No hemos encontrado ningún estudio que realice una evaluación económica, o de efectividad, sobre la realización de mamografías periódicas en pacientes menores de 50 años diagnosticadas de mastopatía fibroquística. Los sumarios de evidencia indican que la realización de estudios de imagen en el seguimiento de una mujer diagnosticada de mastopatía fibroquística estará condicionada por las características individuales de cada situación clínica y que puede solicitarse ecografía o mamografía.
Una dificultad para localizar estudios sobre mastopatía fibroquística puede estar condicionada porque se trata de un diagnóstico heterogéneo y difícil de precisar. Dentro de las lesiones no proliferativas de la mama, incluye términos como cambios fibroquísticos, enfermedad fibroquística de la mama, mastitis crónica quística, o displasia mamaria(1).
Sobre el seguimiento, el sumario de evidencia de Uptodate sobre lesiones quísticas de la mama (2) indica que, tras establecer el diagnóstico de una lesión quística, debe realizarse un examen clínico anual de la mama y estudios de imagen cada 6 o 12 meses, durante uno o dos años, hasta que se observe estabilidad de las lesiones.
El sumario de Best Practice sobre enfermedad fibroquística de la mama (3) señala que el seguimiento dependerá de la presentación clínica y de los síntomas. En las pacientes que continúen con dolor será aconsejable realizar una monitorización cada 3 a 6 meses, en función de la severidad de los síntomas y de su impacto en la vida cotidiana. Sobre los estudios de imagen señala que " dependiendo del riesgo deberá solicitarse una mamografía anual".
Una guía de práctica clínica, establece por consenso(4) que en mujeres, de 40 o más años, con una masa palpable en la mama y en las que el estudio inicial con mamografía es de probable benignidad sería apropiado realizar el seguimiento a corto plazo con pruebas de imagen. Las pruebas idóneas en este caso serían tanto la mamografía como la ecografía; sin que la guía llegue a precisar la periodicidad de su realización.
Una revisión narrativa reciente(5), sobre el seguimiento de la mujer diagnosticada de mastopatía fibroquística, concluye que si la paciente está asintomática no es preciso un seguimiento y que si hay síntomas se solicitará "ecografía y/o mamografía", con una periodicidad variable en función de la edad y de otros factores de riesgo (habitualmente cada 2 años).