Para contestar esta pregunta se han revisado las recomendaciones de las guías de práctica clínica sobre fibrilación auricular localizadas y actualizadas más recientemente(1-4).
Con los datos de esta paciente (mujer, 85 años y diagnóstico de hipertensión arterial) para dos guías(1-2), sería considerada de riesgo elevado para trombosis y para las otras dos sería de riesgo moderado, pero con presencia de más de un factor de riesgo(3-4).
Pero, las cuatro guías (1-4) coinciden en la recomendación de proponer a esta paciente anticoagulación a largo plazo con anticoagulantes (warfarina o acenocumarol).[Recomendación Grado A: basada en ensayos clínicos aleatorizados]. En el caso de que presentara un riesgo elevado de sangrado u otra incompatibilidad para el tratamiento con anticoagulantes orales, podría valorarse el tratamiento con antiagregantes.
Las guías también señalan que debe adoptarse una decisión individualizada, siendo preciso valorar el beneficio de la intervención en relación al riesgo de sangrado.
La Herramienta de Ayuda a la Toma de Decisones en fibrilacion auricular no valvular, publicada recientemente por la Agencia de Evaluación de Tecnologías Sanitarias de Andalucía(5), para esta paciente, estima que:
- el riesgo de presentar un embolismo cerebral durante un año, es del 4% sin ninguna medicación antitrombótica, del 3% con aspirina y del 2% con anticoagulantes orales.
- el riesgo de un sangrado grave a lo largo de un año sería de un 2% si toma aspirina y de un 3% si toma acenocumarol o warfarina.
La lectura de los anexos de este informe puede ser de gran utilidad para trasladar a la paciente la información de los beneficios y riesgos que suponen cualquiera de las dos intervenciones y tomar una decisíón teniendo en cuenta los valores y las expectativas de la paciente.