Dos sumarios de evidencia y dos guías de práctica clínica, en base a una revisión sistemática publicada en el 2011, señalan la superioridad de nifedipino frente a otros tocolíticos en gestantes con amenaza de parto prematuro (APP).
La revisión sistemática, publicada en 2011, y realizada con el objetivo de determinar la eficacia y seguridad de nifedipino como tocolítico en mujeres con APP(1), incluyó 26 ensayos (con un total de 2179 mujeres). Nifedipino, cuando se tomó durante 7 días y con inicio del tratamiento antes de la semana 34 de embarazo, se asoció a una reducción significativa en el riesgo de parto prematuro, de "distres" respiratorio, enterocolitis necrotizante, hemorragia intraventricular, ictericia neonatal y de ingresos en la unidad de cuidados intensivos de neonatología, comparado con agonistas de los receptores beta-2 adrenérgicos. No hubo diferencia entre nifedipino y el sulfato de magnesio en la efectividad como tocolítico. Nifedipino se asoció a menores efectos adversos que agonistas de los receptores beta-2 adrenérgicos y sulfato de magnesio. La revisión concluye que nifedipino es superior a los agonistas de los receptores beta 2 y al sulfato de magnesio como tocolítico en mujeres con APP.
Una sinopsis de esta revisión sistemática(2) señala que, en general, la revisión estuvo bien realizada, pero que las conclusiones en relación a la comparación con sulfato de magnesio son excesivamente firmes dado que los ensayos clínicos realizados son muy pocos y de muestra pequeña. Resalta también la ausencia de evidencia para justificar el empleo de nifedipino como un tocolítico a largo plazo después de un episodio de APP y que son necesarios estudios de investigación para evaluar la dosis óptima de nifedipino y la seguridad de su utilización en mujeres con gestaciones múltiples, en rotura prematura de la bolsa y con edades gestacionales muy bajas.
Un sumario de evidencia de Uptodate(3) en las recomendaciones en la elección de un fármaco como tocolítico en APP, resume que:
- En mujeres entre la semana 24 a 32 de gestación que son candidatas a tocolisis y que requieren de sulfato de magnesio como neuroprotector, sugieren la indometacina como el fármaco de primera línea. Se debe evitar el empleo de indometacina en gestaciones de más de 32 semanas y no prolongarlo más de 72 horas por los efectos secundarios que parecen estar relacionados (estrechez o cierre prematuro del ductus arterioso). Si hay contraindicaciones para indometacina, sugieren el empleo de nifedipino, aunque hay que ser muy cuidadoso con el empleo simultáneo de bloqueantes de los canales del calcio y sulfato de magnesio.
- En mujeres de la semana 32 a la 34 sugieren nifedipino como el fármaco de elección para la tocolisis. Como fármaco de segunda línea sugieren atosiban.
El sumario de Dynamed(4), resume la revisión sistemática citada(1) y señala la superioridad de nifedipino comparado con agonistas beta-2.
El sumario de Best Practice(5) clasifica en el parto prematuro a los calcio antagonistas como una intervención con "probabilidad de que sea efectivo para reducir las contracciones". Resume que son similares los bloqueantes de calcio en reducir la mortalidad perinatal a otros agenes tocolíticos, aunque no hay comparaciones directas con beta-2 agonistas y son más efectivos en reducir la morbilidad que los beta-2 agonistas.
En relación a las recomendaciones contenidas en guías de práctica clínica:
- Una guía inglesa(6) concluye que nifedipino y atosiban tienen una efectividad comparable en retrasar el nacimiento hasta un período de 7 días y que, comparado con beta agonistas, nifedipino está asociado a resultados neonatales mejores; aunque no existen datos a largo plazo. Afirma que no hay ensayos que analicen nifedipino comparado con placebo en el tratamiento del parto prematuro. Cuando se compara con otros tocolíticos (ritrodina en la mayoría de los estudios) los calcio antagonistas se asocian a un menor número de efectos secundarios. La guía señala que nifedipino estaría contraindicado en mujeres con enfermedad cardíaca y que debe utilizarse con precaución en mujeres con diabetes o embarazos múltiples, por el riesgo de edema pulmonar.
- Una guía australiana(7) recomienda como tocolítico de elección el nifedipino y lo justifica en la eficacia y seguridad comparada con el resto de fármacos tocolíticos. La guía incluye un protocolo de administración de este fármaco.
- Una guía americana(8) como recomendación basada en una buena y consistente evidencia señala que se emplee, como fármaco tocolítico en primera línea de terapia, tras la administarción de esteroides antenatales, un agonista beta adrenérgico, o un bloqueantes de los canales del calcio, o antiinflamatorios no esteroideos para la prolongación a corto plazo del embarazo (hasta 48 horas). Esta guía no contiene ninguna recomendación específica para nifedipino.
En cuanto a la dosificación de nifedipino:
- Best Practice(5) y la guía inglesa(6) indican que nifedipino presenta efectos adversos dependientes de la dosis y que estos son más frecuentes tras una dosis total de 60 mg. Recomiendan comenzar con nifedipino oral 30mg., seguido de 10-20 mg. cada 4-6 horas.
- La guía australiana(7) recomienda una dosis oral inicial de 20mg. Si las contracciones uterinas persisten después de 30 minutos se podrían administrar dos dosis más de 20 mg por vía oral a intervalos de 30 minutos. Si cesan las contracciones, se puede administrar una dosis de mantenimiento de 20 a 40 mg. cada 6 horas, dependiendo de la actividad uterina y de otras circunstancias clínicas. La dosis máxima diaria sería de 160 mg.