Una guía(1) sobre la dieta baja en bacterias indica que si un paciente tiene su sistema inmunológico debilitado, seguir esta dieta reducirá el riesgo de enfermar por comer alimentos y que con frecuencia se recomienda esta dieta antes y después de algunos tratamientos para el cáncer. La guía indica en una tabla los alimentos recomendados y los no recomendados y entre los primeros, en el apartado de dulces incluye el chocolate.
Una Guía de Práctica Clínica (GPC)(2) realizada por un grupo de expertos de la Sociedad Americana de Cáncer (ACS) señala que uno de los problemas comunes en los pacientes con cáncer de esófago es el reflujo de algunos alimentos. El chocolate, la grasa, el alcohol, el café, la menta verde, la hierbabuena, el ajo, y la cebolla pueden disminuir la presión del esófago y deben ser evitados. Otros alimentos ácidos como los que contengan tomate, pueden causar irritación. Concluyen que hay que tener en cuenta por tanto no incluir estos alimentos en las personas que tienen cáncer gástrico.