Pregunta actualizada a 17 de noviembre de 2020
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Actualmente son muy escasos los estudios publicados sobre el empleo de la aspirina (acido acetilsalicílico [AAS]) y, en consecuencia, es muy limitada la información disponible sobre el posible papel del AAS en el tratamiento de la COVID-19. Señalar, no obstante, que hay varios ensayos clínicos en curso en los que se evalúa su empleo y cuyos resultados podrán aportar más datos sobre su efectividad.
El sumario de evidencia de BMJ Best Practice sobre la COVID-19(1) plantea que la aspirina podría ser efectiva en las prevención de fenómenos trombóticos en los enfermos con COVID-19 y menciona que el ensayo “UK RECOVERY” está evaluando su efecto en estos pacientes.
Un estudio de cohortes retrospectivo(2) con 412 pacientes encontró que, tras ajustar por variables de confusión, el uso de AAS (n=98) en las primeras 24 horas de ingreso hospitalario o los 7 días anteriores se asociaba con una menor tasa de ventilación mecánica (Hazard Ratio ajustada [HRa] 0,56; intervalo de confianza [IC] del 95%: 0,37-0,85; p=0,007), ingresos en UCI (HRa 0,57; IC 95%: 0,38-0,85; p=0,005) y mortalidad hospitalaria (HRa 0,53; IC 95%: 0,31-0,90; p=0,02). No hubo diferencias estadísticamente significativas en cuanto a sangrado o fenómenos trombóticos.
En un ensayo clínico(3) se comparó un grupo intervención de 5 pacientes en los que se empleó el uso compasivo de tirofiban, clopidogrel, AAS y fondaparinux con un grupo control de otros 5 pacientes emparejados por edad, dímero D y escala SOFA (“Sequential Organ Failure Assessment“) en los que se administraba heparina de bajo peso molecular a dosis terapéuticas o profilácticas. El grupo intervención estaba constituido por 5 pacientes consecutivos con infección confirmada por SARS-CoV2, insuficiencia respiratoria tratada con CPAP (“continuous positive airway pressure”), infiltrados pulmonares bilaterales y dímero D mayor de 3 veces el límite superior de la normalidad. A los 7 días de inicio del tratamiento todos los pacientes del grupo control precisaban CPAP y esta se había suspendido en 4 del grupo intervención. En el grupo intervención 4 pacientes fueron dados de alta a domicilio pero un quinto paciente precisó intubación e ingreso en UCI por sepsis y distrés respiratorio, falleciendo a los 39 días de su ingreso; en el grupo control fallecieron 3 pacientes durante su ingreso.