De la información contenida en los documentos consultados se desprende que, no están claros los beneficios del uso del corsé u otro tipo de aparatos ortopédicos, frente a solo reposo, en el tratamiento conservador de la espondilólisis.
Los Sumarios de Evidencia (SE) de UpTodate(1,2) señalan que la evidencia relacionada con el tratamiento conservador (no quirúrgico) de la espondilólisis y la espondilolistesis es extremadamente limitada. Por lo tanto, las recomendaciones se basan principalmente en estudios observacionales y la experiencia clínica de los autores. En uno de los SE(1) se indica que el reposo relativo suele ser el tratamiento más eficaz para niños y adolescentes con espondilólisis o espondilolistesis de bajo grado. Basan esta afirmación en varios estudios, entre ellos un metaanálisis(3) en el que se concluyó que los aparatos ortopédicos no parecen influir en el resultado clínico. El metaanálisis incluyó quince estudios observacionales, con un total de 665 pacientes, en los que se midió el resultado clínico del tratamiento conservador con o sin aparato ortopédico. La edad media de los pacientes incluidos osciló entre los 11,4 y 18,1 años. La tasa de éxito del tratamiento conservador en los estudios individuales osciló entre el 60% y el 100%. Cuando se agruparon los 665 pacientes en un modelo de efectos aleatorios, la tasa de éxito ponderada del tratamiento conservador fue del 83,9%. Un análisis de subgrupos que comparó 137 pacientes tratados sin corsé (no tratados o tratados solo con restricción de actividad y/o ejercicios) con 334 pacientes cuyo tratamiento incluía corsé mostro una tasa de éxito ponderada del tratamiento del 86% en los pacientes sin aparato ortopédico y del 89,0% en el grupo de pacientes tratados con un aparato ortopédico, resultados que no fueron significativamente diferentes (P = 0,75). Los aparatos ortopédicos no parecen influir en el resultado clínico del tratamiento.
En este mismo SE(1) también se hace referencia a una revisión narrativa(4) en la que se menciona que la verdadera inmovilización, en L5 y S1, se logra sólo con el uso de una extensión ortopédica hasta la pierna, y su uso rara vez se ha informado en la literatura. Por otra parte, en aquellos pacientes que realizan una correcta restricción de la actividad física, puede no estar claro si los beneficios se deben a la estabilización de la columna mediante corsé o solo a restricción de actividad. Por estas razones, el enfoque general del autor principal de esta revisión, es la terapia conservadora, inicialmente sin corsé, con reconsideración para su uso en aquellos pacientes cuyos síntomas persisten después de 6 a 12 semanas.
Por último, comentar que el SE(1) menciona que en el pasado las decisiones de tratamiento se basaban en la necesidad de lograr una curación ósea completa e implicaban el uso prolongado de un aparato ortopédico lumbar pero que la investigación y la experiencia posteriores sugieren que un enfoque tan conservador es innecesario, ya que la curación ósea no es necesaria para un buen resultado y puede no ser posible en algunos casos. Señala que varios estudios informan buenos resultados sin aparatos ortopédicos, y muchos pacientes llegan a una unión fibrosa no ósea y les va bien.
El SE de Dynamed(5) por su parte, indica que el tratamiento conservador inicial de elección debe consistir en el cese de la actividad física, el uso de ortesis toraco lumbosacra anti lordótica (TLSO, por sus siglas en inglés) y fisioterapia supervisada. El régimen de tratamiento no quirúrgico propuesto en este SE aconseja al paciente usar TLSO a tiempo completo (20 horas/día de uso) mientras se evita realizar deporte y disminuir la actividad durante un periodo ≥ 3 meses. Después de este período, se recomienda reintroducir la actividad deportiva con el uso continuo de TLSO a tiempo completo durante 3 meses adicionales e iniciar la fisioterapia, con el objetivo principal de reducir la lordosis lumbar y la contractura de los isquiotibiales (si está presente). Una vez que el dolor ha mejorado los ejercicios deben incluir fortalecimiento (central) y estiramiento (particularmente los músculos de la espalda y la fascia toracolumbar). El criterio de valoración para el uso de TLSO no está bien establecido, pero generalmente se suspende de manera progresiva una vez que el paciente está asintomático, independientemente de que la unión ósea se haya producido o no.
Una Revisión Sistemática(6) sobre los tratamientos aplicados en pacientes menores de edad con espondilólisis y su relación con la vuelta al deporte, concluye que en cuanto a los tratamientos conservadores el cese de la actividad deportiva es el factor clave y que los ejercicios de fortalecimiento, tras este descanso, son de gran importancia para la reincorporación a la práctica del deporte. Con respecto al uso de aparatos ortopédicos, los autores indican que no se obtienen resultados claros acerca de su eficacia.
No obstante, identificamos una serie de casos(7) con cuatrocientos treinta y seis pacientes, menores de edad, con espondilólisis, que fueron tratados eficazmente de forma conservadora con una ortesis toracolumbar personalizada y cese de actividad durante 3 meses seguido de un programa de fisioterapia organizado . Informó que el 95% de los pacientes lograron excelentes resultados según los criterios de Odom modificados. El 5% restante de los pacientes obtuvo buenos resultados ya que solo requirieron fármacos antiinflamatorios no esteroides de manera ocasional para aliviar el dolor. Los espasmos de la espalda se resolvieron y la tensión de los isquiotibiales y la amplitud de movimiento volvieron a la normalidad en todos los pacientes. Todos los pacientes regresaron a su nivel de actividad previo a la lesión y ningún paciente necesitó cirugía.