Aunque la evidencia es muy limitada, tras la revisión realizada concluimos que la tromboprofilaxis (farmacológica) rutinaria no estaría indicada en niños con inmovilización de la extremidad inferior con yeso o férula y sin factores de riesgo adicionales. En niños, la necesidad de tromboprofilaxis debería considerarse caso por caso, teniendo en cuenta los factores de riesgo individuales existentes.
Una pregunta incluida en el Banco de Preevid en 2019 también se centraba en la necesidad de tromboprofilaxis en un niño con inmovilización de miembros inferiores (MMII)(1). Tras la revisión realizada en ese momento se concluía básicamente que:
- La evidencia disponible era escasa y centrada en la tromboprofilaxis del niño hospitalizado.
- En general, las decisiones deberían ser individualizadas basadas principalmente en el número y la naturaleza de los factores de riesgo subyacentes.
- En un niño con alteración de la movilidad y un factor de riesgo adicional de trombosis venosa profunda (TVP), como, por ejemplo, obesidad, el riesgo de tromboembolismo venoso (TEV) sería moderado.
- En el caso del niño hospitalizado con una categoría de riesgo de TEV moderada se planteaba asegurar una hidratación adecuada, promover la movilización temprana, y utilizar medidas de profilaxis mecánica.
- En caso de que el niño presente múltiples factores de riesgo de TEV, debería considerarse la tromboprofilaxis farmacológica (fundamentalmente en el caso de los adolescentes, > 15 años, o en niños menores pero pospuberales).
- En el supuesto de plantear profilaxis farmacológica, las heparinas de bajo peso molecular (HBPM) se consideraban el fármaco de elección.
Como norma general, en el niño prepúber con alteración de la movilidad y ≤ 1 factor de riesgo, no se recomendaba la profilaxis farmacológica.
En la nueva búsqueda de información no se identifican guías de práctica clínica adicionales a las incluidas en dicha pregunta. Tampoco sumarios de evidencia que aborden la profilaxis antitrombótica del paciente pediátrico con fractura de MMII que precisa inmovilización con yeso o férula.
La actualización del sumario de evidencia de UpToDate sobre la prevención del TEV(2) en niños se sigue centrando en el niño hospitalizado y describe que:
- Las indicaciones para la profilaxis de la TEV en niños sin un episodio previo de TEV no están bien establecidas. Es importante considerar el número y la naturaleza de los factores de riesgo de TEV, si estos son transitorios o crónicos, y el riesgo de hemorragia.
- En pacientes hospitalizados con enfermedad aguda o en recuperación de una cirugía, se recomienda el uso de métodos mecánicos para la prevención de la TEV (p. ej., medias de compresión, dispositivos de compresión neumática intermitente), si se dispone de dispositivos de tamaño adecuado.
- Respecto a la indicaciones para la tromboprofilaxis farmacológica el sumario comenta que no existen estándares de práctica establecidos sobre cuándo iniciar la tromboprofilaxis y que se limitaría a niños con múltiples factores de riesgo de TEV y sin alto riesgo de complicaciones hemorrágicas. Enumera como factores de riesgo importantes de TEV en este contexto: antecedentes de TEV o trombofilia conocida; enfermedad crítica; cirugía (en particular, cirugía ortopédica y cardíaca); traumatismo; ventilación mecánica; presencia de un catéter venoso central; infección sistémica; estancia hospitalaria prevista ≥3 días; inmovilidad prolongada; edad (el riesgo es mayor en neonatos y adolescentes pospúberes); uso de anticonceptivos con estrógenos; obesidad; enfermedad inflamatoria intestinal activa.
- Cuando se decide administrar tromboprofilaxis farmacológica, se sugiere el uso de HBPM en lugar de otros fármacos (Grado de recomendación 2C: recomendación muy débil; otras alternativas pueden ser igualmente razonables).
También se ha revisado la actualización del sumario de evidencia sobre los factores de riesgo del TEV en niños(3) sin que se haga referencia en él a la inmovilización por lesión de MMII.
Tras varias búsquedas en las bases de datos de estudios habitualmente consultadas se identifican una serie de revisiones sistemáticas(4,5) y revisiones narrativas(6-8) sobre la profilaxis de TEV en niños pero todas hacen mención a la indicación de dicha intervención en el niño hospitalizado. Tan solo en una revisión narrativa(8) se plantea que, en la práctica, no se debería prescribir tromboprofilaxis a niños, preadolescentes o adolescentes, tras una fractura aislada; en caso de fracturas múltiples, en ausencia de factores de riesgo personales, tampoco existen argumentos a favor de iniciar la tromboprofilaxis.
De estos documentos extraemos que:
- El riesgo de TVP en niños es menor que en adultos.
- El riesgo es máximo antes del año y a partir de los 12 años, siendo igual al riesgo en adultos a los 16 años.
- La hidratación adecuada y la movilización temprana son la base de la tromboprofilaxis en el niño. También el uso de medidas de profilaxis mecánica podría estar indicado.
- La decisión de prescribir tromboprofilaxis farmacológica debería tomarse de forma individualizada, tras un análisis cuidadoso de los factores de riesgo del niño y del contexto clínico.