La búsqueda no ha identificado ensayos clínicos realizados en gestantes con oftalmopatía por Graves-Basedow (OGB).
La lectura de una revisión sobre el tratamiento de la OGB (1) y la búsqueda realizada en Medline, ha localizado como terapias sobre las que hay publicadas información experimental, además del tratamiento quirúrgico, la irradiación orbital y los bolos de corticoides, los fármacos octreotide (un análogo de la somatostatina) y rituximab.
Sobre el octreotide hay publicados tres ensayos clínicos randomizados que lo comparan con placebo:
- Uno realizado en 25 pacientes(2), a los que durante 4 meses se les administró de forma intramuscular octreotide o suero salino. Una escala de medición clínica de la OGB, mejoró de forma significativa en el grupo del octreotide; así como también mejoró la medición de apertura de los párpados. No hubo cambios en el rango de movimientos, en la proptosis, ni el volumen de tejido retrobulbar. En el grupo de intervención estaban hiperrepresentados los pacientes con retracción ocular muy importante y eso podría haber influido en los resultados.
- Otro realizado en 51 pacientes(3), en el que solo mejoró en el grupo de tratamiento con octreotide, la proptosis .
- Y, por último, en 50 pacientes (4) no hubo una mejoría clínica significativa alguna sobre el placebo.
La conclusión de la revisión citada(1) es que no parece que el octreotide sea beneficioso como tratamiento de rutina de la OGB.
Sobre el rituximab el estudio encontrado es la comunicación del efecto del tratamiento en un caso aislado(5) en el que hubo un mejoría clínica importante y ausencia de linfocitos en las muestras de tejido orbital.
Sobre el empleo de estos fármacos en el embarazo, la base de datos Drugdex de Micromedex (6), establece para el:
- Octreotide: Según la clasificación de fármacos administrados en el embarazo de la U.S. Food and Drug Administration: Categoría B, en cualquier trimestre de la gestación.(La categoría B indica que los estudios en animales en reproducción no han demostrado un riesgo fetal, pero que hay estudios no controlados en mujeres gestantes o en animales que han mostrado efectos adversos, que no han sido confirmados en estudios controlados realizados en mujeres durante el primer trimestre). El fármaco cruza la barrera placentaria y debería ser empleado en el embarazo solo si es claramente necesitado.
- Rituximab: La categoría, de la misma clasificacion, sería la C (Estudios en animales han demostrado efectos teratógenos en el feto y no hay estudios controlados en mujeres o estudios en mujeres y en animales que sean válidos. El fármaco debería ser tomado durante el emnarazo solamente si los beneficios potenciales justifican el riesgo potencial para el feto). No han sido publicados estudios en mujeres gestantes expuestas al rituximab.
- Para la prednisolona la calificación sería una categoría C. Se desconoce si cruza la placenta y los estudios comunicados muestran como efecto adverso raro la insuficiencia adrenal en el neonato; pero el tratamiento con corticoides durante el embarazo obliga a monitorizar de forma cuidadosa a los recién nacidos para detectar hipoadrenalismo.