución única de vitaminas, minerales o aminoácidos específicos es incierta. Sin embargo, los suplementos mejorados que consisten en varias combinaciones de vitaminas A, C, E, zinc, ácidos grasos y arginina se asocian con la curación de las LPP y/o la prevención de la formación de LPP. Los suplementos de aminoácidos han sido eficaces en la curación de algunas heridas no relacionadas con la presión. La evidencia emergente sugiere que la arginina puede aumentar la velocidad de curación en pacientes con LPP.
La GPC internacional (Panel asesor europeo sobre LPP, Panel asesor nacional sobre LPP y Alianza Pan-Pacífico sobre LPP [EPUAP/NPIAP/PPPIA]) sobre prevención y tratamiento de las úlceras por presión/lesiones(2) indica*:
- Realizar una evaluación nutricional integral para los adultos con riesgo de sufrir una LPP y para todos los adultos con una LPP. (Nivel de evidencia = B2; Nivel de recomendación = ↑↑)
- Desarrollar un plan de atención nutricional individualizado para personas con o en riesgo de tener una LPP que estén desnutridas o en riesgo de desnutrición.(Nivel de evidencia = B2; Nivel de recomendación = ↑↑)
- Optimizar la ingesta de energía para personas con riesgo de sufrir LPP que están desnutridas o en riesgo de desnutrición. (Nivel de evidencia = B2; Nivel de recomendación = ↑)
- Ajustar la ingesta de proteínas para personas con riesgo de sufrir LPP que están desnutridas o en riesgo de desnutrición. (Declaración de buenas prácticas)
- Proporcionar de 30 a 35 kcalorías/kg de peso corporal/día a adultos con una LPP que estén desnutridos o en riesgo de desnutrición. (Nivel de evidencia = B1; Fuerza de recomendación = ↑)
- Proporcionar de 1,25 a 1,5 g de proteína/kg de peso corporal/día a adultos con una LPP que estén desnutridos o en riesgo de desnutrición. (Nivel de evidencia = B1; Fuerza de recomendación = ↑↑)
- Ofrecer alimentos ricos en calorías y proteínas y/o complementos nutricionales además de la dieta habitual a los adultos que corren el riesgo de desarrollar una LPP y que también están desnutridos o en riesgo de desnutrición, si los requerimientos nutricionales no pueden satisfacerse con una ingesta dietética normal. (Nivel de evidencia = C; Nivel de recomendación = ↑)
- Ofrecer complementos nutricionales ricos en calorías y proteínas además de la dieta habitual a los adultos con una LPP que están desnutridos o en riesgo de desnutrición, si los requerimientos nutricionales no pueden satisfacerse con una ingesta dietética normal. (Nivel de evidencia = B1; Nivel de recomendación = ↑↑)
- Proporcionar suplementos nutricionales orales o fórmulas enterales con alto contenido calórico y proteico, arginina, zinc y antioxidantes a adultos con una LPP de categoría/estadio II o superior que estén desnutridos o en riesgo de desnutrición.(Nivel de evidencia = B1; Nivel de recomendación = ↑)
En el contexto nacional, la GPC actualizada en mayo de 2023, sobre prevención de LPP(3) expresa que, el estadio de LPP, el riesgo de aparición y la dificultad de cicatrización tiene una correlación con el déficit nutricional, especialmente con el aporte proteico y los niveles de albúmina. Hace las mismas recomendaciones que las GPC anteriores así como el resto de las GPC de las diferentes Comunidades Autónomas(4-8).
*Consultar en documento original los niveles de evidencia y grados de recomendación.