Según los documentos consultados no estaría recomendado el cribado del cáncer de endometrio en las mujeres asintomáticas que toman tamoxifeno, por lo que no tendría ningún papel la realización rutinaria de ecografía transvaginal.
El sumario de evidencia (SE) de BMJ Best Practice sobre el cáncer de endometrio(1) explica que las mujeres premenopáusicas tratadas con tamoxifeno no tienen un riesgo aumentado de cáncer de endometrio y, por tanto, no precisan una monitorización adicional a los cuidados ginecológicos habituales.
Y que, en las mujeres postmenopáusicas, la vigilancia rutinaria del endometrio no se ha mostrado efectiva en el aumento de su detección precoz en las mujeres que no tienen un alto riesgo de cáncer y, en consecuencia, no está recomendada.
Añade además que el cribado con ecografía del engrosamiento del endometrio no ha demostrado una clara ventaja de supervivencia frente a la vigilancia clínica del sangrado posmenopáusico.
El SE de Dynamed sobre la terapia endocrina para el cáncer de mama precoz y localmente avanzado(2) recoge las recomendaciones de cribado de cáncer de endometrio en las pacientes asintomáticas en tratamiento con tamoxifeno de varias sociedades científicas:
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“National Comprehensive Cancer Network”: la ecografía de rutina no está recomendada en pacientes asintomáticas (categoría 2A*).
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“American Cancer Society/American Society of Clinical Oncology“: no se recomienda la evaluación periódica por imagen en pacientes sin sangrado anormal o “spotting” debido al riesgo de biopsias innecesarias.
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“American College of Obstetricians and Gynecologists”: la vigilancia rutinaria del endometrio, en las pacientes en tratamiento con tamoxifeno no está recomendada, salvo en las pacientes de alto riesgo de cáncer de endometrio.
El SE de Uptodate sobre el diagnóstico y cribado del cáncer de endometrio(3) explica que en la pacientes en tratamiento con tamoxifeno no existe un claro nivel de corte de grosor endometrial que se considere patológico. Los autores creen que en estas pacientes la evaluación basal del endometrio mediante ecografía transvaginal no juegua ningún papel.
La guía de práctica clínica (GPC) sobre el cribado del cáncer de endometrio del "National Cancer Institute"(4) indica que no es útil la vigilancia rutinaria mediante ecografía de las mujeres que toman tamoxifeno, debido a su baja especificidad y bajo valor predictivo positivo. Añade que la evaluación del endometrio en las mujeres que toman tamoxifeno debería limitarse a aquellas con sangrado vaginal sintomático.
Coinciden también con estas recomendaciones otras GPC y consenso de profesionales identificados:
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”German Society for Gynecology and Obstetrics”(5): No debe realizarse ecografía transvaginal para la detección de cáncer de endometrio en pacientes asintomáticas que reciben tamoxifeno (GR A, NE 3*).
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“Society of Obstetricians and Gynaecologists of Canada”(6): no debería realizarse la evaluación rutinaria ecográfica del grosor endometrial en las mujeres asintomáticas que toman tamoxifeno (II-1A*).
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“European Society for Medical Oncology”, “European Society for Radiotherapy & Oncology” y “European Society of Gynaecological Oncology”(7): no se recomienda el cribado rutinario de cáncer de endometrio en las mujeres asintomáticas que toman tamoxifeno (NE III; GR B*).
Y la GPC de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia(8), en 2016, igualmente afirmaba que el cribado de cáncer de endometrio durante el tratamiento con tamoxifeno no se había demostrado efectivo en la reducción de la mortalidad por este cáncer.
*Consultar categorías, NE (niveles de evidencia) y GR (grados de recomendación) en los documentos referenciados.
