Según la información encontrada en los recursos habituales de este servicio se puede concluir que un programa de ejercicio físico efectivo para el manejo de una persona con obesidad/sobrepeso consistiría en un programa que abarque tanto ejercicios aeróbicos como de fuerza o también llamados de resistencia (ver abajo) y que se deben considerar los problemas de salud existentes, la edad y la preferencia del tipo de ejercicio, a la hora de recomendar un programa de ejercicio físico.
De las Guías de Práctica Clínica (GPC) consultadas, la de “National Institute for Health and Care Excellence” sobre la obesidad y su manejo(1) (publicada en 2014 aunque actualizada en 2023) menciona que, para prevenir la obesidad, la mayoría de las personas pueden necesitar realizar entre 45 y 60 minutos de actividad de intensidad moderada al día, especialmente si no reducen su ingesta de energía y que es conveniente aconsejar a las personas que han sido obesas y han perdido peso que, es posible que necesiten realizar entre 60 y 90 minutos de actividad al día para evitar recuperar peso; sin embargo, no se especifica qué tipo de ejercicio realizar.
Asimismo expresa, que hay que tener en cuenta la condición física actual de la persona y su capacidad para todas las actividades.
En cambio, otras GPC sobre el manejo de la obesidad publicadas posteriormente, como la europea(2) (2019) y la canadiense(3) (2020), si mencionan el tipo de ejercicio aconsejado. La GPC europea(2) refiere, que la prescripción general para la población es de al menos 150 min/semana de actividad aeróbica moderada, equivalente a caminar a 5-6 km/h. La actividad física aeróbica, se puede combinar con 2- 3 sesiones/semana de ejercicios de resistencia que comprendan de 8 a 10 ejercicios que involucren grandes grupos de músculos.
La GPC canadiense(3) indica que la actividad física sea aeróbica (30 a 60 minutos de intensidad moderada a vigorosa la mayoría de los días de la semana) para los adultos que desean:
- Lograr la disminución de pequeñas cantidades de peso corporal y pérdida de grasa. (Nivel 2a, Grado B)*
- Lograr reducciones de la grasa visceral abdominal (Nivel 1a, Grado A*) y de la grasa ectópica como la grasa del hígado y del corazón (Nivel 1a, Grado A)* incluso en ausencia de pérdida de peso.
- Favorecer el mantenimiento del peso después de la pérdida de peso. (Nivel 2a, Grado B)*
- Favorecer el mantenimiento de la masa magra durante la pérdida de peso. (Nivel 2a, Grado B)*
- Incrementar la aptitud cardiorrespiratoria (Nivel 2a, Grado B)* y la movilidad. (Nivel 2a, Grado B)*
También menciona que para los adultos con sobrepeso u obesidad, el entrenamiento de resistencia puede promover el mantenimiento del peso o aumentos modestos en la masa muscular o la masa magra y la movilidad (Nivel 2a, Grado B)*
Por último, refiere que el aumento de la intensidad del ejercicio, incluido el entrenamiento en intervalos de alta intensidad, puede lograr mayores aumentos en la aptitud cardiorrespiratoria y reducir la cantidad de tiempo necesario para lograr beneficios similares a los de la actividad aeróbica de intensidad moderada (Nivel 2a, Grado B)*
Igualmente el Manual de enfermedades crónicas de “Queensland Health”(4) publicado en 2021 en el apartado de hábitos saludables, recomienda para el grupo de edad comprendido entre 18 a 64 años que:
- Hacer cualquier actividad física es mejor que no hacer nada
- Cada semana acumular:
- 150 a 300 minutos de actividad física de intensidad moderada o
- 75 a 150 minutos de actividad física de intensidad vigorosa o
- una cantidad equivalente de actividad combinada moderada y vigorosa
- Realizar actividades de fortalecimiento muscular al menos 2 días a la semana.
El Sumario de Evidencia (SE) de Dynamed sobre la actividad física para bajar de peso(5), expone:
A) Recomendaciones de “American Association of Clinical Endocrinologists/American College of Endocrinology” (AACE/ACE) (2016):
- Actividad física aeróbica (AACE/ACE grado A, mejor nivel de evidencia 1)* con un aumento progresivo en el volumen y la intensidad del ejercicio.
- objetivo semanal de 3-5 sesiones por un total de ≥ 150 minutos
- entrenamiento de resistencia (AACE/ACE grado A, mejor nivel de evidencia 1)*
- objetivo semanal de 2-3 sesiones dirigidas a los principales grupos de músculos
El programa individual de actividad física debe tener en cuenta las capacidades, preferencias y limitaciones físicas y relacionadas con la salud del paciente (AACE/ACE grado C, mejor nivel de evidencia 4)*
B) Recomendaciones del “American College of Sports Medicine” (ACSM) (2009) para regímenes de ejercicio para bajar de peso:
- Se recomienda actividad física de intensidad moderada (Categoría de evidencia B del ACSM)*
- < 150 minutos/semana promueve una pérdida mínima
- > 150 minutos por semana pueden resultar en una pérdida de 2 a 3 kg > 225-425 minutos/semana pueden resultar en una pérdida de 5-7,5 kg
- el entrenamiento de resistencia con o sin restricción dietética no es efectivo para perder peso (Evidencia Categoría B del ACSM)*
- para el mantenimiento del peso después de la pérdida de peso, se recomienda realizar 200-300 minutos/semana de actividad física (Evidencia Categoría B del ACSM)*
En los SE de Uptodate consultados sobre obesidad en el adulto y el rol del ejercicio físico(6,7) se indica que se prefiere un programa multicomponente de ejercicio que incluya entrenamiento aeróbico y de resistencia. Aportan también que se deben considerar los problemas de salud existentes, la edad y la preferencia del tipo de ejercicio, a la hora de recomendar un programa de ejercicio físico.
El SE de BMJ Best Practice acerca de la obesidad en el adulto(8) también recoge que si el paciente es físicamente capaz, se incluirá en un programa de ejercicio con 5 sesiones por semana de 30 minutos por sesión (que se puede ir incrementando), en combinación con entrenamiento de fuerza; además, se debe fomentar un aumento de otras actividades físicas (por ejemplo, usar las escaleras en lugar del ascensor).
[La actividad física es cualquier movimiento corporal sostenido que aumenta el gasto de energía, como caminar, trotar, bailar, jardinería, nadar, realizar trabajos físicos pesados, etc. El ejercicio es una subcategoría de actividad física que se planifica, tiene un propósito y se repite regularmente para mejorar o mantener la salud y el estado físico. El ejercicio se puede dividir en cuatro tipos principales, aunque pueden superponerse para una actividad determinada(9). Incluyen:
- Ejercicios aeróbicos diseñados para aumentar la aptitud cardiovascular y respiratoria, como caminar o correr.
- Ejercicios de fuerza (o resistencia) diseñados para aumentar la fuerza muscular, como levantamiento de pesas o ejercicios de resistencia del peso corporal (p. ej., dominadas, flexiones, sentadillas)
- Ejercicios de equilibrio diseñados para mejorar el equilibrio y la propiocepción y prevenir caídas, como caminar de puntillas o hacer tai chi.
- Ejercicios de movilidad (o flexibilidad) destinados a mantener o mejorar el rango de movimiento alrededor de una articulación o alargar un músculo, como estiramiento o yoga.]
* Consultar en texto original el grado de recomendación.