Los pocos estudios realizados que comparan diferentes técnicas para la extracción de una garrapata adherida en la piel, desaconsejan el empleo de sustancias ó de métodos para "ahogar" o eliminar la garrapata; siendo el método habitualmente recomendado la tracción suave, sin rotación, tomando con una pinzas la garrapata en la zona más próxima posible a la piel.
Una revisión sistemática realizada en 2002 para responder esta misma pregunta(1), identificó 40 referencias, de las cuales tan solo 2 aportaban información de interés. Se trataba de estudios comparativos, no aleatorizados, en los que se probaban diferentes técnicas en garrapatas adheridas en animales y se comprobaba la extracción completa de la misma. Dado que la garrapata tiene una tasa de 3 a 15 respiraciones por hora, las sustancias utilizadas para el ahogamiento (aceite, alcohol, vaselina, gasolina...) no resultaron efectivas; siendo el mejor método, para no dejar partes de la boca incrustadas en la piel, el realizar una tracción suave con pinzas.
Posterior a esta revisión no hemos encontrado ensayos clínicos realizados y tan solo una serie de 9 pacientes atendidos por presentar una garrapata de ciervo adherida en la piel(2). En los 9 casos la extracción se realizó con éxito, vertiendo primero jabón líquido con un algodón durante 30 a 60 segundos sobre la garrapata y luego absorbiendo el jabón con un algodón seco.
Los sumarios de evidencia(3,4), guías de práctica clínica(5,6) , información a pacientes (7) y revisiones narrativas(8,9,10) identificadas coinciden en recomendar como método de extracción, seguir los siguientes pasos:
- Limpiar la zona de la piel (con povidona yodada ) y utilizar guantes no estériles.
- Con unas pinzas de punta fina con dientes se intentará coger la garrapata por la zona más proximal a la piel que sea posible.
- Mediante una ligera presión hacia arriba la traccionaremos de forma progresiva, con suavidad pero con firmeza, hasta su desprendimiento, siendo importante no traccionarla de forma brusca, ni rotarla para evitar que parte del aparato succionador permanezca en la piel.
- No exprimir, ni aplastar ni perforar el cuerpo de la garrapata, ya que sus fluidos pueden contener agentes infecciosos.
- Después de retirar la garrapata, limpiar bien el área de la mordedura y sus manos (con alcohol para fricciones, un exfoliante yodo, o agua y jabón).
- Si se quedaran partes de la boca de la garrapata en la piel, hay quien recomienda tratar de extraer mediante pinzas o con una aguja estéril o la punta de una hoja de bisturí (8); mientras que otros(3,5) indican que si no fuera posible retirar la boca fácilmente con pinzas limpias, no retirarlas con bisturí y dejar que sean expulsadas de forma espontánea.