Una revisión sistemática fue publicada en el 2002, siendo su objetivo evaluar la evidencia para la aceptación y efectividad del cribado, en los centros asistenciales sanitarios, de la violencia doméstica hacia las mujeres 1 . De 9 estudios incluidos que comparaban la realización o no del cribado, en 8 con el cribado realizado por los profesionales de la salud, se detectaba una gran proporción de abusos domésticos. La calidad metodológica, en general, de los estudios fue pobre. No encontraron estudios que midieran resultados en calidad de vida, en salud mental o los daños potenciales en las mujeres que se les realizaba el screening. Como conclusiones señala: Aunque la violencia doméstica es un problema común con consecuencias importantes para la salud de las mujeres,la aplicación de programas de cribado no está justificada.Son necesarias evidencias en el beneficio de las intervenciones específicas y en la ausencia del daño con el cribado. Aclara en la discusión que, dadas su alta prevalencia y la gravedad del problema, la violencia doméstica requiere una respuesta desde los servicios de salud y que la debilidad de la evidencia encontrada no implica que no se deba intervenir.
Otra revisión sistemática posterior más amplia 2 confirmó estos mismos hallazgos sobre el cribado: "existen instrumentos [cuestionarios y escalas] que pueden identificar a las mujeres que han experimentado violencia de su pareja íntima. No hay estudios que en un diseño comparativo hayan analizado la efectividad del cribado cuando el objetivo a medir es la mejora en resultados para la mujer (reducir la violencia o mejora de la salud)." Una revisión de la librería Cochrane , orientada en traumas orales y dentales 3 no localizó ningún ensayo clínico que reuniera los criterios de inclusión. Las conclusiones de los autores son que "No existen pruebas que apoyen o refuten que el cribaje (screening) sobre violencia en el hogar en adultos con lesión dental o facial sea beneficioso o perjudicial. Las herramientas de cribaje (screening) para detectar violencia en el hogar existen, pero ningún ECA ha evaluado específicamente su efectividad para los pacientes que se presentan con lesiones faciales o dentales". : "Sin embargo, algunos autores han expresado que el cribaje (screening) sobre la violencia en el hogar puede estar justificado sobre la base de la prevalencia. Las lesiones en la cara suelen ser evidentes, de modo que los dentistas y los cirujanos orales y maxilofaciales deberían cuestionar de rutina la causa de la lesión y documentar cuidadosamente los hallazgos. El entrenamiento de los dentistas y los cirujanos orales y maxilofaciales, la disponibilidad de herramientas de cribaje (screening) sensibles y las intervenciones efectivas pueden mejorar los resultados de la violencia en el hogar".El U.S. Preventive Services Task Force ( USPSTF), revisó la recomendación del cribado sobre violencia doméstica en el 2004,4 con conclusiones similares a las otras revisiones sistemáticas :" el USTPTF encontró insuficiente evidencia a favor o en contra para recomendar el cribado de rutina para el abuso físico o abandono en los niños de padres o tutores, de violencia doméstica hacia las mujeres por su pareja íntima o para abuso de ancianos por sus cuidadores".
Una guía basada en el consenso de expertos en USA ,publicada en 2004,5 recomienda,que:
- Los profesionales sanitarios deben preguntar sobre exposición actual y a lo largo de su vida a la violencia doméstica, incluyendo preguntas directas sobre abuso físico, emocional y sexual.
- La evaluación debe ser realizada de forma rutinaria, independientemente de la presencia o ausencia de indicadores de abuso.
- La guía detalla en qué situaciones y bajo qué condiciones deben ser realizadas estas preguntas.
Recientemente se ha publicado,con buenos resultados, la validación interna (estabilidad, fiabilidad, consistencia interna) de un cuestionario en castellano para el cribado de violencia doméstica. Se realizó en consultas de medicina interna de en un hospital de Buenos Aires( Argentina) 6.